Los Archivos de Mentinah Volumen Tres

Capítulo Ocho


  1. Ahora bien, he aquí, ninguna enseñanza sobre las ordenanzas del Lugar Alto estaría completa sin que yo te instruya acerca del significado del Investidura de Poder y de la Segunda Unción.
  2. La Investidura de Poder se llama así por aquello que proporciona al receptor. Constituye todos los convenios y ordenanzas del Templo cuando se consideran en conjunto. Muchos han dicho que consiste en todo lo que se proporciona para ayudar al receptor a pasar a través del velo hacia la presencia del Padre. Pero yo te digo que su mayor importancia proviene de aquello que se toma en el corazón y el alma del receptor antes de acercarse al velo del cielo.
  3. Nuevamente te pido que razones conmigo y consideres el significado de la relación del Lugar Alto en su totalidad. ¿Acaso no se nos instruye en muchas cosas concernientes a nuestra vida pasada? ¿Y no nos da eso la capacidad de tomar consejos que están por encima de lo que enseña el mundo? ¿No es esto una Investidura de Poder en un sentido?
  4. Y de nuevo, ¿no se nos instruye también en la manera en que podemos pasar por esta vida sin tomar sobre nosotros la sangre y el pecado de esta generación? ¿Y no nos da eso la capacidad de tomar consejos que están por encima de lo que enseña el mundo?
  5. Y nuevamente, ¿no se nos instruye también en la manera en que podemos remover el velo de nuestros ojos y de nuestros corazones, para que podamos caminar libremente hacia la presencia del Padre y recibir instrucción de Él directamente? ¿Y no nos da eso la capacidad de tomar consejos que están por encima de lo que enseña el mundo?
  6. Por lo tanto, ¿no es cierto entonces que los convenios y ordenanzas del Lugar Alto tienen como motivo proporcionar los medios por los cuales podamos recibir consejos que no son de este mundo? En verdad, te digo, ese es el propósito de estas cosas sagradas. ¿No es ese el camino que nuestros primeros padres tomaron cuando llegaron a este sendero mortal? ¿Y acaso no ponemos también nuestros pies en ese mismo camino?
  7. Ahora bien, esto es algo difícil de entender para ti; porque, ¿acaso no somos mortales y no se nos enseña que vivimos nuestras vidas aquí en este mundo Telestial? Pero he aquí, esta es nuestra Investidura de Poder: vivir todavía en lo Telestial, pero tener acceso a lo Terrestre. Sí, tal como Adán y Eva fueron introducidos al Mundo Terrestre aún en su carne mortal, así también seremos introducidos nosotros al Mundo Terrestre.
  8. Y he aquí, ¿hay alguna parte de la relación del Lugar Alto que indique cómo Adán y Eva murieron antes de que tal introducción pudiera hacerse? Te digo que no encontrarás tal declaración. Por tanto, no creas, ni permitas que la creencia eche raíces y crezca en ti, que los seres mortales no pueden entrar en la presencia de los inmortales.
  9. Yo soy uno para quien la mortalidad ha sido suspendida. Por lo tanto, sé más de lo que tal vez puedas sobre los seres trasladados. Pero te digo, sigo siendo mortal exactamente en el mismo sentido que tú. Probaré la muerte cuando mi Salvador venga de nuevo, pero será solo un destello de ella. Sin embargo, la probaré lo suficiente. Y aunque mi cuerpo perdurará hasta que Él venga, sin embargo, es Telestial en naturaleza. Aun así, camino y hablo con ángeles mientras estoy en este cuerpo Telestial. He aquí, te pregunto, ¿cómo lo hago?
  10. Esta es la Investidura de Poder. Caminar en la presencia de Seres Celestiales es una bendición y una investidura, en verdad. Y es con este propósito —que los hombres y mujeres puedan progresar en gracia y sabiduría, en fe y virtud, hasta llegar a ese punto de perfección en que superen el velo que en ellos impide entrar en el Camino y recibir instrucción de los ángeles, de sus parientes difuntos, y también de Jesucristo— que se dan las obras del Lugar Alto. He aquí, los convenios y ordenanzas del Lugar Alto se dan con ningún otro propósito que no sea sacar a las almas de los hijos de los hombres de la oscuridad y llevarlas a la luz de la verdad. Y cuando esto se logra, ven visiones y sueñan sueños. Caminan con sus antepasados y reciben instrucción de ellos, y, cuando han progresado al punto en que puedan soportar Su presencia, aun con el Señor del Cielo, Jesucristo.
  11. Ahora bien, esto puede no parecer difícil para ti que has visto el rostro de tu Salvador incluso en tu carne. Pero puedes creerme que no pasarán muchas generaciones antes de que los hijos de los hombres encuentren difícil aceptar que puedan estar en la presencia del Salvador y ser instruidos por Él.
