Varios meses después de la muerte de sus hijos José, Hyrum y Samuel Smith, Lucy Mack Smith (1775–1856) comenzó a escribir su historia1. A los sesenta y nueve años de edad, su salud era precaria y sentía que era “un privilegio, además de mi deber… dar cuenta de ello como mi último testimonio a un mundo del cual pronto habré de partir”2. Afectada por una memoria que se iba deteriorando, y motivada por la indignación y la pena, a veces presentaba una “cronología confusa e información incompleta”; no obstante, el relato de Smith sirve para comprender mejor su personalidad, su actitud, sus emociones y creencias, y para entender el papel de José Smith como profeta3. Smith dedicó el verano de 1845 a las revisiones finales y acabó el manuscrito en octubre, cuando anunció el proyecto públicamente por primera vez en la conferencia general4. Su narración aportó información de una historia institucional de los Santos de los Últimos Días más extensa5.
Smith sentía una necesidad urgente de ser testigo, y a menudo hablaba en público ofreciendo un relato de primera mano de muchos acontecimientos de la historia de la Iglesia. “He relatado una y otra vez muchas cosas pertenecientes a estos asuntos para satisfacer la curiosidad de diferentes personas; de hecho casi me he destrozado los pulmones recitando esas narraciones a quienes estaban ansiosos de escucharlas”, escribió a su hijo William6. En una reunión de la Sociedad de Socorro el 31 de marzo de 1842, ella tuvo “deseos de dejar su testimonio de que el Libro de Mormón es el libro de Dios, que José es un hombre de Dios, un profeta del Señor apartado para guiar al pueblo. Si observamos sus palabras, nos irá bien; si vivimos con rectitud sobre la tierra, nos irá bien en la eternidad”7. Ella habló en otra reunión pública el 23 de febrero de 1845, y describió “las pruebas y los problemas que había afrontado para establecer la Iglesia de Cristo, y las persecuciones y aflicciones” que había experimentado con los asesinatos de sus hijos, José y Hyrum, el año anterior. Hosea Stout registró que quienes la oyeron hablar “se sintieron profundamente conmovidos por las palabras de esta ‘madre’ de las ‘madres en Israel’, porque habló de la manera más tierna y desconsolada de las dificultades por las que había pasado”8.
La edad de Smith y sus crecientes dolencias físicas le impedían tener la actividad de la que antes había disfrutado. En la segunda reunión de la Sociedad de Socorro, en marzo de 1842, ella lloró y dijo a las mujeres que “estaba entrada en años y que no podía quedarse mucho tiempo”. Una semanas más tarde “habló muy lastimosamente de su solitaria situación”, pero también compartió repetidamente su testimonio, mezclado con su historia9. Los santos cuidaron de la viuda. Después de los asesinatos de José y Hyrum Smith por el populacho en junio de 1844, la hermana de la Sociedad de Socorro Sarah M. Kimball visitó a Mamá Smith para ofrecer consuelo, lo cual permitió a Smith dar testimonio de la inocencia de sus hijos10. Wilford Woodruff le dio a Lucy Mack Smith una bendición el 23 de agosto de 1844 en la que la llamaba “la más grande madre en Israel”. Y continuaba: “Has vivido para ser testigo de la caída de tus hijos por la furia de manos gentiles y, como una impenetrable roca en medio de las imponentes profundidades, has permanecido inamovible hasta que Dios te ha concedido [los] deseos de tu corazón, y has visto las llaves del Reino de Dios en manos de tu posteridad”11. El 9 de julio de 1845, los obispos Newel K. Whitney y George Miller ofrecieron una cena pública para los miembros de la familia Smith, entre ellos Lucy y Emma Hale Smith12. Brigham Young prometió cuidar de Lucy Mack Smith en tanto que los santos se preparaban para salir de Nauvoo, Illinois, hacia el Oeste, pero ella permaneció en Nauvoo con sus tres hijas y su nuera Emma13.
