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La Línea del Sacerdocio

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La extensión final de las bendiciones de Abraham—sacerdocio y templo—se ha realizado. Por revelación, el Señor le dio al presidente Spencer W. Kimball la buena noticia de que ahora todas las personas, sin importar raza o color, pueden recibir las bendiciones del sacerdocio. A continuación, se presenta el anuncio realizado por la Primera Presidencia el 9 de junio de 1978:

La Primera Presidencia de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días hoy dio a conocer la siguiente declaración:

“Al ser testigos de la expansión de la obra del Señor por toda la tierra, hemos estado agradecidos de que personas de muchas naciones hayan respondido al mensaje del evangelio restaurado y se hayan unido a la iglesia en números cada vez mayores. Esto, a su vez, nos ha inspirado con el deseo de extender a cada miembro digno de la iglesia todos los privilegios y bendiciones que el evangelio ofrece.

Conscientes de las promesas hechas por los profetas y presidentes de la iglesia que nos precedieron, de que en algún momento, en el plan eterno de Dios, todos nuestros hermanos que sean dignos podrán recibir el sacerdocio, y siendo testigos de la fidelidad de aquellos a quienes se les ha negado el sacerdocio, hemos suplicado larga y fervientemente en nombre de estos, nuestros hermanos fieles, pasando muchas horas en la sala superior del templo suplicando al Señor por guía divina.

Él ha escuchado nuestras oraciones y, por revelación, ha confirmado que ha llegado el día largamente prometido cuando cada hombre fiel y digno en la iglesia puede recibir el santo sacerdocio, con poder para ejercer su autoridad divina y disfrutar con sus seres queridos cada bendición que fluye de él, incluyendo las bendiciones del templo. En consecuencia, todos los miembros varones dignos de la iglesia pueden ser ordenados al sacerdocio sin distinción de raza o color. Los líderes del sacerdocio deben seguir la política de entrevistar cuidadosamente a todos los candidatos para la ordenación al sacerdocio de Aarón o de Melquisedec para asegurar que cumplan con los estándares establecidos de dignidad.

Declaramos con sobriedad que el Señor ha hecho conocer ahora su voluntad para la bendición de todos sus hijos en toda la tierra que escuchen la voz de sus siervos autorizados y se preparen para recibir cada bendición del evangelio.

Sinceramente,

La Primera Presidencia”

Ahora, en plena realidad, el evangelio se extiende a cada nación, tribu, lengua y pueblo. Las restricciones del pasado se levantan. El Señor nuevamente prueba que toda la humanidad son sus hijos, con igual oportunidad de llegar a ser como él.

El pleno significado de la misión de Abraham puede estar más allá de nuestra comprensión finita, pero es obvio que sus bendiciones se extienden verdaderamente a aquellos de cada linaje.

Qué amable y misericordioso es el Señor. Ahora, sin importar lo que hayamos hecho en nuestra preexistencia, nos permite esta oportunidad presente para realmente guardar nuestro segundo estado. Si lo hacemos, se nos promete que la gloria y el progreso se añadirán sobre nosotros a lo largo de las eternidades.