Capítulo 11
El recogimiento de israel
en la ultima dispensación
En este libro, usando las escrituras, hemos visto que nuestro Padre Celestial ha establecido, por medio de nuestro Redentor, un plan que nos permite venir aquí al mundo, sobreponernos a la muerte espiritual y volver a Dios.
Vimos que el plan es perfecto: Dios lo dirige todo, Cristo ya cumplió con su sacrificio redentor, y el Espíritu Santo esta listo y deseoso de ayudarnos. Ahora todo depende de nosotros, de nuestros esfuerzos, de nuestro afán para lograr las cosas de Dios.
Primero debemos demostrar fe y arrepentimiento, y recibir las ordenanzas apropiadas: el bautismo por agua y la imposición de manos para recibir el don del Espíritu Santo. Luego debemos tener un corazón quebrantado y un espíritu contrito, mientras continuamos ejercitando !a fe y el arrepentimiento que salvan. Así invitamos a la influencia del Espíritu Santo por nuestra obediencia a los mandamientos de Dios y por nuestro amor hacia nuestros semejantes. Entonces obtendremos la santificación, y con la santificación, podemos entrar en el reino celestial, volverá Dios. Y si perseveramos hasta el fin, sobreponiéndonos sin rebelarnos a pruebas y dificultades podemos hacer firme nuestra vocación y elección, obtener tronos y principados, y ser dioses con Dios para siempre jamás.
Por nosotros mismos, no podríamos salvarnos. Por eso nuestro Padre Celestial ha establecido, por medio de sus profetas, dispensaciones de su evangelio entre grupos de personas que lo reconocen como su Dios. En cada dispensación, al proveer su verdad, Dios organiza estos grupos de acuerdo con su ley, bajo un profeta que recibe constante revelación para todos los que forman parte del pueblo de Dios. Como tal, somos instruidos para que podamos efectuar los planes de Dios. Y en el proceso de llevar a cabo los designios de nuestro Padre Celestial, en el proceso de ayudarnos unos a otros a ganar salvación, nos perfeccionamos. Así también nosotros ganamos exaltación.
En este capítulo buscaremos lo que, como pueblo de Dios, se requiere de nosotros en esta dispensación. PRIMERO, veremos que ésta es la última dispensación, la dispensación del cumplimiento de los tiempos, la dispensación durante la cual debemos prepararnos para la segunda venida de Cristo y el establecimiento de su reino aquí en la tierra. SEGUNDO, encontraremos que, para preparar la tierra para este evento glorioso, hemos recibido dos mayores asignaciones: el recogimiento de Israel y el establecimiento de Sión. TERCERO, trataremos de entender por que y cómo el Señor organiza un pueblo de Dios, para que podamos aprender más acerca del establecimiento, la dispersión, y el recogimiento del pueblo de Israel.
LA DISPENSACIÓN DEL CUMPLIMIENTO DE LOS TIEMPOS
Previamente mencionamos que, a pesar de la muerte espiritual sufrida por todos los que venimos a este mundo, Dios no nos deja en la obscuridad total. Periódicamente nuestro Padre Celestial ha establecido, por medio de sus profetas, dispensaciones de su evangelio en la tierra.
Para que exista una dispensación, se necesita un profeta a quien nuestro Padre Celestial da las llaves de la dispensación, la autoridad y el poder del sacerdocio, así como la habilidad de recibir revelaciones de Dios, aunque obviamente hay otras (tal como el hermano de Jared o Lehi), típicamente hablamos de siete dispensaciones del evangelio.
| ADÁN | Moisés 5:4-12 |
| ENOC | Moisés 6:26-42 |
| NOE | Moisés8:12-30 |
| ABRAHAM | Abraham 2:6-11 |
| MOISÉS | Ex caps. 3-4; Moisés 1:1-9; DyC 84:17-28 |
| JESÚS Y SUS APOSTÓLES | Mt 16:18-19; 18-18; DyC 27:12-13; 128:20 |
| JOSE SMITH | JS-H 1:18-20; DyC 110:16; 11 2:14-32 |
Después de Adán, estas dispensaciones representan seis ocasiones cuando el evangelio ha sido restaurado, después de una total o parcial apostasía.
Veremos ahora que nuestra dispensación es una dispensación muy especial porque su misión es el restablecer la plenitud del evangelio y de preparar todas las cosas antes de la segunda venida del Señor.
ESTA DISPENSACIÓN ES LA DISPENSACIÓN FINAL:
Las escrituras se refieren a nuestros tiempos como los tiempos de la restauración de todas las cosas, y llaman a nuestra dispensación: la DISPENSACIÓN DEL CUMPLIMIENTO DE LOS TIEMPOS. Hch 3:21 DyC 11 2:30; 121:31 DyC 128:1 8; 138:48 DyC27:13 182
ESTA DISPENSACIÓN TRAE MUCHO CONOCIMIENTO SECULAR:
Mucho conocimiento será revelado: conocimiento sobre los cielos, los mares o la tierra seca, el sol, la luna o las estrellas. DyC 121:30-31
Y MUCHO CONOCIMIENTO SAGRADO:
| En los últimos días, el Espíritu será derramado sobre toda carne. Y muchos profetizarán, verán visiones, y soñarán sueños. | Jl 2:28 Hch 2:17-18 |
| Y conocimiento vendrá que no ha sido revelado desde el principio del mundo hasta ahora: si hay un Dios o muchos dioses; los tronos y dominios, principados y potestades, etc. | DyC 121 :26-27 DyC 121:28-29 |
ASI NUESTRA DISPENSACIÓN RESTAURA:
Todas las cosas. Hch 3:21; 2Ne 3:24
EL EVANGELIO:
La plenitud del evangelio del Mesías, con el poder del sacerdocio para los últimos días y por última vez. 1 Ne 15:13 DyC 112:30
LA OBRA PARA LOS MUERTOS:
| Todas las cosas traídas de nuevo por Elías: | Mt 17:11; Mr 9:12 |
| el bautismo para los muertos y el sellamiento de hijos a padres; templos a los cuales todas las naciones acuden. | DyC 138:47-50; 110-15 DyC 1 28:9,17-18 Is 2:2; Mi 4:1 2Ne12:2 |
Y EL EVANGELIO VIENE A TODOS Y PARA SIEMPRE:
| A los gentiles, a la casa de Israel y a la posteridad del pueblo de Lehi; | 1Ne15:13 2Ne 3:24 |
| así como entre los paganos. | 3Ne 21:22 |
| Y se levanta un reino que jamás sera destruido. | Dn 2:44-45 |
De esta manera, la dispensación del cumplimiento de los tiempos trae mucho conocimiento secular así como conocimiento sagrado. La plenitud del evangelio se restablece, incluyendo la obra para los muertos. Este evangelio restaurado es para los gentiles, para los Lamanitas, para toda la casa de Israel, y para todo el mundo. Y ya nunca será quitado de esta tierra.