Mamá Smith tenía setenta años cuando pronunció este discurso en una conferencia general celebrada en el templo de Nauvoo14. La conferencia tuvo lugar en medio de la violencia desatada el mes anterior contra los Santos de los Últimos Días en las afueras de Nauvoo; Brigham Young había accedido públicamente a que los santos se fueran de Nauvoo la primavera siguiente15. En la conferencia, Young y otros líderes hablaron del inminente éxodo. El 8 de octubre de 1845, el último día de una conferencia que duró tres días, Smith expresó su deseo de subir al púlpito para responder al debate sobre la marcha al Oeste. Según el periódico de la Iglesia Times and Seasons, “ella habló por un largo espacio de tiempo y de manera audible para que la mayor parte de la vasta asamblea pudiera escucharla”16. Smith expresó sus convicciones religiosas y compartió su testimonio al mismo tiempo que relataba acontecimientos de los albores de la historia de la Iglesia. Este es el primer informe de la intervención de una mujer en una conferencia general17.
Notas
[1] Smith recibió ayuda de Martha Knowlton Coray, una maestra de escuela de Nauvoo, y de su esposo, Howard Coray, que había servido como escribiente e historiador de José Smith. El Cuórum de los Doce Apóstoles alentó a Smith a que escribiera su historia. (Howard Coray, “Journal of Howard Coray”, documento mecanografiado, pág. 16, Biblioteca de Historia de la Iglesia [CHL, por sus siglas en inglés]; Lucy Mack Smith a William Smith, 23 de enero de 1845, pág. 2, Biblioteca de Historia de la Iglesia).
[2] Lucy Mack Smith, History, 1844–1845, 18 libros, libro 1, Biblioteca de Historia de la Iglesia; véase también Coray, “Journal of Howard Coray”, pág. 16.
[3] Jan Shipps, Mormonism: The Story of a New Religious Tradition, Urbana: University of Illinois Press, 1987, págs. 95–96; Richard Lyman Bushman, Joseph Smith: Rough Stone Rolling, Nueva York: Alfred A. Knopf, 2005, págs. 8–9.
[4] Lavina Fielding Anderson, editora, Lucy’s Book: A Critical Edition of Lucy Mack Smith’s Family Memoir, Salt Lake City: Signature Books, 2001, pág. 90.
[5] Shipps, Mormonism, pág. 92.
[6] Lucy Mack Smith a William Smith, 23 de enero de 1845, pág. 4.
[7] Nauvoo Relief Society Minute Book, 31 de marzo de 1842, pág. 24, en Jill Mulvay Derr, Carol Cornwall Madsen, Kate Holbrook y Matthew J. Grow, editores, The First Fifty Years of Relief Society: Key Documents in Latter-day Saint Women’s History, Salt Lake City: Church Historian’s Press, 2016, pág. 45.
[8] Lucy Mack Smith habló en una reunión en casa del obispo Jonathan Hale, en la cual alentó a los padres a que criasen a sus hijos en obediencia. (Hosea Stout, Journal, 23 de febrero de 1845, Biblioteca de Historia de la Iglesia; también en Juanita Brooks, editora, On the Mormon Frontier: The Diary of Hosea Stout, 1844–1861, Salt Lake City: University of Utah Press, 1964).
[9] Nauvoo Relief Society Minute Book, 24 de marzo de 1842, pág. 17; 19 de abril de 1842, pág. 31, en Derr et al., First Fifty Years, págs. 38, 50.
[10] Sarah M. Kimball a [Serepta] Heywood, aprox. 1844, Joseph L. Heywood Letters, Biblioteca de Historia de la Iglesia.
[11] Wilford Woodruff, Journal, 23 de agosto de 1844, Biblioteca de Historia de la Iglesia.
[12] “Dinner to the Smith Family”, Nauvoo Neighbor, 16 de julio de 1845.
[13] William Clayton y Thomas Bullock, “Conference Minutes”, Times and Seasons, tomo VI, nro. 16, 1 de noviembre de 1845, pág. 1014. Emma Smith permaneció alejada de Brigham Young y de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. (Bushman, Rough Stone Rolling, págs. 554–555).
