Conferencia 47

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Alma 5-10:
El Bien y el Mal y la
Predicción del Nacimiento de Cristo

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Ahora estamos en ese largo quinto capítulo de Alma. En el versículo 53, él se vuelve específico sobre algo. Notarán que en los versículos 40 al 43 habla en términos generales sobre el mal y el bien. Versículo 40: “Porque os digo que todo lo que es bueno viene de Dios, y todo lo que es malo viene del diablo.” Bueno, ¿de qué está hablando? En el versículo 53, él es específico; dice de qué está hablando: “¿Podéis dejar de lado estas cosas y pisotear al Santo bajo vuestros pies? Sí, ¿podéis enorgulleceros en el orgullo de vuestros corazones?” Ahora habla específicamente sobre ser malvado: “¿Persistiréis en el uso de vestiduras costosas y en poner vuestros corazones en las cosas vanas del mundo, en vuestras riquezas?”

Siempre me ha llamado la atención la vestimenta costosa. Está tan presente en el Libro de Mormón, y lo he leído desde que era un niño. Detesto la vestimenta costosa. Obtengo toda mi ropa en Deseret Industries; todo este atuendo viene de Deseret Industries, excepto cuando mis hijos me hacen usar otras cosas de vez en cuando. Ellos preferirían ser encontrados muertos en un terreno baldío antes que comprar en Deseret Industries. No sé por qué. Lo único malo de estas ropas es que a veces se caen los forros y los cierres se comportan mal. Pero, ¿por qué no, cuando consigues esto por cuatro dólares y los pantalones por tres? No se puede superar. Pero no se supone que uses “vestiduras costosas y pongas vuestros corazones en las cosas vanas del mundo, en vuestras riquezas.” Aquí se resume todo eso. Aquí estamos de nuevo en este tema.

Y el próximo versículo, por supuesto, es nuevamente sobre la igualdad: “Sí, ¿persistiréis en suponer que sois mejores unos que otros?” Y luego obtienes un reflejo de esta tensión persistente. Mientras Alma esté presente, tendrás esta tensión. Notarás esta tensión y este contraste extremo. “Sí, ¿persistiréis en la persecución de vuestros hermanos, que se humillan y siguen el orden sagrado de Dios, por el cual han sido traídos a esta iglesia, habiendo sido santificados por el Espíritu Santo, y producen obras que son dignas de arrepentimiento?” Aquí tenemos dos mundos totalmente diferentes, como mencionamos antes. “Sí, y ¿persistiréis en volver vuestras espaldas a los pobres y necesitados, y en retener vuestra sustancia de ellos?” Nuevamente, el tema de la distribución de la riqueza. “Y finalmente, todos vosotros que persistáis en vuestra maldad, os digo que estos son los que serán cortados y echados al fuego si no se arrepienten rápidamente.” No es una situación estable en absoluto.

Versículo 57: “Salid de entre los inicuos y sed separados, y no toquéis lo inmundo.” Quiere mantenerlos separados. Ya no salimos en nuestra sociedad. Solíamos hacerlo. Los Santos se metieron en problemas al hacerlo; ya no lo hacen. “Los nombres de los inicuos no se mezclarán con los nombres de mi pueblo.” Cuando alguien es llamado (como muchos son llamados) a cualquier oficina o llamamiento, es una invitación a cambiar completamente tus caminos. ¿Lo tomamos completamente? Lo hacemos por un tiempo como misioneros. Cambiarán, y luego volverán completamente a lo mismo. Hay un caso interesante sobre eso, pero tenemos que seguir adelante aquí.

Noten que está hablando de ser santificados, ser hagios, ser apartados, ser un pueblo segullah, un pueblo sellado y apartado. Todavía está hablando en términos de los ritos de expiación aquí. “Porque los nombres de los justos serán escritos en el libro de la vida, y a ellos les concederé una herencia a mi diestra.” Parte del rito, por supuesto, como hemos mencionado antes, es que todos están registrados en el libro en ese momento. Y si tu nombre no estaba registrado en un libro, estabas fuera del reino durante tres años. Eso es todo. No tenías derechos en absoluto; eras un proscrito.

Luego los compara con ovejas. ¿Ovejas en el Nuevo Mundo? Bueno, oveja es como seda, si lo buscas en el diccionario. Hay decenas de variedades de ovejas. Algunas no se parecen más a las ovejas que otros [animales]. Las llamas y las vicuñas, o algo así, se clasifican como ovejas. Son animales de pastoreo. Los egipcios tenían una sola palabra para ellos idr: los de cuernos cortos en comparación con los de cuernos largos. Usan una palabra para ovejas, para carneros, para cabras, para todos los animales de cuernos cortos, sean salvajes o no; supongo que un steenbok sería una oveja para ellos. Pero de todos modos, es uno de esos términos genéricos.