Ya que nuestra dispensación nunca será destruida, a nosotros el pueblo de Dios en esta dispensación se nos ha dado la responsabilidad de preparar la tierra antes de que el Señor venga en su gloria. Así el Artículo de Fe No. 10 declara nuestra creencia en una serie de eventos que deben tomar lugar antes de la segunda venida:
Creemos en la congregación literal del pueblo de Israel y en la restauración de las Diez Tribus; que Sión (la Nueva Jerusalén) será edificada sobre el continente americano; que Cristo reinará personalmente sobre la tierra, y que la tierra será renovada y recibirá su gloria paradisíaca.
Según esto, el milenio de paz vendrá con:
la venida de Cristo y el establecimiento de su reino y la renovación de la tierra a su gloria paradisíaca.
Pero antes de que nuestro Señor venga, dos eventos tienen que tomar lugar, eventos por los cuales la iglesia de Cristo (el pueblo de Dios en esta dispensación) es responsable.
- La congregación literal del pueblo de Israel (incluyendo la restauración de las Diez Tribus) y
- la edificación de Sión (la Nueva Jerusalén) en América
Las escrituras confirman que estas dos responsabilidades recaen sobre nuestra dispensación.
LA DISPENSACIÓN DEL CUMPLIMIENTO DE LOS TIEMPOS DEMANDA EL RECOGIMIENTO DE ISRAEL:
Moisés ya entregó las llaves del recogimiento de Israel y del regreso de las diez tribus desde el país del norte. DyC 111:11
DEMANDA LA CONSTRUCCIÓN DE SION, LA NUEVA JERUSALÉN:
Se edificará una Nueva Jerusalén para el resto de la posteridad de José, en América. DyC 84:1-5 Et13:6
ANTES DE LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO:
| Todo esto pasará cuando el día grande y terrible del Señor esté cerca, aun a las puertas, | DyC 110:16 |
| el día cuando las cosas del cielo serán reunidas en Cristo con las cosas en la tierra. | Ef 1:10 |
| Y cuando este gran día venga, serán bendecidas todas las generaciones después de nosotros. | DyC 110:12 |
Así dos de las mayores responsabilidades que tenemos en esta dispensación son: el recogimiento de Israel y el establecimiento de Sión. Porque Cristo solamente pueden venir DESPUÉS de que estas dos tareas se hayan cumplido. Y cuando venga, establecerá el Milenio, mil años de paz y gozo, y de bendiciones para las generaciones porvenir.
Ahora veamos por medio de las escrituras, el significado y las implicaciones de estas dos importantes asignaciones.
EL RECOGIMIENTO DE ISRAEL
Para entender más específicamente el proceso de recoger a Israel, primero trataremos de entender la naturaleza y el por qué de! convenio entre Dios y Abraham, el convenio que da origen a Israel. Segundo, revisaremos la alegoría del olivo cultivado y de! olivo silvestre (escrita por Zenós y citada por Jacob, en el Libro de Mormón) para entender las razones de el esparcimiento del pueblo de Israel. Finalmente, trataremos de seguir históricamente, los varios movimientos de dispersión y de recogimiento que el mundo ha presenciado y presenciará en estos últimos días. Así podremos ver que la voluntad de Dios se está cumpliendo y que su mano está en todas las cosas.
A. EL PUEBLO DE ISRAEL
Antes de Abraham, los que siguen a Dios y a los patriarcas se llaman hijos de Dios (Moisés 8:1 3) mientras que los que no aceptan a Dios o a sus siervos, son llamados hijos de los hombres (Moisés 8:15) Y el pueblo de Enoc es llamado el pueblo de Dios. (Moisés 7:13)
Así, desde el principio nuestro Padre Celestial ha establecido a los que lo aceptan como un grupo muy especial. Y este grupo, así como la progenie de este grupo reciben el evangelio y otras maravillosas bendiciones que otros grupos no obtienen.
Por medio de sus profetas nuestro Señor nos informa que, cuando Abraham demuestra su tremenda fe, Dios hace un convenio con él. Y a su simiente son prometidas las bendiciones del evangelio.
