Las Señales de la Segunda Venida

Guía de Estudio de la Perla de Gran Precio
Randal S. Chase

Las Señales de la Segunda Venida

(Mateo JS; Mateo 24)


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INTRODUCCIÓN

Al comienzo de este capítulo encontramos al Salvador y Sus discípulos en el monte de los Olivos, en un punto con vistas a la ciudad de Jerusalén. En esta ocasión, los discípulos tenían muchas preguntas acerca de las profecías que Él había pronunciado el día anterior, así como de otras profecías concernientes al futuro. En Mateo de José Smith (Mateo 24) el Señor proporciona respuestas a las preguntas.

• Mateo 4 JS — Los discípulos Le hacen dos preguntas sobre Sus profecías.  Son las mismas dos preguntas que todavía hacemos hoy.

  1. “Dinos cuándo ocurrirán estas cosas?”
  2. “¿Cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo?”

Las respuestas de Jesús fueron específicas y reveladas por metáforas. Lo que dijo que sucedería es precisamente lo que sucederá, y no necesitamos intentar “espiritualizar” Sus palabras suponiendo que fueran simplemente figurativas.

El Profeta José Smith dijo:

“Ahora bien, los hombres no pueden tener ningún fundamento para decir que esto es figurativo, o que no significa lo que dice: porque Él ahora está explicando lo que Él había dicho previamente en parábolas; y de acuerdo con este lenguaje, el fin del mundo es la destrucción de los malvados, la cosecha y el fin del mundo hacen una alusión directa a la familia humana en los últimos días, en lugar de la tierra, como muchos han imaginado; y lo que precederá a la venida del Hijo del Hombre, y la restitución de todo lo dicho por boca de todos los santos profetas desde el principio del mundo; y los ángeles deben tener algo que hacer en esta gran obra, porque ellos son los segadores.

“Así como la cizaña se junta y se quema en el fuego, así será en el fin del mundo; es decir, cuando los siervos de Dios salgan advirtiendo a las naciones, a los sacerdotes y al pueblo, y mientras endurecen sus corazones y rechazan la luz de la verdad, estos primeros son entregados a los golpes de Satanás, y la ley y el testimonio son cerrados, como en el caso de los judíos, se los dejan en tinieblas y se les entregan en el día de la quema; así quedan atados por sus credos, y sus bandas son fortalecidas por sus sacerdotes, [ellos] están preparados para el cumplimiento del dicho del Salvador: ‘El Hijo del Hombre enviará a Sus ángeles, y recogen de su reino a todos los que ofenden, ya los que hacen iniquidad, y los echan en un horno de fuego, allí será el lloro y el crujir de dientes.

“Entendemos que el trabajo de reunir el trigo en cobertizos, o graneros, se llevará a cabo mientras la cizaña está siendo atada, y preparándola para el día de la quema… Después del día de las quemas, los justos resplandecerán como el sol en el Reino de su Padre. Quien tenga oídos para oír, que oiga.”1

EVENTOS EN LAS VIDAS DE LOS APÓSTOLES

Una de las debilidades de Mateo 24 en la Biblia del Rey Santiago es que no distingue entre las profecías que Jesús hizo con respecto a los eventos que vendrán en las vidas de los Apóstoles y las profecías que se cumplirán en los últimos días. Mateo de JS restaura esa diferenciación con claridad. Primero detalla los eventos que vendrán a las vidas de los Apóstoles.

Profecías Engañosas, Persecución e Iniquidad

• Mateo-JS 5-6, 9 — Falsos profetas y mesías.  Jesús advirtió a sus discípulos que “tengan cuidado que nadie los engañe” (v. 5). Después de su partida, predijo que “vendrán muchos en mi nombre, diciendo: Yo soy el Cristo, y engañarán a muchos” (v. 6). Esto puede interpretarse en el sentido de que los hombres surgirían reclamando ser el mismo Cristo que había regresado a la tierra. También se puede interpretar que significa que algunos se levantarán y proclamarán que Jesús es el Cristo y, sin embargo, “engañarán a muchos” (v. 9). Ambos estarían en lo cierto

En los años que siguieron, hubo falsos cristos, Simón Magno, Menandro, Dositeo y otros, y falsos maestros que predicaron herejías destructoras. Las epístolas en la Biblia están llenas de advertencias sobre aquellos que ya habían surgido mientras los Apóstoles todavía estaban vivos. Estos falsos cristos y falsos maestros llevaron a muchos de los primeros Santos a apostatar de la fe.

• Mateo-JS 7 — Persecución.  Jesús advirtió a los Apóstoles que “ellos te entregarán para ser afligido, y te matarán, y serás aborrecido por todas las naciones, por mi nombre.” En los años venideros, los apóstoles fueron encarcelados (Hechos 5:18); Esteban fue apedreado (Hechos 7:54-60); Herodes ordenó matar a Santiago, el hijo del Zebedeo (Hechos 12:1-2). Los judíos no solo persiguieron a los que creían en Cristo, sino que también trataron celosamente de influir sobre los romanos para oponerse también al movimiento cristiano. Eventualmente, la mayoría, si no todos los Apóstoles, fueron martirizados. Solo quedó Juan el Bien Amado.

• Mateo-JS 8 — Deslealtad.  En medio de la confusión y la contienda doctrinal, Jesús dijo que “muchos [se ofenderían], se traicionarían unos a otros, y se odiarían unos a otros.” Aunque Él había enseñado que sus discípulos debían amarse los unos a los otros, las batallas de la doctrina y las posiciones de poder se volvieron peligrosas y sangrientas y causaron muchas divisiones entre los seguidores de Cristo.

• Mateo-JS 10 — Iniquidad en abundancia.  Jesús dijo que “la iniquidad abundará” tanto dentro como fuera de la Iglesia. Los Padres Apostólicos, aquellos que escribieron desde aproximadamente el año 50 DC hasta alrededor del 150 DC, dan amplio testimonio de la iniquidad que llenó a la Iglesia sin Apóstoles. La codicia, la avaricia, la rapacidad e incluso el adulterio se conocían entre los jefes de varias sectas que surgieron en ausencia de revelación.2

• Mateo-JS 10-11 — La compasión humana fracasará cuando el amor se enfríe.  Jesús dijo que “porque abundará la iniquidad, el amor de muchos se enfriará” (v. 10). La gente estará desilusionada e incrédula debido al mal comportamiento de sus líderes. Los sentimientos de amor fraternal y compasión fueron reemplazados por la sospecha, la competencia y las falsas afirmaciones de autoridad. Sin embargo, Jesús prometió, “el que permanezca firme y no sea vencido, será salvo” (v. 11).