Versículo 60: “y os manda que no permitáis que entre entre vosotros ningún lobo rapaz, para que no seáis destruidos.” Notarás el lobo rapaz, que significa adquisitivo, codicioso, depredador, explotador; los lobos rapaces. Hablamos mucho sobre la codicia hoy en las primeras páginas de los periódicos y todo lo demás. El Wall Street Journal, Time y el resto de ellos siempre están hablando sobre la codicia. Bueno, ¿admitirías ser el lobo? “Y ahora yo, Alma, os mando…” Puede mandar a aquellos que pertenecen a la iglesia; a los otros simplemente los invita, como dice aquí. El pueblo del convenio no solo se separa del mundo, sino que está necesariamente obligado. Se les manda aquí. “Hablo a manera de mandamiento a vosotros que pertenecéis a la iglesia; y a aquellos que no pertenecen a la iglesia, hablo a manera de invitación.” Por supuesto, invitamos al mundo a entrar en los convenios que se nos manda obedecer. ¿O seguimos el ejemplo del mundo corporativo?

Ahora llegamos al sexto capítulo, que es un capítulo muy corto y simplemente implementa lo que ha dicho. Así es como procedió a hacerlo, dice. Alma ordenó sacerdotes y ancianos. Se dedicó a establecer la estructura oficial de la iglesia, las ordenanzas, el sacerdocio y los ritos. Las personas que se arrepintieron fueron debidamente bautizadas. Noten que hubo una limpieza de la iglesia, enderezando las cosas. Si las personas querían unirse y se arrepentían, entonces eran bautizadas. Por otro lado, había miembros de la iglesia que habían sido miembros toda su vida. Si no se arrepentían, eran excomulgados. Ven, está enderezando las cosas nuevamente. Alma es tan estricto como siempre.

Versículo 3: “Cualquiera que perteneciera a la iglesia [era cortado y rechazado] que no se arrepintiera de su maldad y se humillara ante Dios; quiero decir aquellos que estaban levantados en el orgullo de sus corazones; los mismos fueron rechazados [no estaban en los registros entonces], y sus nombres fueron borrados, para que sus nombres no fueran contados entre los de los justos.” Así que aceptaron a los que se arrepentían y expulsaron a los que no se arrepentían.

Versículo 4: “Y así comenzaron a establecer el orden de la iglesia en la ciudad de Zarahemla.” De eso se trata. Así es como se establece; se implementa lo que has hecho. Y se siguió la rutina habitual; se siguió la ley del evangelio aquí. Noten, se les manda reunirse con frecuencia y unirse en ayuno y oración “en favor del bienestar de las almas de aquellos que no conocen a Dios.” Así que celebraron sus reuniones y sus ayunos, así como sus ordenanzas. Luego Alma, habiendo establecido las cosas aquí, partió hacia la ciudad de Gedeón. Llegó a una ciudad vecina, y iba a hacer lo mismo allí. Comenzó diciendo a la gente de Gedeón en el capítulo 7: “Intento dirigirme a vosotros en mi idioma,” lo cual muestra que estaban hablando dialectos. Los dialectos surgen fácilmente, como dije. Estas personas habían estado aquí cientos de años, y estos asentamientos se habían vuelto bastante distantes. Puedes estar seguro de que tenían dialectos diferentes. Como dije, hay las doce aldeas hopi. Están cerca una de la otra, dentro de un rango de sesenta millas, y cada una tiene un dialecto separado. Puedes reconocer a un aldeano de otro. Así es como sucede. Así que dijo, “Intento dirigirme a vosotros en mi idioma.”