POR CONVENIO DIOS DA A LA SIMIENTE DE ABRAHAM UNA TIERRA EN HEREDAD PERPETUA:
| La tierra entre el río de Egipto y el río Eufrates, | Abraham 2:6 |
| la tierra de Canaán en heredad perpetua. | Gn15:18;17:8 |
LA PROMESA DE SER UNA GRAN NACIÓN CON EL PODER DEL SACERDOCIO:
| Después de salvarlo del sacrificio, Jehová le promete a Abraham que él lo conduciría y le daría el poder del sacerdocio; | Abraham 1:18 |
| que su descendencia sería una gran nación (una nación con el poder del sacerdocio), | Abraham 2:9 |
| tan numerosa como las estrellas del cielo y la arena ala orilla del mar, | Gn22:17 |
| una muchedumbre y muchas naciones. | Gn 1 7:5-6; 18:8 |
| Y reyes saldrían de él. | Gn17:5 |
LA PROMESA DE SER UNA BENDICIÓN A TODAS LAS FAMILIAS DE LA TIERRA:
| Su descendencia llevaría el evangelio y el | Gn12:3 |
| sacerdocio a todas las familias y naciones de | DyC 124:58 |
| la tierra, bendiciéndolas con las bendiciones de | Gn18:18; Hch3:25 |
| salvación y de vida eterna. | Abraham 2:10-11 |
| Porque al recibir este evangelio, todos somos considerados como descendencia de Abraham | Abraham 2:10 |
PORQUE ABRAHAM, CON GRAN SACRIFICIO, OBEDECE A DIOS:
| Estas bendiciones le son dadas a Abraham porque él obedece la voz de Jehová. | Gn27:29; 28:14; 32:28 |
| El Señor confirma estas bendiciones para Isaac, y para Jacob, y éste recibe el nombre de Israel. | Gn 22:18 Gn 26:3-5; 21 :12 He 11:17-18 |
Así Abraham recibe promesas maravillosas. Recibe una tierra para él y su simiente, la tierra de Canaán. Recibe la promesa que sus descendientes formarían una gran nación, una nación con el sacerdocio. Y recibe la promesa que su sangre se mezclaría con la de todas las familias de la tierra, bendiciéndolas a todas por medio del evangelio. Y también recibe el poder de adoptar a cualquier persona o grupo de personas que aceptan el evangelio. Así, a causa de sus SACRIFICIOS AL OBEDECER, la descendencia de Abraham llega a ser ISRAEL.
B. LA NECESIDAD DE UN PUEBLO DE DIOS
Nuestro Padre Celestial, sabiendo desde el principio que no todos sus hijos e hijas lo buscarían o le obedecerían, necesita un grupo de almas fieles que acepten el plan de salvación así como la responsabilidad de presentarlo al mundo. Por eso aun antes de la creación de la tierra, él establece convenios con espíritus avanzados que quieren ser parte de su pueblo, servirlo y servir a sus semejantes. (Abraham 3:23)
De esta manera, cuando el pueblo de Dios está en armonía con él, nuestro Señor puede traer a sus profetas y su evangelio a la tierra. Y este pueblo puede pasar el mensaje de Dios al resto del mundo.
EL PUEBLO DE DIOS:
| Israel es pueblo santo para Jehová, escogido para serle un pueblo especial, más que todos los pueblos | Sal135:4; Dt14:2 |
| que están sobre la tierra, | Dt7:6; Dt6:16-19 |
| un pueblo conocido de antes. | Ro 11:2 |
| El Señor promete: Andaré entre vosotros y yo seré vuestro Dios, y vosotros seréis mi pueblo. | Lv 26:12 |
Así el pueblo de Dios es un pueblo especial, un pueblo seleccionado desde antes. Dios se compromete en traer a ellos su evangelio y ellos se comprometen en aceptar la verdad. Y este convenio trae bendiciones maravillosas así como la gran oportunidad de ayudar a nuestro Padre Celestial en su obra de «llevara cabo la inmortalidad y la vida eterna del hombre.»
Por eso el Señor habla de su pueblo como la sai de la tierra, una luz, una levadura, una fuerza para el bien que finalmente traerá el conocimiento del evangelio a todo el mundo.
LA MAYOR FUNCIÓN DEL PUEBLO DE DIOS ES RECIBIR Y ENSENAR EL PLAN DE SALVACIÓN, PARA QUE EL MUNDO VENGA Y GLORIFIQUE A DIOS:
| Jesús habla a sus discípulos diciendo: Vosotros sois LA SAL DE LA TIERRA, | Mt5:13 |
| LA LUZ DEL MUNDO, | Mt5:14 |
| UNA CIUDAD ASENTADA SOBRE UN MONTE que no se puede esconder. | Mt5:14 |
| Y porque Dios puede usar a su pueblo para influenciar a todo el mundo, Cristo puede comparar el reino de los cielos a la LEVADURA que, escondida en tres medidas de harina, levanta toda la masa. | Mt13:33 |
POR ESO ES UN MANDAMIENTO DEMOSTRAR EL AMOR DE DIOS:
| Alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras, y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos. | Mt5:16 |
PERO SI NO DEMOSTRAMOS EL AMOR DE DIOS, SEREMOS ECHADOS FUERA:
| Si la sal se desvaneciera, ¿con qué será salada? No sirve más para nada, sino para ser echada fuera y hollada por los hombres. | Mt5:13 |
ASI EL ACEPTAR EL PLAN DE SALVACIÓN, EL SER PARTE DEL PUEBLO DE DIOS ES UNA TREMENDA BENDICION, UNA TREMENDA OPORTUNIDAD Y UNA TREMENDA RESPONSABILIDAD.
Tal bendición, algo exclusiva, parecería injusta, si no fuera por las escrituras que consistentemente informan que TODAS las bendiciones SIEMPRE son ganadas en justicia. Y el Señor confirma, por medio de sus profetas, que Dios llama a sus siervos en base a su rectitud en la vida pre-mortal, porque fueron pre-ordenados ahí por medio de la presciencia de Dios.