Profecías de la Destrucción de Jerusalén

• Mateo-JS 12 — La Abominación de la Desolación vendrá de nuevo sobre Jerusalén.  Esto ya había sucedido una vez antes, cuando Jerusalén fue invadida por los babilonios. La gente sufrió horrores inexpresables de inanición, canibalismo y derramamiento de sangre sin sentido.

Pero el profeta Daniel predijo que volvería a suceder, y Jesús ahora les aseguró que las palabras de Daniel eran ciertas.

“Cuando veáis, pues, la abominación de la desolación, de la cual habló el profeta Daniel acerca de la destrucción de Jerusalén, entonces estaréis en el lugar santo.”

El Señor ha dado un consejo similar en nuestros días:

— D. y C. 87:8 — Debemos permanecer en lugares santos y que “no seáis movidos.” ¿Qué son estos lugares sagrados? Son nuestros hogares, nuestras capillas, nuestros templos y otras reuniones de los justos que se están preparando para la venida del Señor. Algunos no soportarán las calamidades que vendrán porque abandonarán los mismos lugares que los mantenían a salvo.

— D. y C. 101:22 — Debemos congregarnos en oración y culto. En esos mismos lugares santos mencionados anteriormente, debemos reunimos con otros Santos para el culto y la oración.

— D. y C. 133:14-15 — Debemos reunimos fuera de “Babilonia.” En lugar de aferramos al mundo, debemos abandonar sus malas prácticas y permanecer separados de la sangre y los pecados de nuestra generación. Debemos ser un pueblo santo y un real sacerdocio. Pero esta reunión no debe ser “apresurada” o sin preparación. Debe ser ordenada (v. 15).

El presidente Ezra Taft Benson dijo: “Los hombres santos y las santas mujeres están en lugares santos, y estos lugares sagrados incluyen nuestros templos, nuestras capillas, nuestros hogares y las estacas de Sión, que son, como el Señor declara, para defensa, y para refugiarse de la tormenta y de la ira, cuando se derrame sin mezcla sobre toda la tierra (D. y C. 115:6).”3

• Mateo-JS 13-17 — La gente tendrá que abandonar la ciudad.  Hablando de los días venideros en las vidas de los Apóstoles, el Señor dijo: “Huyan los que están en Judea a las montañas; Dejad que el que está en la azotea huya, y no regrese para sacar nada de su casa; tampoco permitáis que el que está en el campo regrese para quitarse la ropa” (vv. 13-15).

Cuando los romanos vinieron por ellos no tuvieron tiempo para tales cosas, y cuando les llegó la advertencia de sus inspirados líderes, debieron irse inmediatamente y no mirar hacia atrás. El Señor específicamente mencionó la dificultad que surgiría para aquellas “con niños, y para las que dan de mamar”, y les dijo “orad al Señor, que vuestra huida no sea en el invierno, ni en día Sábado (de reposo)” en que vuestro viaje se vería muy inhibido (w. 16-17).”

Aunque muchos judíos no creían que su gran ciudad y templo pudieran ser destruidos, las profecías del Señor se cumplieron en el año 70 DC. Creyendo que el Mesías vendría y los ayudaría en la batalla, los judíos se rebelaron contra los romanos en el año 66 DC. Cuatro años después, los romanos destruyeron toda la ciudad. Aquellos que escucharon al Salvador y huyeron a las montañas se salvaron. Aquellos que no lo hicieron, fueron dispersados o destruidos.

Eusebio, uno de los primeros historiadores de los cristianos, dijo que los cristianos que vivían en Jerusalén fueron advertidos por revelación a huir de la ciudad e ir a Pella, una ciudad al otro lado del río Jordán y hacia el Mar de Galilea (véase mapa a la derecha.4

El élder Marión G. Romney dijo: “Todos vosotros conocéis la secuela, cómo los judíos llevaron a cabo su horrible plan y crucificaron al Hijo de Dios, y cómo a partir de entonces continuaron luchando contra Su evangelio. También recordáis el precio que pagaron, cómo en el año 70 DC, la ciudad cayó en manos de los romanos como el punto culminante de un asedio en el que el historiador Josefo nos dice que hubo un millón cien mil personas asesinadas y decenas de miles fueron llevados cautivos, para luego ser vendidos como esclavos, o ser asesinados por bestias salvajes, o en combate de gladiadores para la diversión de los espectadores romanos. Toda esta destrucción y la dispersión de los judíos se habría evitado si la gente hubiera aceptado el evangelio de Jesucristo y por él hubieran cambiado sus corazones.”5

El élder Bruce R. McConkie dijo: “Jesús especificó que la destrucción vendría en los días de los discípulos. Y así vino, en venganza, sin restricción. El hambre excedía la resistencia humana; la sangre fluía en las calles; la destrucción hizo que el templo estuviera desolado; 1.100.000 judíos fueron masacrados; Jerusalén fue arada como un campo; y un remanente de una nación alguna vez poderosa, fue esparcido hasta los confines de la tierra. La nación judía murió, empalada en lanzas romanas, a manos de señores gentiles”6 Toda esta terrible destrucción cumplió la profecía de Jesús. Qué diferente podría haber sido si la gente solo hubiera escuchado y obedecido.

Las Profecías de Daniel con respecto a estos Eventos

• Daniel 9:26-27— La muerte del Mesíasla desolación de la ciudad. Daniel predijo que el “se quitará la vida al Mesías”, no por Su propio bien, sino por el nuestro. Entonces, “la gente del príncipe” [soldados romanos al servicio de César] “vendrá [y] destruirá la ciudad y el santuario” (v. 26). Este ataque será como una inundación por su rapidez y violencia, y al final del mismo “las desolaciones están determinadas” (v. 26). Con la destrucción del templo, “el sacrificio y…. la oblación [cesarán],” y el despliegue excesivo de abominaciones  “hará que la ciudad sea desolada”, terminando en su completa consumación, que será derramada sobre los desolados” (v. 27).

• Daniel 11:31 — La destrucción del templo.  Con la fuerza de las armas, “contaminarán el santuario.”…y quitarán el sacrificio diario, “reemplazándolo con una” abominación desoladora.

“Esta es la Abominación de la Desolación a la que Jesús se refería en Sus profecías (Mateo-JS 12).

• Daniel 12:11 — Un largo período de apostasía sin templo.  Desde el momento en que Jerusalén y el templo sean destruidos habrá un largo período de apostasía. Daniel lo caracteriza como “mil doscientos noventa días”, pero sus “días” son simbólicos y no literales. Sabemos por la historia que hubo al menos 1.760 años antes de que otro templo del Señor adornara la tierra.