[14] El periódico de la Iglesia publicó sobre esta conferencia que “unos cinco mil santos sintieron el indescriptible gozo y la gran satisfacción de reunirse por primera vez en la Casa del Señor en la ciudad de José”. (“First Meeting in the Temple”, Times and Seasons, tomo VI, nro. 16, 1 de noviembre de 1845, pág. 1017).
[15] Brigham Young, “To the Brethren of the Church of Jesus Christ of Latter Day Saints, Scattered Abroad throughout the United States of America”, Times and Seasons, tomo VI, nro. 16, 1 de noviembre de 1845, pág. 1018.
[16] Clayton y Bullock, “Conference Minutes”, pág. 1013. El periódico Times and Seasons dio un informe de esta conferencia e incluyó una breve sinopsis del discurso de la hermana Smith. El discurso se había publicado previamente con notas explicativas en Ronald W. Walker, “Lucy Mack Smith Speaks to the Nauvoo Saints”, BYU Studies, tomo XXXII, nros. 1–2, 1991, págs. 276–284.
[17] La siguiente mujer que habló en una sesión de conferencia general fue Zina D. H. Young, que habló brevemente en una reunión combinada de sacerdocio y Mejoramiento Mutuo el 7 de octubre de 1879. (“General Conference. Second Day”, Deseret News, 15 de octubre de 1879; véase también el Apéndice en esta publicación).
[18] Dos meses antes de la conferencia, el hijo de Lucy, William Smith, observó que “Mamá Smith está bastante indispuesta este verano”. (William Smith a J. Grant Jr., 12 de agosto de 1845, en Nauvoo Neighbor, 20 de agosto de 1845).
[19] Smith se refiere a comentarios que Brigham Young había hecho acerca de mormones que robaban en respuesta a las amenazas que percibían de quienes se oponían a los Santos de los Últimos Días. Desde el conflicto de 1838 en Misuri, facciones antimormonas habían alegado con frecuencia que los mormones robaban mercancía. (Historian’s Office, General Church Minutes, 1839–1877, 8 de octubre de 1845, Biblioteca de Historia de la Iglesia; véanse también “Affidavits”, Quincy [IL] Whig, tomo VIII, nro. 26, 16 de octubre de 1845, págs. 1–2; y John E. Hallwas y Roger D. Launius, editores, Cultures in Conflict: A Documentary History of the Mormon War in Illinois, Logan: Utah State University Press, 1995, págs. 243–245).
[20] Nueve de los hijos de Smith vivieron hasta llegar a la edad adulta: Alvin, Hyrum, Sophronia, José, Samuel, Katharine, Don Carlos y Lucy. Un hijo nació muerto y otro murió en la infancia. (“Joseph Smith Pedigree Chart”, accedido el 3 de septiembre de 2015, josephsmithpapers.org).
[21] Los consejos que solían darse en Nauvoo en aquella época en cuanto a la crianza de los hijos incluían la advertencia de tener a los muchachos en casa en lugar de dejarlos deambular por las calles causando problemas. (“Boys”, Nauvoo Neighbor, 30 de abril de 1845; Brigham Young, sermón, 4 de mayo de 1845, General Church Minutes).
[22]Sobre el uso histórico de la expresión “madre en Israel”, véase Carol Cornwall Madsen, “Mothers in Israel: Sarah’s Legacy”, en Women of Wisdom and Knowledge: Talks Selected from the BYU Women’s Conferences, editado por Marie Cornwall y Susan Howe, Salt Lake City: Deseret Book, 1990, págs. 179–201.
[23] Cuando Lucy Mack Smith dijo “el lunes pasado hizo dieciocho años”, su estimación le falló por una semana. José Smith registró que había obtenido las planchas el 22 de septiembre de 1827, dieciocho años y dos semanas antes de la conferencia general de octubre en la que Lucy Mack Smith habló. (Karen Lynn Davidson, David J. Whittaker, Mark Ashurst-McGee y Richard L. Jensen, editores, Histories, Volume 1: Joseph Smith Histories, 1832–1844, tomo I de la serie Histories de The Joseph Smith Papers, editado por Dean C. Jessee, Ronald K. Esplin y Richard Lyman Bushman, Salt Lake City: Church Historian’s Press, 2012, págs. 14–15).