DIOS SELECCIONA SUS L¡ DERES EN LA VI DA PRE-MORTAL:
| El Señor escoge sus gobernantes, de entre nobles y grandes almas. | Abraham 3:22-23 |
| Sumos sacerdotes son preparados desde la fundación del mundo por su gran fé y buenas obras, de acuerdo con la presciencia de Dios. | Al 13:3 |
| Así son también los que aceptan el evangelio para obedecer y ser rociados con la sangre de Jesucristo. | Ef 1:4-5,11 2Ts2:13;1P 1:2 |
Como toda bendición, la bendición de ser parte del pueblo de Dios es condicional. No solamente debe ser ganada por previa dedicación al plan de salvación, pero tiene que ser mantenida por medio de igual dedicación por el evangelio en esta vida.
PARA SER EL PUEBLO DE JEHOVA, DEBEMOS:
| oír su voz y guardar el pacto, | Ex 19:5 |
| cumplir sus estatutos y decretos, andar en sus caminos, | Dt 26:16-18 |
| oir su voz y guardar el pacto, | Ex 19:5 |
| y anunciar las virtudes del que nos llama de las tinieblas a su luz. | 1P 2:9-10 |
SI HACEMOS ESTAS COSAS:
| somos un tesoro especial sobre todos los pueblos | Ex 19:5 |
| de la tierra y recibiremos muchas bendiciones. | Dt 28:2; Ez34:26 |
| Somos un linaje escogido, un real sacerdocio, una nación santa, y alcanzaremos misericordia. | 1P2:9-10 |
Y SI HACEMOS ESTAS COSAS, NO IMPORTA SI SOMOS GENTILES O DEL PUEBLO DE ISRAEL:
| El Señor no hace convenio sino con los que se arrepientan y creen en el Santo de Israel. Por eso, los gentiles que se arrepientan son el pueblo del convenio del Señor. Y los judíos que no se arrepientan serán talados. | 2Ne 30:2 |
El privilegio de pertenecer al pueblo de Dios en la tierra es ganado en el primer estado, en la vida pre-mortal. Pero para mantener este privilegio, no solamente debemos obedecer y ser completamente leales a nuestro Señor, sino que también tenemos la responsabilidad de demostrar a los que nos rodean ¡a grandeza y bondad de nuestro Padre Celestial, para que se junten al pueblo de Dios.
Por otra parte, cualquiera que quiere cumplir con las leyes de Dios, sea lo que sea su linaje, será adoptado dentro del pueblo de Israel. Y recibirá, con el pueblo de Dios, las bendiciones de la vida eterna.
Ahora necesitamos entender específicamente la tarea que nos es asignada, como dispensación y como pueblo de Dios, de recoger al pueblo de Israel.
C. LA ALEGORÍA DE ZENOS
Como ya sabemos, en este segundo estado, Israel no siempre ha sido fiel a jehová., su Dios. De hecho el pueblo de Dios siempre ha exhibido, a través de los siglos, frecuentes y serios lapsos.
Es durante estos lapsos que nuestro Señor decide dispersar a su pueblo. El dispersar no significa completo rechazo, porque si puede, Dios procura guardar para sí mismo una rama justa. Pero si no puede, al menos cumple su promesa a Abraham que por medio de su simiente, en su debido tiempo, todas las naciones y todas las familias de la tierra serán bendecidas.
Esto es claramente demostrado en una alegoría escrita por el profeta Zenós. En esta alegoría, el amo de una viña (el Señor) quiere salvar a un olivo cultivado (Israel). Y lo salva por medio de darle mucho cuidado (profetas y bendiciones), por medio de injertar ramas de olivo silvestre (mezclando a Israel con gentiles), así como por medio de mover a ramas del olivo cultivado a otros lugares de la viña, (dispersando a Israel)
LA ALEGORÍA DEL OLIVO CULTIVADO (ISRAEL) Y EL OLIVO SILVESTRE (LOS GENTILES):
| La casa de Israel es comparada a un olivo cultivado que crece, envejece y empieza a secarse. | Jac 5:3 |
| El señor, el amo de la viña donde crece el olivo, lo poda, lo nutre, y cava alrededor del árbol. El olivo echa algunos retoños, pero la copa principal sigue secándose. |
Jac 5:4-6 |
PRIMERA REDISTRIBUCIÓN:
| El amo entonces decide: | |
| 1. podar las ramas secas y echarlas en el fuego; | Jac 5:7, 9 |
| 2. injertar los retoños en otros árboles; | Jac 5:8 |
| 3. injertar ramas de un olivo silvestre en el olivo cultivado; | Jac 5:7, 9-10 |
| 4. plantar (esconder) las ramas naturales del olivo cultivado en otra parte de la viña. | Jac 5:13-14 |
| Y seguir cuidándolo todo. | Jac 5:11-12 |
PRIMER RESULTADO:
| Después de mucho tiempo, el amo y su siervo descubren que: | |
| 1. el olivo cultivado con las ramas silvestres dabuen fruto; | Jac 5:15-18 |
| 2. algunas de las ramas cultivadas plantadas en otra parte de la viña dan buen fruto a pesar de que la tierra es muy estéril, porque el amo les dió mucho cuidado personal; | Jac 5:19-24 |
| algunas de estas mismas ramas, plantada en lugar fértil y bien cuidado, produce fruto silvestre. | Jac 5:25 |
| El amo finalmente decide dejarlo así, y simplemente cuidarlo todo muy bien. | Jac5:26-28 |
SEGUNDO RESULTADO:
| Después de mucho tiempo, el amo y su siervo descubren que, a pesar del cuidado que recibieron, todos los árboles tienen mal fruto. | Jac 5:28-48 |
| El amo, preocupado porque «el fin viene pronto,» | Jac 5:29 |
| piensa quemar todos los árboles. Pero, su siervo lo persuade de esperar, y decide redistribuir las ramas una vez más. | Jac 5:49-51 |
SEGUNDA Y ULTIMA REDISTRIBUCIÓN:
| Toman del árbol original que se había vuelto silvestre, y lo injertan en los árboles ocultos que también se habían vuelto silvestres. Y viceversa: toman de los árboles ocultos para injertar el árbol original. |
Jac 5:52-71 |
| El amo y sus siervos dan mucho cuidado personal a todos los árboles, y el fruto mejora. | Jac 5:72-74 |
| El amo resuelve esperar hasta el fin cuando recoja todo. Entonces el fruto bueno será preservado, el fruto malo será arrojado fuera, y la viña será quemada con fuego. | Jac 5:74-77 |
JACOB EXPLICA LA ALEGORÍA:
| Las raíces y las ramas son la casa de Israel y el Señor las cuida. | Jac 6:4 |
| La segunda redistribución será la última y después vendrá el fin. | Jac 6:2 |
| Por eso debemos arrepentimos o seremos echados al fuego. | Jac 6:5-13 |
Esta alegoría nos ayuda a entender un aspecto distinto del plan de salvación. Tomando en cuenta que el olivo cultivado es Israel, el olivo silvestre los gentiles, y que Dios es el amo de la viña, Zenós ratifica que la obra y la gloria de Dios es el llevar a cabo la inmortalidad y la vida eterna del hombre (Moisés 1 39), (o sea, el cuidar de los olivos para cosechar buen fruto).