• Mateo-JS 18-20 — Caracterización del Señor de estas dificultades.  Jesús les dijo a sus discípulos que en su día “habrá una gran tribulación sobre los judíos y sobre los habitantes de Jerusalén, como nunca antes fue enviada a Israel, de Dios, desde el comienzo de su reino hasta este tiempo; no, ni nunca más se enviará a Israel” (v. 18). Pero la destrucción de Jerusalén sería solo “el comienzo de los dolores que vendrán sobre ellos [los judíos]” (v. 19). “Y a menos que esos días [los días de su sufrimiento] debieran acortarse, no debería salvarse ninguna de sus carnes; pero por el bien de los elegidos, según el pacto, esos días serán acortados” (v. 20). (v. 20).

EVENTOS EN LOS ÚLTIMOS DÍAS

Señales que Preceden la Venida del Señor

Mateo-JS 21 proporciona una transición entre los eventos predichos para la vida y los eventos de los Apóstoles antes de la Segunda Venida. Repetidamente, el Señor dice, “Y otra vez. . . “para indicar un signo recurrente, uno que ocurriría en ambas eras. “He aquí, estas cosas te he hablado acerca de los judíos”, dijo Jesús, seguido de “y otra vez [en] aquellos días” (queriendo decir, en los últimos días).

• Mateo-JS 21-22 — Falsos cristos y falsos profetas.”Y otra vez, después de la tribulación de aquellos días que vendrán sobre Jerusalén, si alguno os dijere: He aquí está Cristo, o allí, no le creáis; porque en aquellos días también surgirán falsos Cristos y falsos profetas, y mostrarán grandes señales y maravillas, de tal manera que, de ser posible, engañarán a los escogidos, que son los elegidos según el pacto.”

Hemos visto una corriente sólida de falsos profetas y cristos desde el siglo XIX, y algunos de ellos han sido lo suficientemente persuasivos como para tener un seguimiento continuo incluso hoy en día. Incluso algunos Santos de los Últimos Días han quedado atrapados en sus reclamos. Los más populares en los últimos años han sido supuestos grupos de autoayuda que, en nombre de la superación personal, han persuadido a hombres y mujeres a dejar a sus familias en busca de estilos de vida utópicos. Todos esos movimientos son anti—Cristo, lo que significa que ofrecen un sustituto para la fe en Jesucristo y su Iglesia, y como tales solo conducirán a la condenación.

• Mateo 7:15-20 — Cómo podemos evitar ser engañados por falsos profetas.  Jesús advirtió contra tales falsos profetas, “que vienen a ti con vestiduras de ovejas, pero por dentro son lobos rapaces” (v. 15). Y aconsejó que podamos “conocerlos por sus frutos” (v. 16). Lo que conduce a la destrucción de la fe o la familia nunca puede ser de Dios. “¿Los hombres recogen uvas de espinas, o higos de cardos? De la misma manera todo árbol bueno da buenos frutos; pero el árbol corrupto produce malos frutos. Un buen árbol no puede dar malos frutos, ni un árbol corrupto puede dar buenos frutos” (vv. 17-18). Y “todo árbol que no da buen fruto es cortado y echado en el fuego” (v. 19). Entonces Jesús dijo otra vez para enfatizar, “por sus frutos los conoceréis” (v. 20).

• D.C. 45:57 — Aquellos que no son engañados.  El Señor declaró en nuestra misma dispensación que “los que son sabios y han recibido la verdad, y han tomado el Espíritu Santo para su guía,… no han sido engañados.” Estos fieles seguidores de Cristo “no serán expulsados y arrojados al fuego, sino que deberán atenerse al día

• D.C. 46:7-8 — La obedienciala oración son la clave. El Señor dijo: “se os ha ordenado en todas las cosa pedir a Dios, que las da liberalmente; y lo que el Espíritu os testificare, así quiero que hagáis con toda santidad de corazón, andando rectamente delante de mí, considerando el fin de vuestra salvación, haciendo todas las cosas en oración y dando gracias” (v. 8). Al hacer esto, podemos evitar ser “seducidos por espíritus malignos, o doctrinas de demonios, o los mandamientos de los hombres; porque algunos son de hombres, y otros de demonios” (v. 7). “Por tanto, guardaos, no sea que seáis engañados” (v. 8).

El presidente Harold B. Lee dijo: “El Profeta José Smith, en su versión inspirada de la misma escritura, agregó estas palabras significativas: ‘¿Quiénes son los elegidos, según el pacto’? Esto es lo que se ha dicho, en efecto, en esta conferencia: a menos que cada miembro de esta Iglesia gane para sí mismo un testimonio inquebrantable de la divinidad de esta Iglesia, él estará entre los que serán engañados en este día en que los ‘elegidos según el pacto’ serán puestos a prueba y probados. Solo sobrevivirán aquellos que hayan ganada por sí mismos ese testimonio.”7

El presidente Joseph F. Smith dijo: “El logro más grande que la humanidad puede hacer en este mundo es familiarizarse con la verdad divina, tan a fondo, tan perfectamente, que el ejemplo o la conducta de ninguna criatura que vive en el mundo pueda alejarlos jamás de la conocimiento que han obtenido. “Tras los pasos del Maestro,” el más grande de todos los maestros que haya recibido este mundo, es el curso más seguro a seguir que conozco en el mundo. Podemos absorber los preceptos, las doctrinas y la palabra divina del Maestro, sin ningún temor de que el Ejemplar vaya a fallar en llevar a cabo y ejecutar Sus propios preceptos y cumplir Sus propias doctrinas y requisitos.”8

• Mateo-JS 23, 28-29 — Guerras y rumores (noticias) sobre guerras.  Jesús proporcionó esta señal “por el bien de los elegidos” (v. 23), lo que significa los miembros de Su Iglesia. “También oirás de guerras y rumores de guerras; mira que no estés turbado, porque todo lo que te he dicho debe suceder; pero el final aún no ha llegado” (v. 23). Él repite esta señal en el versículo 28, seguido de esta predicción: “Se levantará nación contra nación, y reino contra reino” (v. 29).

• D. y C. 6:34 — “No os turbéis” por guerras y rumores de guerras.  Especialmente en los últimos años, parece que la guerra nunca ha de cesar. Los terroristas, como los ladrones de Gadiantón, infestan toda la tierra e incluso controlan algunos gobiernos. Todo puede ser bastante preocupante. Pero el Señor ha aconsejado: “no temáis, pequeño rebaño; haz el bien; deja que la tierra y el infierno se combinen contra ti, porque si estás edificado sobre mi roca, ellos no pueden prevalecer.”