Dijo, he renunciado a todo lo demás. Renuncié al asiento de juez; se le ha dado a otro. Lo hice deliberadamente para poder venir y predicarles. Había dejado Zarahemla, y estaba complacido con ellos. Versículo 5: “Mi alegría viene por ellos después de pasar por mucha aflicción y dolor.” [Ahora confío en que les va bien a ustedes, dice.] Pero he aquí, confío en que no estáis en un estado de tanta incredulidad como vuestros hermanos.” Con Zarahemla tuvo que trabajar. ¿Qué quiso decir? ¿Cuál es el estado de incredulidad? ¿Cuál es la maldad? Volviendo a la misma canción de siempre: “Confío en que no habéis puesto vuestros corazones en las riquezas y las cosas vanas del mundo; sí, confío en que no adoráis ídolos, sino que adoráis al Dios verdadero y viviente, y que esperáis la remisión de vuestros pecados, con una fe eterna, que está por venir.” Verán, si están salvados, están esperando la remisión de sus pecados; aún no la tienen. Tienen remisión, pero mientras estemos aquí en este mundo, estamos bajo los problemas de nuestro polvo orgulloso y enojado. No fallarán aquí. La incredulidad necesariamente lleva a poner el corazón en las riquezas, ya que debes confiar en algo. La doctrina de Satanás, por supuesto, es que confíes en ellas. Y estas cosas van juntas. Pero no estamos libres aquí. Nuestros pecados aún no han sido remitidos, como aprendemos en 2 Nefi 2:21, donde nos dice que hasta el último día de nuestra vida debemos arrepentirnos. Y por eso se ha extendido nuestra vida, para dar una mejor oportunidad.

Luego dice algo interesante. Habla sobre el Señor que vendrá. Versículo 9: “Preparad el camino del Señor… Él nacerá de María, en Jerusalén, que es la tierra de nuestros antepasados, siendo ella una virgen, un recipiente precioso y escogido.” Habla familiarmente, como si ya supieran sobre María. Bueno, imraa significa un ser humano, pero también significa una mujer. Las María y Marta habituales son la misma palabra, y ambas significan mujer. Nacerá de una mujer, de María o de Miriam, en Jerusalén. Todos son solo palabras para mujer. Ella es una mujer especial, y su nombre es María. Les da el beneficio de eso; pero no deberían sorprenderse por eso.

Y de nuevo, “nacido de María, en Jerusalén” ha sido una gran acusación contra el Libro de Mormón. Nació en Belén. ¿No nació en Jerusalén, verdad? Solo lean las Cartas de Amarna del período mucho anterior a este. Las Cartas de Amarna fueron escritas por príncipes y por un rey de Jerusalén a Faraón [Amenhotep III] pidiendo ayuda militar. Constantemente se refieren en las Cartas de Amarna a “la tierra de Jerusalén” y a varias ciudades: a Belén, que está en la tierra de Jerusalén. Siempre se refieren a “la tierra de Jerusalén” como ciudad/estado. Ática es la tierra de Atenas. Cuando dices Atenas, ¿qué quieres decir? Te refieres a Ática, Atenas y toda la tierra a su alrededor. Cuando dices Esparta, te refieres a lo mismo. Pero es interesante que esto se menciona específicamente en las Cartas de Amarna; ese era el uso, hablar sobre “la tierra de Jerusalén” y luego las diferentes ciudades en ella. No dice que nacerá en la ciudad de Jerusalén, [sino] en “la tierra de Jerusalén”, que es donde nació. Belén está a solo seis millas al sur de Jerusalén. Es un suburbio, y siempre ha sido parte de la tierra de Jerusalén, y también la sede de David.

“ella siendo una virgen, un recipiente precioso y escogido, que será ensombrecida y concebirá por el poder del Espíritu Santo, y dará a luz un hijo, sí, el Hijo de Dios… Él tomará sobre sí los dolores y las enfermedades de su pueblo [ahora, esta es la misión, el sacrificio expiatorio]. Y tomará sobre sí la muerte, para que pueda desatar las bandas de la muerte que atan a su pueblo; y tomará sobre sí sus debilidades, para que sus entrañas se llenen de misericordia, según la carne, para que sepa según la carne cómo socorrer a su pueblo según sus debilidades.” Esta es su tarea. Pero noten aquí. Podría haber hecho todo esto espiritualmente. Después de todo, cualquiera con una imaginación lo suficientemente vívida podría tener una experiencia así y llevarla a cabo, pero aquí debe descender por debajo de todas las cosas. Sabría exactamente cómo sería, pero eso no era todo. Debe realizar la cosa él mismo, dice; debe pasar por eso él mismo. “Y tomará sobre sí la muerte, para que pueda desatar las bandas de la muerte que atan a su pueblo.”