También ratifica que, conociendo sus hijos e hijas en la vida pre-mortal, nuestro Padre Celestial ha elegido cuidar más de los que parecen tener mayor interés en el evangelio (colocándolos dentro del Pueblo de Dios). Pero confirma que Dios es imparcial (Moro 8:12) y que no se restringe por ¡deas preconcebidas hacia la casa de Israel (el árbol cultivado) o hacia los gentiles (el árbol silvestre). Así cuando la casa de Israel ya no da buen fruto, no titubea en mezclarlos con los gentiles.
Esta alegoría sugiere lo que nuestro Padre Celestial ha hecho y planea hacer con Israel.
D. LA DISPERSIÓN: LA PRIMERA REDISTRIBUCIÓN MENCIONADA PORZENOS
Cuando la tierra de Canaán es dividida por Josué, el sacerdote Eleazar, y los cabezas de los padres de las tribus de los hijos de Israel (Jos 14:1), la tierra es dividida en doce partes, para acomodar a la casa de Israel:
| Efraín | Nieto de Raquel e hijo de José |
| Rubén | Hijo de Lea y de Jacob |
| Simeón | Hijo de Lea y de Jacob |
| Judá | Hijo de Lea y de Jacob |
| Dan | Hijo de Buha y de Jacob |
| Neftalí | Hijo de Bilha y de Jacob |
| Gad | Hijo de Zilpa y de Jacob |
| Aser | Hijo de Zilpa y de Jacob |
| Isacar | Hijo de Lea y de Jacob |
| Zabulón | Hijo de Lea y de Jacob |
| Manasés | Nieto de Raquel e hijo de José |
| Benjamín | Hijo de Raquel y de Jacob |
Estos doce hombres que encabezan a las doce tribus de Israel no son todos hijos de Jacob (o Israel). Efraán y Manases son los hijos de José, el hijo de Raquel y Jacob, el que fue vendido como esclavo en Egipto y el que recibe ¡a primogenitura cuando Rubén, su hermano mayor, la pierde por haber pecado. (Gn 35:20-22; 1Cr 5:1) Efraín hereda la primogenitura de José, y toma el primer lugar.
Pero porque el primogénito en el medio-Oriente recibe doble porción, cuando Josué distribuye la tierra que pertenecería las doce tribus, Manasés también hereda una porción. (Jos caps. 13-21) A Leví, el tercer hijo de Lea y Jacob, no se le da tierra, porque en su capacidad de sacerdote, su descendencia reside esparcida, sirviendo a Dios y a todo el pueblo. (Jos 13:33) Por eso, cuando se trata de la tierra, Leví no se incluye como tribu. Pero cuando la tribu de Leví se incluye en las doce tribus, Efraín y Manases se juntan bajo el nombre de la casa o la tribu de José.
En su debido tiempo, las doce tribus forman un poderoso reino, primero bajo el rey Saúl, luego bajo el rey David, y finalmente bajo el rey Salomón. Pero a la muerte del rey Salomón, se declara una rebelión. Roboam, el hijo de Salomón, se queda con el reino de Judá que incluye la tribu de judá y la tribu de Benjamín. Pero Jeroboam, el hijo de Nabat, es coronado rey de las Diez Tribus, rey de Israel. (1R 12:1-24)
Después de esta rebelión (que toma lugar alrededor de 930 años antes de J.C.) ¡os dos reinos siguen funcionando lado a lado. Pero dos siglos más tarde ocurre el primero de tres movimientos dispersivos que toman lugar en un espacio de ochocientos años.
EL PRIMER MOVIMIENTO DISPERSIVO EL REINO DE ISRAEL, LAS DIEZ TRIBUS:
Esta primera dispersión probablemente toma lugar alrededor de 720 años antes de J.C. En esta época, muchos en el reino de Israel sirven y adoran a ídolos, desafiando a Jehová. Cuando el rey Oseas conspira contra el rey de Asiría y rehusa pagar tributo, Asiría invade a Samaría llevándose a Israel prisionero a su país. (2R 1 7:1-6) De ahí desaparecen, y la biblia no nos da información concreta de cómo o dónde.
Nuestras escrituras sugieren que al menos porciones de las Diez Tribus están esparcidas por todas las naciones del mundo. Al menos las escrituras dicen así de la tribu de Efraín.