  12. Pero ahora llamo tu atención al velo del Templo. ¿Por qué, cuando somos llevados al velo, se enrolla y desaparece? Es por aquello que hemos recibido en el Camino lo que hace que el velo dentro de nosotros se rasgue de abajo hacia arriba. Porque, a menudo se dice y se escribirá en otro lugar que es apropiado que algunos de los que están abajo suban, así como también es apropiado que algunos de los que están arriba desciendan.
  13. Pero esto no puede lograrse mientras el hombre viva en el mundo Telestial. Es por esta razón que el Señor dio a Adán y Eva, nuestros primeros padres, todas estas cosas. Él deseaba que ellos pudieran regresar a Su presencia mientras aún estuvieran en la carne. Pero he aquí, lo Telestial no puede soportar la misma presencia de Dios. Por tanto, era importante que los hijos de los hombres recibieran, mediante su obediencia y fe, una investidura que cambiara lo suficiente su mortalidad para permitirles soportar la presencia de los Seres Celestiales.
  14. Ahora bien, he aquí, debes creer que tal cosa es posible, y veo que lo crees. Pero te digo, habrá muchos, no, incluso la mayor parte de las personas en los últimos días serán enseñadas de tal manera que creerán que tal cosa debe esperar hasta después de la resurrección. Sí, se enseñará incluso a los elegidos de Dios que no pueden estar en Su presencia a menos que deban morir primero. Y evitarán la revelación y despreciarán las profecías debido a esta enseñanza que habrán recibido de los pastores de Sion. Y, debido a esta enseñanza, muchos rechazarán la restauración del evangelio y perseguirán a aquellos que reciben estas cosas.
  15. Pero te digo, esta es la Investidura de Poder: obtener la capacidad de estar en el Camino y conversar con tus parientes difuntos, con Ángeles, con guías y guardianes, y con el mismo Jesucristo.
  16. Y esto será una señal para todos aquellos que puedan leer mis palabras y se pregunten si viven en los tiempos de los que hablo: Estarán en el velo del Templo con un asistente cerca de ellos para recordarles las cosas que suponen que deben decir para pasar por los centinelas, o eso suponen, que han sido colocados allí para guardar el camino al cielo. Y no sabrán quién es aquel a quien representa ese asistente, quien está cerca de ellos y les susurra al oído las palabras que deben pronunciar.
  17. Podrán pensar que es Pedro o Santiago o Juan. Podrán pensar que representa al Padre Adán. Pero, os digo, están equivocados en todo lo que piensan, a menos que comprendan que el asistente representa a Jesucristo. Ahora bien, si el asistente representa a Jesús susurrando al oído de Adán, a quien representas en el velo, te pregunto que me instruyas en esta cosa. ¿Qué nos enseña tal representación sobre el velo? ¿Qué debe haber ocurrido en nosotros para que podamos estar en la misma presencia del Cristo resucitado, para que Él susurre en nuestros oídos palabras de sabiduría? ¿Quién es aquel que nos presenta en el velo y aboga por nosotros ante el Padre? ¿Quién es aquel que, después de que hayamos hecho y dicho todo lo requerido de nosotros, parte el velo y habla en nuestro favor? ¿Quién también, cuando el velo es enrollado y el obstáculo ya no existe para separarnos del Padre, es aquel que toma nuestra mano y la coloca en la mano de Aquel cuya morada es el seno de la eternidad?
  18. Ahora bien, vosotros que leéis mis palabras, y os digo que solo por la gracia y sabiduría de Dios podréis recibir estas cosas, ¿puede ser que el Templo sea una farsa? ¿Son los convenios y ordenanzas realizados allí una mera ficción? Os digo, ¡no!
  19. He aquí, el propósito del Templo es tomar seres Telestiales y enseñarles de tal manera que puedan ser introducidos al Mundo Terrestre mientras aún están en su forma mortal. Y os declaro que un cambio se realiza verdaderamente en su mortalidad que permite que esto les suceda. Y en el Mundo Terrestre, del cual puede decirse que el Camino es una parte, deben ser instruidos por Ángeles y Mensajeros Celestiales, tal como Adán y Eva fueron visitados e instruidos por mensajeros de Dios. Y, cuando progresan en conocimiento y verdad como Adán y Eva progresaron, es el propósito del Templo efectuar un cambio tal en aquellos que acuden allí para tomar convenios sagrados y realizar ordenanzas sagradas, que puedan ver a Jesucristo, y Él los presente en el velo para que puedan entrar en la presencia del Padre.
  20. Que puedan hacer esto por ellos mismos, así como por y en nombre de sus parientes difuntos, es una certeza. Pero os declaro, en cuanto al propósito y función del Templo, cualquier cosa más o menos que esto proviene del mundo y no de Dios.
