La Obra Misional—Nuestro Estilo de Vida

Bernard P. Brockbank

por el Élder Bernard P. Brockbank
Asistente del Consejo de los Doce Apóstoles

Hermanos y hermanas, es un privilegio estar en este histórico Tabernáculo durante la conferencia general, aquí cerca de la montaña de la casa del Señor, en las cumbres de los montes (Isaías 2:2). Las torres del templo, coronadas con el Ángel Moroni, son uno de los símbolos de la restauración de la Iglesia y del evangelio de Jesucristo a través de mensajeros celestiales en esta tierra. Como saben, la fachada del Pabellón Mormón en la Feria Mundial de Nueva York fue una réplica del frente del Templo de Salt Lake. Muchos visitantes comentaron sobre su belleza y significado religioso, sirviendo como un faro y un imán que atrajo a millones de personas al pabellón.

Millones buscan mayor luz y conocimiento
Descubrimos, tras hablar con millones de visitantes en el Pabellón Mormón, que muchos estaban sinceramente buscando mayor luz y conocimiento sobre el plan de vida de Dios. Muchos querían saber más sobre un Dios vivo y personal y sobre un Jesucristo vivo y personal. Parecían ansiosos y hambrientos de escuchar las enseñanzas del Salvador tal como fueron enseñadas y vividas por él. Querían escuchar las doctrinas de las santas escrituras dadas por los antiguos profetas, apóstoles y Jesucristo.

Los jóvenes misioneros tienen el espíritu
La exhibición principal en el pabellón eran los misioneros. El sacerdocio y el Espíritu Santo se manifestaron a decenas de miles de personas a través del espíritu, amor y dedicación de los misioneros. Muchos visitantes dejaron sus comentarios.
Un católico dijo: “Debería haber más jóvenes como estos llamados en todo el mundo. Este es el pabellón religioso más instructivo de la feria. Me impresiona que tantos jóvenes conozcan la verdad”.
Un bautista dijo: “Las palabras no pueden describir la belleza que he visto aquí. Desearía que cada fe tuviera tanta convicción y jóvenes tan dedicados con ideales espirituales. Hay esperanza para el futuro a través de sus jóvenes”.
El Pabellón Mormón, con sus logros, es una de las empresas misionales más grandes y de mayor alcance de nuestro tiempo. Aprendimos muchas lecciones de los visitantes del pabellón, y si aplicamos plenamente esas lecciones, ayudarán a hacer realidad una de las grandes peticiones de nuestro profeta, el presidente David O. McKay. Él pidió que cada miembro fuera un misionero y que cada miembro trajera una o más personas a la Iglesia cada año.

El Señor dijo en una revelación moderna: “He aquí, os envío para testificar y advertir al pueblo; y a todo hombre que ha sido advertido, le incumbe advertir a su prójimo” (DyC 88:81).
He preguntado a cientos de miembros si les gustaría llevar a alguien a La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, y todos dijeron: “Sí”; pero pasan los años y no logran su deseo. Solo un pequeño porcentaje de los Santos lleva uno o más conversos a la Iglesia cada año. Tenemos más de un millón de posibles miembros que desearían ayudar a alcanzar y enseñar a sus amigos, que desearían traer a alguien a la Iglesia cada año.

Otros centros de información
Estamos en el proceso de crear y establecer exhibiciones similares a las usadas en el Pabellón Mormón en cada uno de los centros de información de la iglesia donde haya espacio disponible. En áreas como la Ciudad de Salt Lake, los misioneros locales y los Santos podrán llevar a sus amigos y vecinos al Centro de Información de la Plaza del Templo, y allí, con la ayuda de ayudas visuales, enseñarles sobre la restauración del evangelio y llevar a sus amigos a un conocimiento de la Iglesia de Jesucristo. Las exhibiciones estarán centradas en las enseñanzas y doctrinas como fueron enseñadas y ejemplificadas por el Salvador. Siempre me ha parecido interesante saber que Jesús no solo enseñó su plan de vida y salvación, sino que también dio el ejemplo y pidió que lo siguiéramos. Esto deja poco espacio para interpretaciones privadas.

Misioneros miembros que usen las exhibiciones
Los Santos misioneros, con la ayuda de las exhibiciones, podrán animar a sus amigos y vecinos a acudir a las escrituras inspiradas por Dios para buscar y encontrar el verdadero evangelio a través del mensaje que nuestro Padre Celestial ha dejado aquí en la tierra para nosotros.