EFRAÍN SE ENCONTRARA EN UNA MULTITUD DE NACIONES:
| Profetas, bendiciendo a Efraín, predicen que su descendencia formaría una multitud de naciones, | Gn 48:19 |
| porque sería quebrantado hasta dejar de ser pueblo. | Is 7:8 |
Pero otras escrituras sugieren que las Diez Tribus también existen como nación en algún lugar, en el norte.
LAS DIEZ TRIBUS EXISTEN COMO NACIÓN:
| Cristo, al visitar a los Nefitas en este continente, declara que tiene otras ovejas que no son de esta tierra, ni de Jerusalen, ni de tierra circundante. Y el Padre le ha mandado que se manifieste a ellas. |
3Ne16:1-3 |
| Estas son las tribus perdidas de Israel, y el Padre sabe donde las ha llevado. | 3Ne17:4 |
Y ESTAS DIEZ TRIBUS ESTÁN «EN EL NORTE»:
| Al menos los profetas mencionan que retornarán»del norte.» | Jer 3:18; 16:14; 31:8 DyC 110:11; 133:26 |
Estas escrituras han sugerido a muchos que las Diez Tribus han ido «hacia el norte,» que todavía existen como nación en algún lugar desconocido (el polo norte, las profundidades de la tierra, u otro planeta), y que volverán antes de la segunda venida como nación.
EL SEGUNDO MOVIMIENTO DISPERSIVO EL PUEBLO DE LEHI:
Más o menos 600 años antes de Jesucristo, el Señor aparece a Lehi, un comerciante de la casa de José, de la tribu de Manases que vive en Jerusalen. Le muestra maravillosas visiones y lo manda que predique a los Judíos de la venida del Mesías. Más adelante, el Señor le manda que salga de Jerusalen con su familia para evitar la gran destrucción que ha de venir. Más tarde, Zoram, el sirviente de Labán, y la familia de Ismael (de la tribu de Efraín) se juntan a Lehi. Y todos se establecen en lo que ahora es América. (1Ne caps. 1-18)
Unos años más tarde el rey de Judá, Sedequías, se rebela en contra del rey de Babilonia quien sitia la ciudad de Jerusalen. (2R 25:1-3) Hecho prisionero, ciegan al rey y se lo llevan a Babilonia. (2R 25:6-7) Solamente uno de sus hijos, Mulek, escapa y es dirigido por Dios a este continente (Hel 6:10; 8:21) donde establece la ciudad de Zarahemla. Años más tarde, su pueblo se integra al pueblo de Mosíah y los dos son llamados Nefitas. (Om 1:15-19)
Así el pueblo de Lehi incluye Israelitas de las tribus de Manasés, de Efraín, y de Judá. Pero porque Lehi es el profeta y líder del grupo, a sus descendientes se les ha dado el linaje de Manasés. La historia de este pueblo es relatada en nuestro Libro de Mormón. (1 Ne cáps. 1-7, 16-18;Om 1:15-19)
En esta dispensación, creemos que el remanente del pueblo de Lehi son los nativos de este continente (los que llamamos ahora los Indios Americanos).
EL TERCER MOVIMIENTO DISPERSIVO EL PUEBLO DE JUDA:
Esta última dispersión toma lugar alrededor de 70 años después de Jesucristo cuando Jerusalén es destruida por los Romanos. Esta es la destrucción predicha por Jesús mismo (JS-M 1:4-21), y descrita por el historiador, Jo-sefo. La biblia, por supuesto, no menciona la dispersión que sigue a la caída de Jerusalén, pero este evento es un hecho histórico. Y como sabemos hoy día, Judíos se encuentran en todas las naciones del mundo.
De esta manera, las escrituras asi como relatos históricos nos informan que la primera redistribución mencionada por Zenós se refiere a la dispersión de los tres distintos pueblos mencionados arriba: (1) las Diez Tribus; (2) el pueblo de Lehi; y (3) el pueblo de Judá.
Pero, en el presente, estos tres grupos ya son cuatro, porque, como hemos visto, al menos parte de la tribu de Efrain se ha separado de las Diez Tribus y se encuentra dispersada en muchas naciones.
E. EL RECOGIMIENTO – LA SEGUNDA REDISTRIBUCIÓN MENCIONADA POR ZENOS
Muchas escrituras se refieren a la dispersión y recogimiento de Israel, indicando que todos los profetas a través de los siglos, saben del plan del Señor y se preocupan mucho por el restablecimiento del pueblo de Dios. En esta sección, sin embargo, nos limitaremos a consultar escrituras que nos ayudarán a entender la misión de cada uno de los cuatro grupos dispersados.
Pero primero, en completo acuerdo con el plan de salvación, vemos que al proceso del recogimiento sigue el proceso del arrepentimiento.
LAS CONDICIONES PARA VOLVER SON:
| arrepentimiento, conversión, y obediencia con todo corazón y alma, | Dt 30:1-5 |
| porque el Señor no hace convenio con nadie sino con aquellos que se arrepienten y creen en el Santo de Israel. | 2Ne 30:2 |
EL SEÑOR TOMA RESPONSABILIDAD PARA RECOGER A ISRAEL:
| Jehová recogerá el remanente de sus ovejas, con misericordia. | Jer 23:3; Is 54:7 |
| Los reunirá y guardará. | Jer 31:10; 32:37 |
| Los juntará como la gallina junta a sus pollos, | Mt23:37 |
| si no endurecen sus corazones | DyC 10:65 |
PORQUE SOLO CRISTO PUEDE REDIMIR:
| Cristo murió para juntar en uno a los dispersos. | Jn 11:51-52 |
| Porque los redime, los llamará y reunirá. | Zac 10:8 |
| Así, huyendo dolor y llanto, los redimidos de | 2Ne8:11 |
| Jehova vendrán a Sión con alegría. | Is 35:10; 51 :11 |
Y TODOS VOLVERÁN Y SE JUNTARAN:
| El remanente de Israel volverá, | Is10:22; Sof3:19-20 |
| uno por uno. | Mi4:6-7; Is27:12 |
| Los hijos de Judá y de Israel se congregarán, nombrando un solo jefe. | Os 1:11 |
| Vendrán andando y llorando, buscando a Jehovásu Dios. | Jer50:4 |
| Y serán restaurados de su estado perdido y caído, | 2Ne 25:1 7; 29-1 |
| antes del fin | Jac 6:2 |
Así el pueblo de Israel, totalmente dispersado al tiempo de José Smith, está siendo recogido por medio del amor redimidor que el Señor siente por su pueblo. Mucho de este recogimiento vendrá poco a poco, porque requiere arrepentimiento, profunda conversión, y completa obediencia. Por eso no vendrá sin dolor. Y todo finalizará un tiempo antes de la segunda venida.