Yo tenía motivos para reflexionar sobre esta promesa en una reunión grupal del Sumo Sacerdocio un reciente domingo por la mañana. Los hermanos estaban hablando del continuo derramamiento de sangre que los grupos terroristas infligen aún a los civiles más inocentes. Ellos también observaron que la “guerra contra el terror” se había convertido en la guerra más duradera en la historia de los Estados Unidos y aún no había terminado. En la discusión había un aire de pesimismo, como si nada lo pudiera resolver.

Me sentí obligado a decirles: “Hermanos, esos terroristas están condenados. Ya sabemos cómo saldrá todo. El Señor lo ha dicho Y también nos ha aconsejado que no temamos. Solo necesitamos “hacer el bien” en nuestras vidas personales y colectivas y luego esperar en el Señor para su decisivo derrocamiento de toda esa maldad.

• D. y C. 45:34-35 — Estas guerras continuas son una señal que Su venida está cerca.  Cuando Jesús compartió estas profecías con Sus apóstoles, “ellos se turbaron” (v. 34). Pero Él les dijo: “No os turbéis, porque cuando todas estas cosas acontezcan, sabrán que las promesas que les han sido hechas se cumplirán” (v. 35].

El élder Bruce R. McConkie profetizó en 1979, “bandas de ladrones de Gadiantón infestarán a todas las naciones, aumentarán la inmoralidad y el asesinato y el crimen, y parecerá que la mano de todo hombre está en contra de su hermano. No necesitamos detenernos más en estas cosas. Se nos ordena buscar las Escrituras donde se relatan con fuerza y fervor, y seguramente sucederán. Puede ser, por ejemplo, que nada excepto el poder de la fe y la autoridad del sacerdocio puede salvar a individuos y congregaciones de los holocaustos atómicos que seguramente se producirán. Y entonces levantemos la voz de advertencia y digamos: cuidado; preparaos; observad y estéis listos. No hay seguridad en ningún camino excepto en el camino de la obediencia y la conformidad y la justicia.”9

El élder McConkie también profetizó: “Esta guerra será una guerra religiosa, una guerra en la que los siervos de Satanás asaltarán a los siervos del Señor y a aquellos aliados cc r. ellos. La grande y abominable iglesia hará la guerra contra todo lo que es decente en el mundo y luego será arrojada al fuego devorador…. Repetimos: es una guerra religiosa. Las fuerzas del anticristo buscan destruir la libertad, la libertad y el derecho; buscan negar a los hombres el derecho de rendir culto al Señor; ellos son los enemigos de Dios. El tercio que permanece en la tierra de Israel es el pueblo del Señor. Creen en Cristo y aceptan a José Smith como su profeta y revelador en los últimos días.”10

El élder M. Russell Ballard dijo:

Aunque las profecías nos dicen que estas cosas van a ocurrir, cada vez más personas expresan una gran alarma ante lo que parece ser una aceleración de la calamidad mundial. . . . Hay que admitir que tenemos amplias razones para estar profundamente preocupados porque no vemos respuestas inmediatas a los problemas aparentemente insolubles a los que se enfrenta la familia humana. Pero independientemente de esta imagen oscura, que finalmente empeorará, ¡nunca debemos permitirnos perder la esperanza!…

El Señor está en el centro. Él conoce el final desde el principio. Él nos ha dado la instrucción adecuada que, de seguirse, nos verá seguros en cualquier crisis. Sus propósitos se cumplirán, y algún día comprenderemos las razones eternas de todos estos eventos.

Por lo tanto, hoy debemos tener cuidado de no reaccionar en forma exagerada, ni debemos quedar atrapados en preparativos extremos; sino lo que debemos hacer es guardar los mandamientos de Dios y nunca perder la esperanza.

Pero, ¿dónde encontramos esperanza en medio de tanta agitación y catástrofe? Simplemente, nuestra única esperanza de seguridad espiritual durante estos tiempos turbulentos es volver nuestras mentes y nuestros corazones a Jesucristo Armados con el escudo de la fe, podemos superar muchos de nuestros desafíos diarios y vencer nuestras mayores debilidades y miedos, sabiendo que si hacemos nuestro mejor esfuerzo para guardar los mandamientos de Dios, pase lo que pase, estaremos bien.11

• Mateo-JS 24-26 — Falsos rumores sobre la venida de Cristo. Aun aquellos que creen en Cristo pueden ser engañados. Una hermana en mi clase de CES recientemente se me acercó para contarme acerca de un vecino que había quedado atrapado en un grupo que supuestamente se estaba preparando para la venida de Cristo. Su líder les había aconsejado que vendieran sus casas, juntaran sus recursos y vivieran en tiendas de campaña fuera de las ciudades. Como con todos estos cultos, este solo terminará en pobreza financiera y espiritual para todos los involucrados. El Señor declaró claramente: “Si te dijeren: He aquí, él está en el desierto; no salgas; o revista mira, él está en las cámaras secretas; no lo crean” (v. 25). No podemos prepararnos para su venida en conventos, retiros o cualquier otra forma de aislamiento. El Señor no obra de esa manera. “Porque así como la luz de la mañana sale del oriente, y brilla hacia el oeste, y cubre toda la tierra, así será la venida del Hijo del Hombre” (v. 26).

Un Falso Profeta del Día del Juicio

• Mateo-JS 27 — Israel se congregó de todas partes de la tierra.  Jesús usó la metáfora de una carcasa y águilas para ilustrar Su posición. “Y ahora os muestro una parábola. He aquí, dondequiera que esté la carcasa, allí se juntarán las águilas; así serán igualmente elegidos mis escogidos de los cuatro ángulos de la tierra.” Estas profecías se están cumpliendo hoy. La obra misionera está aumentando, y el evangelio se está enseñando y aceptando en más y más lugares alrededor del mundo.

• Mateo-JS 31 — Un testigo para “todas las naciones.”  “Y de nuevo,… [Observen cómo esta es una señal que se repite] este Evangelio del Reino se predicará en todo el mundo, para dar testimonio a todas las naciones, y entonces vendrá el fin o la destrucción de los impíos.”

• Mateo-JS 29 — Desastres naturales, que afectarán aun a los justos.  “Habrá hambres, pestilencias y terremotos en diferentes lugares.” Hace poco escuché a un científico en televisión afirmar que no hay un aumento en los desastres naturales, solo un aumento en nuestra conciencia de ellos. Esto le brindó la oportunidad de criticar a las personas religiosas que, según él, eran más emocionales que racionales. Pensé para mí mismo, “Y apostaría que su nombre es Korihor” (véase Alma 30:12-13).