  21. Es por esta razón que Jesús nos mandó venir a Él. No nos mandó ir a los sabios del mundo y aprender lo suficiente acerca de Él como para que nos encontráramos justificados en el día del juicio. No, Él nos mandó venir a Él. ¿Y es este mandamiento en vano? ¿Acaso dará el Señor Jesucristo un mandamiento y permanecerá imposible aquello que Él manda? Os digo, ¡no! Una maldad debe venir sobre cualquier pueblo que sostenga tal doctrina.
  22. Y ahora, la Segunda Unción es esa ordenanza que prueba en los corazones y las almas de los hijos de los hombres que las cosas que he enseñado sobre la Investidura de Poder son verdaderas. Pues es esa santa y sagrada ordenanza que solo se realiza por el Hombre y la Mujer que han sido sellados por el Espíritu Santo de la Promesa. Y he aquí, ellos sabrán que este sellamiento ha tenido lugar, no porque algún hombre haya puesto sus manos sobre ellos y se lo haya declarado, como será la costumbre en los últimos días, sino porque ese mismo Espíritu habrá manifestado la verdad de ello en ellos. Y cuando esta palabra más segura de profecía les haya sido entregada, nada podrá contradecirla. Están sellados a Cristo para siempre, y aunque los cielos y la tierra pasen, su convenio el uno con el otro jamás pasará, sino que es eterno.
  23. Ahora bien, cuando todo esto les sea hecho y hayan recibido todas las leyes por convenio y realizado todas las ordenanzas del Lugar Alto, y el Espíritu Santo de la Promesa, que es el Espíritu Santo, haya hecho su elección segura, ellos entrarán en el Lugar Más Sagrado del Templo, incluso el Templo de Eva, y se lavarán y ungirán mutuamente de una manera muy sagrada. Y he aquí, impondrán las manos el uno sobre el otro y el Señor impondrá Sus manos sobre ellos y los ungirá.
  24. Y lo verán y hablarán con Él cara a cara. Y he aquí, esto es porque han recibido la Investidura de Poder al tomar sobre sí mismos, mediante convenio, la Ley de Consagración, la Ley de Castidad, la Ley de Obediencia y Sacrificio y la Ley del Evangelio. Estas cosas se toman dentro del Templo a través de las ordenanzas del Lugar Alto. Y se viven fuera del Templo en su caminar y hablar y en cada parte de sus vidas.
  25. Ahora bien, os hablo de esta última ordenanza en el Templo porque se habrá perdido para el tiempo en que el Señor considere oportuno que el registro de mis palabras para vosotros salga del polvo, mediante los dones del espíritu y del Vidente que será dado a uno de entre vuestros descendientes a quien Él levantará para cumplir este llamamiento en los últimos días. Sí, no habrá nadie en el tiempo de su llamamiento que pueda aprovecharse de las ordenanzas del Templo que estarán disponibles en su día, que pueda reclamar esta Segunda Unción. ¡Podéis creerlo, Nemenhah! ¡Tal será el estado de las cosas en su tiempo!
  26. Pero veo que esta revelación hace que vuestro semblante decaiga y vuestras almas se llenen de tristeza. Podéis lamentar bien los tiempos en que vuestros descendientes deben vivir. Pero tomad consuelo en el conocimiento de que será a través de ellos que el Señor completará y culminará esa restauración que ha de comenzar y de la que han hablado los profetas desde la fundación del mundo. Sí, es por vuestra justicia que vuestras generaciones producirán una raza de personas en quienes el Señor confiará incluso el establecimiento de Sión nuevamente en la tierra.
  27. Por tanto, regocijaos con gran gozo hoy con todo vuestro corazón, y dejad que ese regocijo alcance los cursos de las estrellas, para que aquellos a quienes vendrá este gran llamamiento puedan sentir vuestro amor por ellos. Sí, dirigid vuestros corazones hacia la posteridad de vuestro linaje. Porque, de vosotros surgirá una nación como el mundo no ha visto desde que la Ciudad de Enoc fue llevada al seno del cielo. Sí, ningún hombre ha visto algo igual desde que el Padre Enoc llevó su ciudad al Señor. Así también será exaltado el fruto de vuestro linaje por encima de todos los pueblos de la tierra. Pues, seguramente establecerán Sión en sus corazones. Y, aunque los cielos y la tierra pasen, ellos estarán en la presencia del Salvador cuando Él venga nuevamente para tomar Su escabel una vez más.
  28. Y, si vuestros corazones se vuelven hacia ellos, os declaro que seguramente lo sentirán. Y, con certeza, vosotros también sentiréis que sus corazones se vuelven hacia vosotros, incluso mientras registráis estas cosas y las preserváis. Pues, no penséis que no los veréis en su día. No, ni penséis que ellos no os verán tal como sois. Porque, ellos caminarán por el Camino y todas las cosas serán para ellos un eterno ciclo. Así habla el Espíritu a mi alma, y así será. Amén.

1 Response to Los Archivos de Mentinah Volumen Tres

  1. Avatar de Desconocido Anónimo dice:

    saludos desde ecuador la vida es buena porque dios existe

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