Usando las escrituras, trataremos de identificar la responsabilidad dada a cada uno de los grupos esparcidos en el proceso del recogimiento y de la segunda venida de Cristo.
I. LA TRIBU DE EFRAIN
Como hemos visto, la tribu de Efraín se encuentra esparcida por todas las naciones. Empieza a recogerse a sí misma cuando José Smith (de la tribu de Efraín) recibe visiones, las planchas del Libro de Mormón, y el mandamiento de recoger a la tribu de Manases (los indios Americanos), y a todos los que crean en el Señor.
LA MISIÓN DE EFRAIN EN ESTA DISPENSACIÓN ES EL RECOGIMIENTO DE ISRAEL:
| En nuestra dispensación, el Señor levanta un pueblo puro que lo servirá en justicia, | DyC 100:16 |
| un pueblo que ya ha recibido las llaves del recogimiento como misión y ordenanza. | DyC 110:l1 DyC 77:14 |
ESTE PUEBLO PURO ES LA IGLESIA DE CRISTO, Y SU RESPONSABILIDAD ES:
| ser una luz a los gentiles, y por medio de su sacerdocio, un salvador al pueblo de Israel; | DyC86:11 |
| preparar el camino del Señor | DyC45:9 |
| trayendo a ellos los escogidos de Dios, porque estos no endurecen su corazón. | DyC 29:7 |
Y ESTOS ESCOGIDOS QUE PODEMOS CONVERTIR SE ENCUENTRAN EN:
| la tribu de Manases | DyC 3:9, 16-20 |
| la tribu de Judá, | DyC98:16-17 |
| y las Diez Tribus, | DyC 133:32 |
| porque los hijos de Efraín son los siervos del Señor. | DyC133:32 |
A base de estas escrituras, entendemos que al establecer esta dispensación, el Señor ha organizado el pueblo de Dios en la tierra, y ha empezado el recogimiento de la casa de Israel, empezando con la tribu de Efraín que tiene la primogenitura.
Y ahora, como nuestras autoridades generales tan a menudo nos recuerdan, la responsabilidad de la iglesia así como la responsabilidad de cada miembro es: (1) el hacernos perfectos los unos a los otros, y (2) el traer, por medio del trabajo misionero y por medio del trabajo para los muertos, tantas almas como podamos al redil del Señor. Todo esto es parte del plan de salvación.
II. LA TRIBU DE MANASES
Como hemos visto, creemos que la tribu de Manasés incluye a todos los nativos de este continente (los que llamamos ahora los Indios Americanos) así como a todos los mezclados con ellos. Esto es porque son descendientes de Lehi, el profeta que viajó con su familia de Jerusalén a este continente.
Y como recordaremos, entre ellos también hay parte de Efraín y parte de Judá.
Las escrituras nos dicen que la mayor responsabilidad de la tribu de Manasés es el construir, con la ayuda de la tribu de Efraín, la Nueva Jerusalén.
EN LOS ÚLTIMOS DÍAS,
| El remanente de la casa de José se establecerá sobre este continente que será la tierra de su herencia. | Et13:8 |
| Y los lamanitas florecerán como la rosa. | DyC49:24 |
LA RESPONSABILIDAD DE LA TRIBU DE MANASES
(CON EL RESTO DE JACOB) SERA:
| levantar una ciudad santa para el Señor, una ciudad que no será confundida más, hasta que llegue el fin, cuando la tierra será consumida. | Et 13:8 |
| Esta ciudad será construída por el resto de Jacob y por cuantos de la casa de Israel vengan, para la congregación del pueblo de Dios. | 3 Ne 21 :22-24 |
| Esta ciudad será llamada Sión, la Nueva Jerusalén. | Moisés 7:62 Et13:10; |
| Y ahí el pueblo de Dios esperará la segunda venida de Cristo. | 3Ne 20:22 Moisés 7:62 |
Así los lamanitas florecerán como la rosa. Y levantarán, con la ayuda de todo Israel, a Sión, la Nueva Jerusalén, donde el pueblo de Dios recibirá a Cristo a su segunda venida.
III. LAS DIEZ TRIBUS DE ISRAEL
Como se mencionó antes, no sabemos donde están las diez tribus ahora. Tal vez están, como Efraín, en medio de los gentiles sin saber su identidad. O tal vez están en un grupo aislado, recibiendo revelaciones de Dios, y preparándose para venir del norte, a juntarse a Efraín y Manasés.