¡Cuán vanos son los eruditos en nuestros días! Si dicen que algo es así, entonces se espera que les creamos sin cuestionarnos. Sin embargo, cuando revisé el registro por mí mismo, descubrí que efectivamente ha habido un aumento en la actividad de terremotos, volcanes y tornados en los últimos 100 años. Jesús declaró que así sería, y así es.

— D. y C. 63:34 — “Los Santos tampoco escaparán.”  No somos inmunes a los despojos de la naturaleza. El Señor hace que llueva sobre los impíos y los justos (Mat. 5:45). “Sin embargo, yo, el Señor, estoy con ellos, y descenderé en el cielo de la presencia de mi Padre y consumiré a los malvados con fuego inextinguible.” Los justos se librarán de tal destrucción total, pero no obstante podrán sufrir por un tiempo.

El élder Bruce R. McConkie dijo: “Habrá terremotos, inundaciones y hambrunas. Las olas del mar se levantarán más allá de sus límites, las nubes retendrán su lluvia, y las cosechas de la tierra se marchitarían y morirán. Habrá plagas, pestilencias, enfermedades y muerte. Un azote desbordante cubrirá la tierra y una enfermedad desoladora barrerá la tierra. Las moscas se apoderarán de los habitantes de la tierra y los gusanos entrarán en ellos (D. y C. 29:14-20). ‘su carne caerá de sus huesos, y sus ojos de sus cuencos’ (D. y C. 29:19).”12

El Profeta José Smith dijo: “Expliqué acerca de la venida del Hijo del Hombre; también que es una idea falsa que los Santos escaparán a todos los juicios, mientras que los malvados sufrirán; porque toda carne está sujeta a sufrir, y ‘los justos difícilmente escaparán’; aun así muchos de los santos escaparán, porque los justos vivirán por la fe; sin embargo, muchos de los justos caerán presa de la enfermedad, la peste, etc., a causa de la debilidad de la carne, y sin embargo serán salvos en el Reino de Dios. De modo que es un principio impío decir que tal o cual cosa ha transgredido porque han sido presa de la enfermedad o la muerte, ya que toda carne está sujeta a la muerte; y el Salvador dijo: ‘No juzguéis, no sea que seáis juzgados.”’13

• Mateo-JS 30, 42 — Degeneración moral, como en los días de Noé.  Como en los días anteriores, “la iniquidad abundará [y] el amor de los hombres se enfriará; pero el que no será vencido, será salvo” (v. 30). Y “estará con ellos, como lo estuvieron en los días antes del diluvio; porque hasta el día en que Noé entró en el arca, comían y bebían, se casaban y daban en casamiento” (v. 42). ¿No vemos esto a nuestro alrededor? Los malvados disfrutan en su maldad y perversiones, lanzando insultos y amenazas a cualquiera que se atreva a cuestionarlos. Festejan y marchan y hacen exhibiciones lascivas. Y continuarán haciéndolo hasta que el Señor venga y ponga fin a todas esas necedades.

• Mateo-JS 32 — Otra abominación de desolación en Jerusalén. “Y volverá a cumplirse la abominación de la desolación, de la que habló el profeta Daniel.” Esto había sucedido dos veces antes, cuando los babilonios tomaron cautivo a Israel y otra vez cuando el ejército romano invadió Jerusalén en el año 70 DC. Volverá a suceder en últimos días.

El élder Bruce R. McConkie dijo: “Toda la desolación y la ruina que asistieron a la destrucción anterior de Jerusalén no es sino el preludio del próximo asedio. Tito y sus legiones masacraron a 1.100.000 judíos, destruyeron el templo y surcaron la ciudad. En la próxima recreación de esta “abominación desoladora”, el mundo entero estará en guerra, Jerusalén será el centro del conflicto, toda arma moderna será utilizada, y en medio del asedio vendrá el Hijo del Hombre, poniendo su pie sobre el Monte de los Olivos y peleando la batalla de Sus Santos. (Zacarías 12:1-9).14

El élder McConkie también dijo: “En el día venidero, un día terrible, aterrador y condenatorio, aflicciones sin medida caerán sobre los hombres. Peste, plagas y muerte acecharán la tierra. Los reyes de la tierra y del mundo entero se reunirán para pelear la batalla de ese gran día de Dios Todopoderoso. Su centro de comando estará en Armagedón, con vistas al valle de Megido. Todas las naciones se juntarán contra Jerusalén. Doscientos mil guerreros y más, doscientos millones de hombres armados y más, saldrán para conquistar o morir en las llanuras de Esdraelón y en todas las naciones de la tierra. En el punto álgido de esta guerra, el Señor Jesús pondrá su pie en el Monte de los Olivos y salvará a Su pueblo del antiguo pacto. De todo esto somos conscientes.”1

• Mateo-JS 33 — Oscurecimiento del sol y la luna.  El Señor dijo que “inmediatamente después de la tribulación de aquellos días”, o tal vez como resultado de la contaminación y la guerra que alcanzará a toda la tierra, “el sol se oscurecerá, y la luna no dará su luz, y las estrellas caerán del cielo, y los poderes del cielo serán sacudidos.

“La idea de las estrellas que caen del cielo es particularmente interesante dado el reciente énfasis sobre el peligro de los asteroides. Solo uno de esos impactos, similar al que se arrojó en el Golfo de México, oscurecería el cielo con sus restos, oscureciendo el sol y matando a gran parte de la vida vegetal y animal de la tierra. La tierra será “quemada” en Su venida, pero esa quema puede ocurrir por causas naturales.

• Mateo-JS 32 34-35 — Se cumplirá toda palabra de profecía.  El Señor declaró que” no pasará la generación en la cual se muestren estas cosas, sin que se cumpla todo lo que yo he dicho” (v. 34). La palabra “generación” aquí significa “dispensación”, y la promesa es que todas estas cosas ocurrirán en la dispensación del cumplimiento de los tiempos. Y, “Aun cuando llegarán los días en que pasarán el cielo y la tierra; sin embargo, mis apalabras no pasarán, sino que todas se cumplirán” (v. 35). Podemos contar con que se muestren estas señales, y cuando lo hagan, podremos saber que Su venida está cerca, si a nuestras puertas.

El Profeta José Smith dijo:

La venida del Hijo del Hombre nunca será, nunca podrá ser hasta que se derramen los juicios de los que se habla para esta hora: juicios que estén comenzado. Pablo dice: “Vosotros sois los hijos de la luz, y no de las tinieblas, para que ese día os sorprenda como ladrón en la noche.” No es el designio del Todopoderoso venir sobre la tierra y aplastarla y reducirla a polvo, pero Él lo revelará a Sus siervos los profetas.