[24] Lucy Mack Smith, History, 1844–1845, libro 6, págs. 3–4. En esa época, Martin y Lucy Harris tenían a la hermana viuda de Lucy, Polly Harris Cobb, viviendo con ellos. (Madge Harris Tuckett y Belle Harris Wilson, The Martin Harris Story: Special Witness to the Book of Mormon, Provo, UT: Maasai, 1983, págs. 17–18).
[25] Según este relato, José Smith copió caracteres de una parte de las planchas de oro. Martin Harris, uno de los primeros miembros de la Iglesia, apoyó económicamente a José Smith y llevó el documento a la Ciudad de Nueva York y se lo mostró a eruditos como Charles Anthon, un profesor de Estudios Clásicos y Literatura. (Michael Hubbard MacKay, Gerrit J. Dirkmaat, Grant Underwood, Robert J. Woodford y William G. Hartley, editores, Documents, Volume 1: July 1828–June 1831, tomo I de la serie Documents de The Joseph Smith Papers, editado por Dean C. Jessee, Ronald K. Esplin y Richard Lyman Bushman, Salt Lake City: Church Historian’s Press, 2013, págs. 355–357).
[26] Véase Lucas 2:10.
[27] Lucy Mack Smith, Biographical Sketches of Joseph Smith the Prophet, and His Progenitors for Many Generations, Liverpool: Orson Pratt, 1853, no fue publicado hasta 1853. El libro es más conocido hoy en día como History of the Prophet Joseph Smith by His Mother. Aunque inicialmente apoyó que Lucy Mack Smith escribiera su historia, más adelante Brigham Young desaprobó el libro porque creía que contenía imprecisiones.
[28] Harris hipotecó un terreno para hacer frente al pago de los $3.000 dólares necesarios para publicar cinco mil ejemplares del Libro de Mormón. (MacKay et al., JSP, D1, págs. 86–88).
[29] La familia Smith perdió su casa recién construida por ejecución hipotecaria el 1 de abril de 1829. En la primavera de 1828, José Smith se trasladó al condado de Susquehanna, Pensilvania, para escapar de la creciente oposición contra él en Palmyra, Nueva York. (Walker, “Lucy Mack Smith Speaks to the Nauvoo Saints”, 282n15; Davidson et al., JSP, H1, págs. 238–239).
[30] José Smith obtuvo los derechos de autor del Libro de Mormón y luego regresó a Pensilvania con la idea de poner guardas que protegieran el manuscrito en todo momento. (Lucy Mack Smith, History, 1845, págs. 158–159, Biblioteca de Historia de la Iglesia).
[31] Brigham Young habló justo antes que Lucy Mack Smith, alentando a los miembros de Nauvoo a ser honrados en sus tratos con sus vecinos y no devolver violencia por violencia. (General Church Minutes, 8 de octubre de 1845; véase también “Journal of Thomas Bullock”, BYU Studies, tomo XXXI, nro. 1, invierno de 1991, págs. 24–25).
[32] William Smith, miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles, había regresado de una misión a los estados del Este en mayo de 1845. Rápidamente surgieron disputas entre Smith y los otros apóstoles en relación a la conducta de Smith mientras se hallaba en el Este, su autoridad como patriarca de la Iglesia, la autoridad de Brigham Young como Presidente de los Doce Apóstoles, y la enseñanza pública de Smith sobre el matrimonio plural. Smith se fue de Nauvoo en mitad de la noche, el 12 de septiembre de 1845. Dos días antes del discurso de su madre, el primer día de la conferencia general, Smith no fue sostenido como miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles por motivo de objeciones. Fue excomulgado el 19 de octubre de 1845. (Kyle R. Walker, William B. Smith: In the Shadow of a Prophet, Salt Lake City: Greg Kofford Books, 2015, págs. 229–245, 257–258, 298–300; Clayton y Bullock, “Conference Minutes”, pág. 1008; Willard Richards, “Notice”, Times and Seasons, tomo VI, nro. 16, 1 de noviembre de 1845, pág. 1019; Hosea Stout, Journal, 19 de octubre de 1845).