Las exhibiciones revisan los fundamentos de la Restauración
Jesús llamó, ordenó y construyó su Iglesia en torno a Doce Apóstoles. Mediante ayudas visuales y la palabra hablada, alentaremos a las personas a saber que los apóstoles son una parte esencial de la Iglesia de Jesucristo.
La apostasía de las enseñanzas de Jesucristo se mostrará a través de ayudas visuales. Los hombres han cambiado el concepto de Dios y Jesucristo. Algunos han llegado al punto de decir que Dios no tiene cuerpo, partes ni pasiones. Los hombres cambiaron el bautismo de Jesús. Los hombres descontinuaron a los Doce Apóstoles. El sacerdocio de Melquisedec fue cambiado. El diezmo fue descontinuado entre muchos. Y se hicieron muchos otros cambios que el tiempo no nos permite mencionar.

Mostraremos a través de ayudas visuales la Primera Visión y la restauración de la Iglesia y las enseñanzas y el plan de vida tal como fue dado por el Salvador. La misma película sobre la vida eterna que se mostró en el pabellón será utilizada. Quisiera citar una declaración de Norman Vincent Peale sobre la película. Él dijo: “La película contó la historia de dónde venimos, por qué estamos aquí y adónde vamos”. Añadió: “La película motivaba a querer aprovechar al máximo la vida en la tierra, y los últimos dos minutos de la película fueron los más conmovedores, los más inspiradores y reveladores de cualquier dos minutos de una película que haya visto en toda mi vida”.

También dijo: “No sé el nombre del actor que hizo de abuelo, pero cuando murió y entró en la existencia eterna, el asombro y la maravilla se reflejaban en su rostro. De repente, vio a su esposa de quien había estado separado. Ella corrió hacia él y lo abrazó. Luego vinieron sus hermanos, hermanas, madre y padre, tíos, tías, abuelos y todos los que le fueron cercanos y queridos en la tierra. Rodeado de aquellos que lo amaban, la cámara nos mostró un primer plano de su rostro, en el cual se reflejaba una alegría radiante y exultante. Nunca había visto una actuación tan conmovedora, ni una escena tan hermosa. De esta película, aprendí dos cosas: (1) un concepto completamente nuevo del propósito de la vida y su conexión con la eternidad, y (2) un concepto completamente nuevo de la importancia de la familia en conexión con la eternidad”. (Entrevista con T. Bowring Woodbury y Norman Vincent Peale, 20 de mayo de 1964). Nuestro programa familiar es una de nuestras grandes herramientas misionales.

Esperamos que se creen muchas exhibiciones para ayudar a los Santos y a los misioneros a enseñar y amar a sus vecinos y amigos en la Iglesia. Esperamos que sea posible tener exhibiciones portátiles similares que puedan ser instaladas de manera atractiva en los salones culturales y centros de estaca de la Iglesia. Estas podrían estar durante una semana o diez días, y los misioneros y los Santos pueden traer a sus amigos y vecinos. La película de la Feria Mundial sobre la vida eterna también podría mostrarse como parte de esta exhibición.

Amigos y vecinos para captar el espíritu de la Restauración
Con suficientes centros de información y unidades portátiles, podríamos tener a medio millón de Santos y misioneros participando. ¿Se imaginan a medio millón de Santos, con la ayuda del Señor, enseñando a sus amigos y vecinos acerca de la restauración del programa de Dios a través de un profeta de Dios y enseñándoles a ver el plan de vida tal como fue enseñado por el Salvador y no el plan que ha sido cambiado y corrompido por los hombres?

La inquietud religiosa en el mundo hoy en día está haciendo que los honestos de corazón busquen y anhelen encontrar al Dios viviente. Muchos de nuestros amigos y vecinos están esperando escuchar y conocer el programa de Dios para el hombre. Hermanos Santos, ustedes que tienen un testimonio de que Dios vive, de que Jesucristo vive y de que el plan de vida de Dios es esencial para entrar en el reino de los cielos, tienen la responsabilidad de advertir a sus vecinos. En mi humilde opinión, el mayor poder y fuerza misional de esta Iglesia está en los Santos. Que sigamos a nuestro Profeta y enseñemos a nuestros amigos y vecinos, ruego en el nombre de Jesucristo. Amén.