Judá debe regresar, Jerusalén debe ser reconstruida, y el templo, y las aguas saldrán de debajo del templo, y las aguas del Mar Muerto serán sanadas. Llevará algún tiempo reconstruir los muros de la ciudad y el templo,… y todo esto debe hacerse antes de que el Hijo del Hombre haga su aparición. Habrá guerras y rumores de guerras, señales en los cielos arriba y en la tierra debajo, el sol se ‘convertirá en oscuridad y la luna en sangre, terremotos en diversos lugares, los mares agitándose más allá de sus límites…16

• Mateo-JS 36 — La señaldel Hijo del Hombreserá vista por todos.  “Después de la atribulación de aquellos días, y de haber sido conmovidos los poderes de los cielos, entonces aparecerá la señal del Hijo del Hombre en el cielo, y entonces se lamentarán todas las tribus de la tierra; y verán al Hijo del Hombre que viene en las nubes del cielo, con poder y gran gloria.” ¿Qué es esta señal? Es la misma que apareció en el cielo a Su nacimiento y la misma que también vieron los nefitas. Volverá a aparecer como “una gran señal en el cielo, y todo el pueblo la verá junta” (D. y C. 88:93).

El Profeta José Smith dijo: “Entonces aparecerá una gran señal del Hijo del Hombre en el cielo.” Pero, ¿qué hará el mundo? Dirán que es un planeta, un cometa, etc. Pero el Hijo del Hombre vendrá como la señal de la venida del Hijo del Hombre, que será como la luz de la mañana que sale del oriente.”17

• Mateo-JS 37 — “El que atesore mi palabra, no será engañado.”  Si “atesoramos” su palabra, “el Hijo del Hombre vendrá y enviará a sus ángeles delante de sí con el fuerte son de trompeta, y juntarán al resto de sus escogidos de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo hasta el otro.” Aquellos que son informales en su estudio de las Escrituras no estarán preparados para todo lo que ocurrirá antes de Su venida. Serán engañados o espantados, y, como las cinco vírgenes insensatas, se encontrarán sin fuerza espiritual suficiente para vivir el día de Su venida.

El presidente Harold B. Lee dijo:

Hay entre nosotros muchas escrituras sueltas que predicen las calamidades que están por sobrepasarnos. Algunas de estos han sido publicitadas como si fueran necesarias para despertar al mundo ante los horrores que están a punto de alcanzarnos. Muchos de estas son de fuentes sobre las cuales no puede haber una dependencia incuestionable. ¿Vosotros sois portadores del sacerdocio conscientes del hecho de que no necesitamos advertir de estas publicaciones si estuviéramos familiarizados con lo que las Escrituras ya nos han dicho con claridad?…

Hermanos, estos son algunos de los escritos por los que debéis preocuparos, en lugar de comentarios que pueden provenir de aquellos cuya información puede no ser la más confiable y cuyos motivos pueden estar sujetos a cuestionamiento. Y puedo decir, entre paréntesis, que la mayoría de estos escritores no están impedidos por tener información auténtica sobre sus escritos

Si nuestra gente quiere ser guiada con seguridad durante estos tiempos problemáticos de engaños y falsos rumores, deben seguir a sus líderes y buscar la guía del Espíritu del Señor para evitar ser presas de manipuladores astutos que, con astucia sofística, buscan llamar la atención y obtener un seguidor para servir a sus propias nociones y, a veces, motivos siniestros18

Ningún Hombre Conoce la Hora Exacta

• Mateo-JS 37 — ¡Él viene!  Podemos saber con certeza que “el Hijo del Hombre vendrá, y él enviará a sus ángeles delante de él con el gran sonido de una trompeta, y ellos reunirán el resto de sus elegidos de los cuatro vientos, desde un extremo del cielo al otro.” Mientras el mundo se burla de aquellos que creen en una gran Segunda Venida de Cristo, los fieles estén atentos a las señales que la acompañarán…

• Mateo-JS. 38-39 — La parábola de la higuera  es útil para saber cuándo vendrá. La higuera muestra sus hojas antes que cualquier otro árbol y es un indicador confiable de la llegada del verano. Por lo tanto, “cuando sus ramas todavía están tiernas y empieza a cubrirse de hojas, sabéis que el verano está cerca” (v. 38). De la misma manera, “mis escogidos, cuando vean todas estas cosas, sabrán que él está cerca, sí, a las puertas.” (v. 39).

• Mateo-JS 40-43 — La mayoría de la gente se sorprenderá y no estará preparada,  como en los días de Noé. El Señor repite para enfatizar, “pero de aquel día y hora, nadie sabe; no, ni los ángeles de Dios en el cielo, sino mi Padre únicamente.” (v. 40). Cualquier hombre o grupo que dice haberlo descifrado está equivocado.” Pero como fue en los días de Noé, así también será en la venida del Hijo del Hombre;… porque hasta el día en que Noé entró en el arca, estaban comiendo y bebiendo, casándose y dando en casamiento; Y no supieron hasta que llegó el diluvio y se los llevó a todos; así también será la venida del Hijo del Hombre.”

• Mateo-JS 44-46 — “Velad, pues, porque no sabéis a qué hora... “Será tan repentino que” en los últimos días, dos estarán en el campo, uno será tomado, y el otro será dejado; Dos estarán moliendo en el molino, uno será tomado, y el otro dejado” (vv. 44-45). Esto me recuerda una broma que escuché sobre la ciudad de Enoc. Se trataba de un hombre que, aunque por lo demás era justo, había decidido tomarse un domingo e ir a pescar. Fue, pero cuando regresó, encontró la ciudad vacía y una nota en su puerta que decía: “Perdón por extrañarte.” Enoc. ”Siempre debemos están preparados, con aceite en nuestras lámparas espirituales, para que cuando venga el Novio estemos preparados para estar con él. “Y lo que digo a uno, lo digo a todos los hombres; velad pues, porque no sabéis a qué hora vendrá tu Señor” (v. 46).

• Mateo-JS 47-48 — “Sabed esto. . . estad preparados.. . Como se discutió al comienzo de este capítulo, el Señor sabe que si supiéramos cuándo vendría, podríamos llegar a ser complacientes hasta el último minuto. En cambio, como un sabio dueño de casa, debemos protegernos de un “ladrón en la noche” al observar y estar preparados.

“Por tanto, estad preparados también vosotros, porque el Hijo del Hombre vendrá a la hora que no pensáis.”