[33] Joseph Smith, padre, y Lucy Mack Smith tuvieron tres hijas: Sophronia Smith [Stoddard], Katharine Smith [Salisbury] y Lucy Smith [Millikin]. Las tres hermanas y sus familias se quedaron en Illinois después del éxodo de los santos al Oeste. (Véase Kyle R. Walker, editor, United by Faith: The Joseph Sr. and Lucy Mack Smith Family, American Fork, UT: Covenant Communications, 2005, págs. 187–195, 326–332, 416–418).
[34] Poco después de la publicación del Libro de Mormón, a finales de junio de 1830, Samuel se fue a una misión y llevó consigo varios ejemplares para vender. El primer día viajó unos cuarenta kilómetros (veinticinco millas) y fue rechazado por varios posibles compradores. (Smith, History, 1845, págs. 169–170).
[35] John Portineus Greene era miembro de la Iglesia Metodista Episcopal y la Iglesia Metodista Reformada en Mendon, Nueva York. Su esposa, Rhoda Young Greene, era hermana de Brigham Young. (Walker, “Lucy Mack Smith Speaks to the Nauvoo Saints”, 283n19).
[36] Samuel Smith durmió bajo un manzano y luego desayunó con una viuda. Como muestra de agradecimiento, él le dio un ejemplar del Libro de Mormón. (Smith, Biographical Sketches of Joseph Smith the Prophet, pág. 152).
[37] Según la historia de Lucy Mack Smith, Rhoda Greene tomó el libro y rompió a llorar. (Smith, History, 1845, pág. 187).
[38] Los Greene se bautizaron en abril de 1831. (John P. Greene al hermano D. C. Smith, 29 de enero de 1841, en Times and Seasons, tomo II, nro. 3, 15 de febrero de 1841, págs. 325–326).
[39] Véase Lucas 13:19. En una subsiguiente misión a Mendon, Nueva York, Samuel Smith entregó un Libro de Mormón a Phineas Young, hermano de Rhoda Young Greene y Brigham Young, lo cual finalmente llevó a la conversión y el bautismo de Heber C. Kimball y otros. (Dean L. Jarman y Kyle L. Walker, “Samuel Harrison Smith”, en Walker, United by Faith, págs. 210–211).
[40] La familia Smith se trasladó de Nueva York a Ohio en 1831, y luego de Ohio a Misuri en 1838. Solo permanecieron siete meses en Misuri. (Lavina Fielding Anderson, “Lucy Mack Smith”, en Walker, United by Faith, págs. 62–66).
[41] En el verano de 1838, William Smith y su esposa, Caroline Grant Smith, se pusieron muy enfermos y eran incapaces de cuidar de sí mismos y de sus hijos. Samuel, el hermano de William, los llevó a la casa de sus padres en Far West, Misuri. La esposa de Samuel Smith, Mary Bailey Smith, dio a luz a su tercer hijo el 1 de agosto de 1838. (Walker, William B. Smith, pág. 263; Smith, History, 1845, pág. 247; Jarman y Walker, “Samuel Harrison Smith”, pág. 225).
[42] En 1838, la oposición a los asentamientos de Santos de los Últimos Días en expansión en Misuri produjo enfrentamientos violentos entre los ciudadanos que eran Santos de los Últimos Días y los que no lo eran. Lucy Mack Smith se refiere aquí a los Santos de los Últimos Días que habían sido expulsados de sus hogares durante el conflicto. La hectárea de tierra frente a la taberna Smith estaba “completamente cubierta de camas tendidas a pleno sol, donde las familias se veían obligadas a dormir expuestas a todo tipo de clima… Ver a los niños enfermos, resfriados y llorando de hambre alrededor de sus madres mientras sus padres carecían de los medios que podían hacer que se sintieran cómodos, era suficiente para romperle a uno el corazón”. (Alexander L. Baugh, A Call to Arms: The 1838 Mormon Defense of Northern Missouri, Dissertations in Latter-day Saint History, Provo, UT: Joseph Fielding Smith Institute for Latter-day Saint History; BYU Studies, 2000; Smith, History, 1845, pág. 282).