EFRAIN ESTA A CARGO DE TRAER A LAS DIEZ TRIBUS:
| Nuestra dispensación ha recibido de Moisés, las llaves, la autoridad de conducir las Diez Tribus desde el país del norte. | DyC 110:11 |
Y LAS DIEZ TRIBUS VENDRÁN:
| Vendrán a Efraín con ricos tesoros, | DyC 133:30 |
| posiblemente perseguidos por sus enemigos, y encabezados por sus profetas que oirán la voz del Señor, y no se contendrán más. | DyC 133:28 DyC 133:26 |
| Vendrán para recibir coronas de gloria por mano de los siervos del Señor, los hijos de Efraín. | DyC 32 |
VENDRÁN EN MEDIO DE MAGNÍFICOS MILAGROS:
| Herirán las penas y el hielo fluirá ante ellos. | DyC 133:26 |
| Se levantará una calzada en medio del gran mar. | DyC 1 33:27 |
| En los yermos desolados, brotarán pozos de aguas vivas, y la tierra reseca no volverá a tenersed. | DyC133:29 |
| Serán llenos de cantos de gozo sempiterno. | DyC 133:23 |
Y MAS TARDE, IRÁN A JERUSALÉN:
| a recibir la tierra de su herencia. | Et 13:11; Jer 3:18 |
La llegada de las Diez Tribus ciertamente será uno de los eventos más es pectaculares en los últimos días. Y poco después, nuestro Señor vendrá en toda tus gloria.
IV. LA TRIBU DE JUDA
La dispersión de la tribu de Judá es relativamente reciente. Por eso la mayoría de ellos no han perdido su identidad. Y se están congregando en la tierra de su herencia, Israel, a buscar paz, seguridad, sus raíces, o tal vez a Jehová. Pero como grupo, todavía no han reconocido que Jesús es el Cristo.
Entre todo Israel, los judíos son los únicos que harán ésto. Los de Efraín y de Manasés se identifican y se congregan cuando se convierten. Aún las Diez Tribus vendrán con sus propios profetas.
Aunque sabemos por medio de las escrituras que la mayoría de los Judíos solamente creerán en Cristo cuando el venga a librarles de sus enemigos, la tribu de Efraín ha recibido el mandamiento de convertir a la tribu de Judá.
EFRAÍN DEBE CONVERTIR A LOS JUDIOS:
| En nuestra dispensación, hemos recibido el mandamiento de tornar el corazón de los judíos a los profetas, y los profetas a los judíos. | DyC98:17 |
| Y Mormón nos advierte que no debemos menospreciar a los judíos ni hacer burla, porque el Señor cumplirá su convenio con ellos. | 3Ne 29:8 |
Y MUCHOS DE ENTRE LA TRIBU DE JUDA SE CONVERTIRÁN A CRISTO:
| Nefi predice la restauración de los judíos en los últimos días. | 1Ne 15:19-20 |
| El señor mandará a la casa de Jacob a los incrédulos entre los judíos para que sean convencidos de que Jesús es el Cristo. | Morm 5:13-14 |
| Y muchos empezarán a creer en Cristo y se congregarán sobre la faz de la tierra. | 2Ne 30:7 |
| Y antes de la segunda venida, en Jerusalén, el Señor dará a los judíos dos profetas. | DyC 77:15 |
PERO LA MAYORÍA DE ELLOS SE CONVERTIRÁN A LA VENIDA DE CRISTO:
| La mayoría de ellos serán convertidos cuando reconozcan las heridas en sus manos y sus pies, y llorarán y se lamentarán. | DyC 45:51-53 Zac 12:10-13; 13:6 |
De esta manera, las escrituras confirman que los Judíos también serán convertidos y, «después de su aflicción, serán purificados en santidad ante el Señor, para morar en su presencia día y noche, para siempre jamás.» (DyC 133:35)
En breve, vemos que en los últimos días, se le ha dado cargo a Efraín de congregar a Israel. Y antes de que Jesús venga por segunda vez, Efraín y Manases se habrán congregado, las Diez Tribus vendrán a visitar a Efraín, y muchos judíos se habrán convertido. Pero será cuando Jesús venga para salvarlos, que toda la tribu de Judá se convertirá y aceptará al Salvador.
RESUMEN
En este capítulo, hemos tratado de entender las responsabilidades que nos han sido dadas para obtener la vida eterna como pueblo de Dios. Y encontramos que nuestra dispensación es la dispensación del cumplimiento de los tiempos, y por eso somos responsables por la congregación literal del pueblo de Israel y para preparar la tierra para la segunda venida de nuestro Señor.
Al escudriñar las escrituras, primero, aprendemos que Dios a través de los siglos, ha establecido un pueblo para él, un pueblo de hombres y mujeres que lo aman y le obedecen. Y es por medio de ellos que él puede traer su evangelio a la tierra. Así, muchos ven la luz que radia del pueblo de Dios, y también aprenden de Dios y de su amor para con nosotros.
Segundo, encontramos que la alegoría de Zenós muy correctamente nos habla de dos redistribuciones del pueblo de Dios.
La primera redistribución consiste en la dispersión del pueblo de Israel en tres distintos grupos: (1) el reino de Israel; (2) el pueblo de Lehi, y el pueblo de Judá. Esta dispersión empieza antes de la vida de Cristo sobre la tierra, y se completa unos cuarenta años después de su muerte.
La segunda redistribución ha empezado ya con la restauración del evangelio a la tribu de Efraín y la conversión y congregación de muchos entre los pueblos de Efraín y de Manasés. Conociendo el plan de salvación y teniendo un profeta a su cabecera, todos sabemos que la segunda venida de Cristo se acerca. Y al saber que somos responsables por la congregación de nuestros dos pueblos, por la conversión de muchos Judíos, y por la construcción de Sión donde las Diez Tribus se recibirán, tenemos un sentido de urgencia.
Y nuestro Padre Celestial, en su sabiduría, sabe que como el pueblo de Dios en estos últimos días, nos será más fácil alcanzar la santificación en el proceso de cumplir con todas las cosas que son requeridas. Porque es por medio de la obediencia a los deseos de Dios y de amor hacia nuestros semejantes, que recibiremos la santificación y con ésta, la inspiración para cumplirlo todo.
