• Mateo-JS 49-54 — La parábola del siervo fiel.  Jesús comparó a aquellos en los últimos días que se estarían preparando para la venida de Cristo a “un siervo prudente y fiel, a quien su señor ha puesto por mayordomo sobre su casa, para darles alimento a su debido tiempo” (v. 49). Si, cuando el Señor viene, encuentra que Su siervo administra bien las cosas “y lo pondrá por mayordomo de todos sus bienes” (v. 50). “Más si aquel siervo inicuo dijere en su corazón: Mi señor demora su venida, y empezare a golpear a sus consiervos, y a comer y beber con los borrachos, el señor de ese siervo vendrá en el día en que este no lo estará esperando, y a la hora que no sabe, y lo cortará por en medio, y le señalará su parte con los hipócritas; allí será el llanto y el crujir de dientes.”

• 1 Tesalonicenses 4:16-17 — Los justos serán “arrebatados” cuando venga el Salvador.  Pablo dijo que “el Señor mismo descenderá del cielo con un grito, con la voz del arcángel y con la trompeta de Dios; y los muertos en Cristo resucitarán primero” (v. 16). Estos, junto con los que “están vivos y que quedan, serán arrebatados juntamente con ellos en las nubes, para recibir al Señor en el aire” (v. 17).

— D. y C. 88:96-98 — Los primeros frutos de la resurrección. ”Los santos que están sobre la tierra, que están vivos, serán vivificados arrebatados para recibirlo. Y los que hayan dormido en sus sepulcros saldrán, porque serán abiertos sus sepulcros; y también ellos serán arrebatados para recibirlo en medio del pilar del cielo. Ellos son de Cristo, las primicias, los que descenderán con él primero, y los que se encuentran en la tierra y en sus sepulcros, los que primero descenderán con él, y los que están en la tierra y en sus sepulcros.” Todos estos serán “arrebatados para recibirlo; y todo esto por la voz del son de la trompeta del ángel de Dios.”

El élder Bruce R. McConkie dijo:

Así, aquellos que permanecerán en el día, quienes permanecerán en la tierra cuando sean transfigurados (D. y C. 63:20-21), son aquellos que son honestos y rectos y que están viviendo al menos esa ley que los llevaría al reino terrestial de gloria en la resurrección. Cualquiera que viva según los estándares telestiales ya no puede permanecer en la tierra y por lo tanto no puede soportar el día.

Así, encontramos a Malaquías enlistado entre aquellos que no tolerarán el día siguiente: hechiceros; adúlteros; falsos timadores; los que oprimen al jornalero, a la viuda y al huérfano en sus salarios; los que alejan a los hombres de la verdad; aquellos que no temen a Dios; miembros de la verdadera Iglesia que no pagan un diezmo honesto; los que hacen maldad; y el orgulloso Todos estos, dice, serán como rastrojo cuando llegue el día en que arderán como un horno (Mal. 3; 4; D. y C. 64:23-25).

LA VENIDA DEL SEÑOR

La Aparición del Señor en el Monte de los Olivos

• Zacarías 14:4-7 — Cristo peleará contra los enemigos de Israel.  Los judíos estarán al borde del desastre, su ciudad rodeada de millones de enemigos, todos muriéndose de hambre y muchos de ellos heridos. Gran parte de la ciudad habrá sido tomada cautiva. Los dos profetas que les envió el Señor yacerán muertos en las calles.

Todo parecerá sin esperanza. Y entonces vendrá el Señor.

Tan pronto como “sus pies pisen”… sobre el monte de los Olivos, que está delante de Jerusalén al oriente,.. El monte de los Olivos se partirá en medio del mismo… y habrá un valle muy grande, y la mitad del monte se desviará hacia el norte, y la mitad hacia el sur” (v. 4). Esto proporcionará un camino para escapar y los judíos “huirán al valle de las montañas” por seguridad (v. 5).

Como fue el caso entre los nefitas cuando nació Jesús, “la luz no será clara, ni oscura”—”un día” será más de un día y una noche porque “al caer la tarde habrá luz” (vv. 6-7). Por lo tanto, habrá un día y una noche y otro día sin oscuridad.

El élder Bruce R. McConkie dijo: “Hablando de estas batallas finales que acompañarán Su regreso, el Señor dice: ‘Reuniré a todas las naciones para pelear contra Jerusalén, y la ciudad será tomada, y las casas serán saqueadas, y las mujeres violadas; y la mitad de la ciudad irá en cautiverio, y el resto del pueblo no será arrojado de la ciudad. “Sin embargo, el final del conflicto será diferente esta vez de lo que fue en la antigüedad. ‘Entonces saldrá el Señor’, dice el registro profético, ‘y luchará contra esas naciones, como cuando luchó en el día de la batalla. Y sus pies se paren ese día sobre el monte de los Olivos,… y el Señor será rey sobre toda la tierra.”’

• Apocalipsis 16:14-21 — Los grandes desastres naturales devastarán a los enemigos de Israel.  Juan llamó a los enemigos de Israel “espíritus de demonios que hacen milagros, que sacan a los reyes de la tierra y de todo el mundo para reunirlos en la batalla de aquel gran día de Dios Todopoderoso” (v. 14). Se reunirán “en un lugar llamado en el idioma hebreo Armagedón” (v. 16). Este es el ejército que amenazará con destruir Jerusalén. Pero como parecen estar listos para conquistar, “una gran voz del templo del cielo, del trono” dirá: “Hecho está” (v. 17). Luego habrá “voces y truenos y relámpagos; y. . . un gran terremoto, tal como no fue desde que los hombres estuvieron sobre la tierra, tan poderoso fue un terremoto, y tan grande” (v. 18).

Jerusalén se dividirá en tres partes mientras “las ciudades de las naciones [caen] y “Babilonia [viene] en memoria delante de Dios, para darle el cáliz del vino del furor de su ira” (v. 19). Todo el paisaje cambiará (v. 20). Y entonces el Señor derramará sobre el ejército enemigo “un gran granizo del cielo, cada piedra cerca del peso de un talento [aproximadamente 34.3 kilogramos o 75.6 libras]: y los hombres blasfemaron a Dios a causa de la plaga del granizo [que] fue muy grande” (v, 21).

• Zacarías 12:8-10 — “Me mirarán aquellos que traspasaron.”  “En aquel día el Señor defenderá al morador de Jerusalén,” escribió Zacarías (v. 8), y también “procurará destruir a todas las naciones que vinieren contra Jerusalén” (v. 9). Él “derramará sobre la casa de David, y sobre los moradores de Jerusalén, espíritu de gracia y de oración; y mirarán a mí, a quien traspasaron, y llorarán como se llora por hijo unigénito, afligiéndose por él como quien se aflige por el primogénito” (v. 10; énfasis agregado).