[43] A fin de asegurar la paz, el 31 de octubre de 1838 el comandante general Samuel D. Lucas, del ejército paramilitar de Misuri, presentó varias condiciones a los Santos de los Últimos Días. Creyendo que Lucas estaba abierto a negociaciones adicionales, José Smith y otros cuatro líderes de la Iglesia se entregaron e ingresaron en el campamento militar en las afueras de Far West. El 1 de noviembre, Hyrum Smith fue arrestado y puesto con los otros prisioneros. (Samuel D. Lucas a Lilburn W. Boggs, 2 de noviembre de 1838, Mormon War Papers, Missouri State Archives, Jefferson City; Hyrum Smith, “To the Saints Scattered Abroad”, Times and Seasons, tomo I, nro. 2, diciembre de 1839, pág. 21; Baugh, A Call to Arms, pág. 141).
[44] Smith se refiere probablemente a la caótica ocupación del ejército paramilitar de Far West, Misuri, en noviembre de 1838, cuando se permitió que los antimormones hostigaran a los santos en la ciudad. (Véase Michael Arthur to Clay County Representatives, 29 de noviembre 1838, Mormon War Papers; véase también Smith, History, 1845, págs. 247–249, 253).
[45] El 1 de noviembre de 1838, José Smith y otros seis prisioneros fueron procesados por un tribunal de guerra en el campamento paramilitar, y sentenciados a ser ejecutados a la mañana siguiente en la plaza de la ciudad de Far West. El brigadier general Alexander Doniphan, sin embargo, se opuso al fallo y detuvo las ejecuciones. El comandante general Samuel D. Lucas decidió entonces trasladar a los prisioneros al cuartel general en Independence, condado de Jackson, Misuri, lo cual condujo a rumores de que las ejecuciones tendrían lugar allí. Lo más probable es que Lucy Mack Smith agregara el detalle de los “quince minutos” para dar dramatismo al relato. El 2 de noviembre de 1838, José Smith habló con su madre y su hermana desde el carromato penitenciario, y posteriormente fue aprisionado en la cárcel de Liberty, Misuri, hasta abril de 1839. Finalmente escapó de prisión. (Heman C. Smith et al., History of the Reorganized Church of Jesus Christ of Latter Day Saints, 8 tomos, Independence, MO: Reorganized Church of Jesus Christ of Latter Day Saints, 1896–1903 [tomos I–IV], 1969–1976 [tomos V–VIII], tomo II, págs. 260–262; Eliza R. Snow a Isaac Streator, 22 de febrero de 1839, en “Eliza R. Snow Letter from Missouri”, BYU Studies, tomo XIII, nro. 4, verano de 1973, pág. 547; Hyrum Smith, Testimony, Nauvoo, IL, 1 de julio de 1843, Nauvoo [Illinois] Records, págs. 13–16, Biblioteca de Historia de la Iglesia; Joseph Smith, Bill of Damages, 4 de junio de 1839, Joseph Smith Collection, Biblioteca de Historia de la Iglesia; Bushman, Rough Stone Rolling, págs. 356–382; Smith, History, 1845, pág. 281).
[46] Lucy Mack Smith y su hija Lucy fueron conducidas hasta el carromato entre la muchedumbre. Al no permitirles ver a los prisioneros, tomaron de la mano a Hyrum y a José por debajo de una tela fuertemente asegurada que cubría el carromato. (Smith, History, 1845, págs. 280–281).
[47] Lucy Mack Smith recordaba que Samuel Smith llevó a su casa a su hermano y su cuñada, William y Caroline Grant Smith, que estaban enfermos. (Smith, History, 1845, pág. 250).
[48] Mientras Mary Bailey Smith, la esposa de Samuel, vivía en el condado de Daviess, Misuri, una turba la sacó a ella y a sus hijos (incluso a su bebé recién nacido) de su hogar a la intemperie, y redujo la casa a cenizas. En ese momento Samuel Smith estaba ausente. Por estar continuamente expuesta al frío y debido a las carencias nutritivas, Mary Smith nunca se recuperó completamente. (Jarman and Walker, “Samuel Harrison Smith”, pág. 225).
[49] José Smith partió hacia Washington D.C. el 29 de octubre de 1839. Elias Higbee y él se reunieron con el presidente Martin Van Buren, el senador John C. Calhoun y miembros de la delegación del Congreso en Illinois; reportaron pérdidas de dos millones de dólares y presentaron una retahíla de abusos contra los mormones en Misuri. Sin embargo, no recibieron apoyo federal, ni económicamente ni en forma de intervención federal en los asuntos de estado. (Bushman, Rough Stone Rolling, págs. 392–393, 396–397; Spencer W. McBride, “When Joseph Smith Met Martin Van Buren: Mormonism and the Politics of Religious Liberty in Nineteenth-Century America”, Church History, tomo LXXXV, nro. 1, marzo de 2016, págs. 19–27).
[50] Probablemente el río Misisipí, cerca de Quincy, Illinois.
[51] En forzoso cumplimiento de la orden del gobernador Lilburn W. Boggs, unos ocho mil miembros de la Iglesia comenzaron la penosa emigración desde Misuri a principios de 1839, y muchos hallaron refugio en Quincy, Illinois, en el lado oriental del río Misisipí. En febrero de 1839, Lucy y su esposo se unieron al éxodo a Illinois, caminando en el barro y acampando en la nieve. (William G. Hartley, “‘Almost Too Intolerable a Burthen’: The Winter Exodus from Missouri, 1838–1839”, Journal of Mormon History, tomo XVIII, nro. 2, otoño de 1992, págs. 6–40; Smith, History, 1845, pág. 286; Jarman y Walker, “Samuel Harrison Smith”, pág. 228).
[52] Doctrina y Convenios 101:86–89; véase también Doctrina y Convenios 123:6.
[53] José Smith dio un informe de su visita a Washington D.C. en la conferencia que se celebró el 8 de abril de 1840. El señor Durfee podría ser Jabez Durfee, cuya esposa, Elizabeth Durfee, era miembro de la Sociedad de Socorro de Nauvoo. (Robert B. Thompson, “Conference Minutes”, Times and Seasons, tomo I, nro. 6, abril de 1840, pág. 93).
[54] Doctrina y Convenios 127:7.
[55] Smith quizá se refería a la muerte, el 10 de septiembre de 1845, de Miner R. Deming, sheriff del condado de Hancock, que mostró compasión hacia los mormones durante los juicios en mayo de 1845 a cinco hombres acusados del asesinato de José y Hyrum Smith. La muerte de Deming puso fin a una paz inestable entre mormones y no mormones por problemas locales, y condujo a una mayor violencia por parte del populacho. (Dallin H. Oaks y Marvin S. Hill, Carthage Conspiracy: The Trial of the Accused Assassins of Joseph Smith, Urbana: University of Illinois Press, 1975, págs. 193–194).
[56] Cinco miembros de la familia de Lucy Mack Smith fueron enterrados en Nauvoo: Joseph Smith, padre, que murió el 14 de septiembre de 1840; Don Carlos Smith, que murió el 7 de agosto de 1841; José Smith y Hyrum Smith, que murieron el 27 de junio de 1844; y Samuel Smith, que murió el 30 de julio de 1844. (“Joseph Smith Pedigree Chart”).
[57] Al final de su discurso, la voz de Lucy Smith se debilitó, y gran parte de la congregación no pudo escuchar sus palabras. Luego se levantó Brigham Young y expresó lo siguiente: “Mamá Smith propone algo que llena de gozo mi corazón: ella vendrá con nosotros. Puedo responder por las autoridades de la Iglesia: deseamos que ella y sus hijos vengan con nosotros, y me comprometo personalmente en nombre de las autoridades de la Iglesia, a compartir con ellos todo cuanto tengamos. Nuestra mano está extendida para ayudar a Mamá Smith”. (Clayton y Bullock, “Conference Minutes”, pág. 1014).
