• D. y C. 45:40-45 — “He aquí, yo vendré.”  La batalla por Jerusalén involucrará “señales y prodigios.”… en los cielos arriba, y en la tierra debajo. Y verán sangre, y fuego, y vapores de humo” (vv. 40-41). El remanente de los judíos se habrá reunido en Jerusalén (v. 43), y en su hora de gran necesidad “me buscarán, y he aquí que yo iré; y me verán en las nubes del cielo, revestido de poder y gran gloria; con todos los santos ángeles; y el que no me esté esperando será desarraigado” (v. 44).

• D. y C. 45:48-50 — Los impíos se lamentarán.  Cuando el Señor ponga Su pie sobre el Monte de los Olivos, “se partirá en medio, y se partirá por en medio, y temblará la tierra y se tambaleará, y también se estremecerán los cielos” Y el Señor emitirá su voz su voz, y todos los confines de la tierra la oirán; y las naciones de la tierra se lamentarán, y los que hayan reído descubrirán su insensatez. Y la calamidad oprimirá al burlador, y el mofador será consumido; y los que se desvelan para obrar iniquidad serán talados y echados al fuego.” Esta es la” Segunda Venida “acerca de la cual los malvados se han burlado, y cuando de repente esté sobre ellos se darán cuenta de su destino.

• D. y C. 45:51-53 — “¿Qué son estas heridas en tus manos y en tus pies?”  Contemplando a su tan esperado Mesías que los habrá salvado de una destrucción segura, los judíos de Jerusalén preguntarán: “¿Qué son estas heridas en tus manos y en tus pies?” (v. 51). Y el Señor responderá: “Estas heridas son las heridas con que fui herido en casa de mis amigos.” Soy el que fue levantado. Soy Jesús que fue crucificado. Yo soy el Hijo de Dios” v. 52). “Y entonces llorarán a causa de sus iniquidades; y se lamentarán porque persiguieron a su rey” (v. 53). (Véase también Zacarías 13:6).

El élder Parley Pratt dijo:

El Señor vendrá en el mismo momento del derrocamiento de ese ejército, sí, de hecho, incluso mientras están en el acto de tomar Jerusalén, y ya han logrado tomar la mitad de la ciudad, y arruinar sus casas, y deslumbrante sus mujeres.

Entonces, he aquí que su esperado Mesías, de repente apareciendo, se parará sobre el Monte de los Olivos, un poco al este de Jerusalén, para luchar contra esas naciones y liberar a los judíos.

Zacarías dice que el Monte de los Olivos se partirá en dos, de este a oeste, y la mitad de la montaña se retirará hacia el norte, mientras que la otra mitad caerá hacia el sur, formando de repente un valle muy grande, en el que los judíos huirán para protegerse de sus enemigos como huyeron del terremoto en los días de Uzías, rey de Judá; mientras que el Señor viene y todos los santos con él.

Entonces, los judíos contemplarán a ese largo y esperado Mesías, viniendo en poder para su liberación, como siempre lo buscaron. Él destruirá a sus enemigos, y los librará de problemas en el mismo momento en que estén en la mayor consternación, y estén a punto de ser tragados por sus enemigos. ¡Pero cuál será su asombro cuando estén a punto de caer a los pies de su Libertador, y reconocerlo a Él como su Mesías! Descubren las heridas que una vez fueron hechas en Sus manos, pies y costado; y en la investigación, reconozcan de inmediato a Jesús de Nazaret, el Rey de los Judíos, el hombre tan rechazado durante tanto tiempo…

• Zacarías 12:11-14 — “En aquel día habrá gran llanto en Jerusalén”  por tres razones:

  1. Muchos judíos habrán sido asesinados por los ejércitos sitiados.
  2. Las familias estarán dispersas y no podrán contactarse entre ellas.
  3. Los judíos salvos se darán cuenta que Aquel a quien han rechazado durante tanto tiempo y a quien sus antepasados persiguieron y mataron es verdaderamente el Mesías.

El presidente Joseph Fielding Smith dijo: “Entonces lo aceptarán como su Redentor, lo cual nunca han estado dispuestos a hacer. Entonces es el tiempo del que se habla en este pasaje de Zacarías, cuando cada familia irá a llorar; la casa de David, la casa de Natán, los judíos. Ellos caerán. Ellos desgarrarán sus vestiduras, y se lamentarán y llorarán porque no estaban dispuestos a aceptar al Hijo de Dios sino que aceptaron las enseñanzas de sus padres y rechazaron a su Redentor y Mesías. Entonces caerán a Sus pies y lo adorarán.”


Notas:

  1. Enseñanzas del Profeta José Smith,selección de El élder Joseph Fielding Smith (1976), págs. 100-101.
  2. Ver el libro de Tad E. Callister La ApostasíaInevitable y la Restauración Prometida [2006], Esta es una de las obras mejores y más completas que se hayan hecho sobre las condiciones de la apostasía después de e muerte de los Apóstoles. Lo recomiendo encarecidamente a cualquiera que quiera entender qué pasó y por qué.
  3. ”Prepárense para el Gran Día del Señor”, Discursos Devocionales al lado del fuego de UBY1981,pág. 68.
  4. Comentario Doctrinal del Nuevo Testamento,1:644-645.
  5. En el Informe de la Conferencia, octubre de 1948, págs. 76-77.
  6. Comentario Doctrinal del Nuevo Testamento,1:644.
  7. En el Informe de la Conferencia, octubre de 1950, pág. 129.
  8. Doctrina del Evangelio,5.a edición (1939J, págs. 3-4.
  9. ”Permaneced Independiente por Encima de Todas las Demás Criaturas”, Revista Liahona,mayo de 1979, pág. 93.

10.El Mesías Milenario: La Segunda Venida del Hijo del Hombre [1982), págs. 476, 465-466.

  1. En el Informe de la Conferencia, octubre de 1992, págs. 41-43; o revista Liahona,noviembre de 1992, págs. 31-32.
  2. ”Permaneced Independiente por Encima de Todas las Demás Criaturas”, Revista Liahona,mayo de 1979, pág. 93.
  3. Enseñanzas del Profeta José Smith,págs. 162-163.
  4. Comentario Doctrinal del Nuevo Testamento,1:659.
  5. El Mesías Milenario La Segunda Venida del Hijo del Hombre,pág. 476.
  6. Enseñanzas del Profeta José Smith,págs. 286-287.

17.Enseñanzas del Profeta José Smith, pág. 287.

  1. ”Admoniciones para el sacerdocio de Dios” Revista Liahona,enero de 1973, págs. 105-106.
  2. Comentario Doctrinal del Nuevo Testamento,1:669.
  3. Comentario Doctrinal del Nuevo Testamento,1:659-660
  4. Una Voz de Advertencia,(1837], pág. 41.

22.Señales de los Tiempos (1952), págs. 145-146.

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