No dudo que tenga otras personas en todas partes, pero cuando viene a tratar con nosotros, toma carne humana y pasa por lo que nosotros pasamos. Descendió por debajo de todas las cosas. Tomó carne para redimirnos, y así ir hasta el final y sufrir más de lo que nosotros podemos, en la carne. Este es el punto, para que nunca podamos decir: “Oh sí, eras un dios, era divino contigo. Podrías simplemente imaginarlo, y se hacía, o podrías simplemente chasquear los dedos.” No, no es así; no funciona así. Dice “para que sepa según la carne cómo socorrer a su pueblo según sus debilidades,” para que pueda llenarse de misericordia, ir hasta el final y saber exactamente por lo que hemos pasado.

Versículo 13: “Ahora el Espíritu sabe todas las cosas [no necesitaba hacer eso, podría haberlo manejado fácilmente]; sin embargo, el Hijo de Dios sufre según la carne para que pueda tomar sobre sí los pecados del pueblo, para que pueda borrar sus transgresiones según el poder de su liberación; y ahora, he aquí, este es el testimonio que está en mí.” Este es el poder. [Jesucristo] tiene el poder dado para hacer esto. Debido al pecado, todo sale mal. No se puede corregir, porque seguimos pecando. No puedes levantarte tirándote de tus propios cordones de los zapatos. Estamos en arenas movedizas, en cuanto a eso. Cuanto más luchas, más te hundes. No vas a salir de eso.

No vamos a poder redimirnos ni nada de eso. Es nuestra naturaleza ser carnales, sensuales y diabólicos, y eso es todo. Este es [el] testimonio [de Alma].

Ahora, lo que hacemos es arrepentirnos. Recuerden cómo describe Benjamín el arrepentimiento: saber quién eres y qué eres. Cuando sabes qué eres, te arrepentirás, y te volverás lo suficientemente humilde. Y [Alma] va a hablar sobre lo que va junto con esto, las dos reglas. Las dos reglas de Delfos eran “conócete a ti mismo” y “nada a la derecha, nada a la izquierda, nada en exceso.” Estas dos reglas se dan aquí en estos versículos. Versículos 14: “Arrepentíos y naced de nuevo… Sed bautizados para arrepentimiento, para que seáis lavados de vuestros pecados, para que tengáis fe en el Cordero de Dios, que quita los pecados del mundo [pasando por la misma imaginería nuevamente]… Deja de lado todo pecado… y muestra a tu Dios que estás dispuesto a arrepentirte de tus pecados y a entrar en un convenio con él para guardar sus mandamientos, y testificarlo ante él hoy mismo al entrar en las aguas del bautismo.” Por supuesto, ellos testifican después de eso que están dispuestos a tomar sobre sí el nombre del Hijo y guardar sus mandamientos que él les ha dado. Cuando participamos del sacramento, testificamos lo mismo que testificamos en el bautismo. Cuando participamos de él, lo renovamos cada vez. Entras en un convenio y lo testificas y lo refrescas de esa manera. Usan casi las mismas palabras aquí: Testificándolo por agua, pero aquí es por el sacramento.

Versículo 16: “Y cualquiera que haga esto, y guarde los mandamientos de Dios… tendrá vida eterna.” Este es el objetivo; esto es lo que buscamos. Vamos a descubrir que todos tendrán vida eterna de todos modos. No pueden morir, aprendemos más adelante. La resurrección ha sido cuidada. Entonces, ¿por qué nos preocupamos tanto por la vida eterna? Bueno, si va a ser eterna, la calidad será bastante importante, ¿verdad? Dónde la pases y cómo la pases tiene mucho que ver si va a ser eterna. El [punto] no es seguir viviendo en el alcantarillado. Esa es la diferencia. “Y ahora, mis amados hermanos, ¿creen estas cosas?” les pregunta. Como dije antes, nunca ha habido disputa sobre la expiación. Es algo muy interesante; incluso entre los doctores de la iglesia, esa palabra nunca ha sido debatida. “¿Creen estas cosas?” Las conozco por el espíritu, dice.

Versículo 19: “Percibo que estáis en el camino que lleva al reino de Dios.” Ahora viene la otra. Arrepentirse es conocerte a ti mismo, y la otra es “nada en exceso.” Como dije antes, esta no es solo una regla para el comportamiento: no comer demasiado o beber demasiado o comer muy poco o beber muy poco. Eso es cierto, pero todo el universo se sostiene por una afinación fina. Los físicos la llaman las Quince Constantes que deben estar finamente ajustadas. La tierra no puede estar demasiado lejos del sol ni demasiado cerca de él. Solo un poco demasiado, y no habría vida. El sol no puede ser demasiado caliente ni demasiado frío. Está causando estragos ahora, ¿verdad? Tenemos registros de manchas solares durante más de cuatrocientos años. Cada mancha solar ha sido registrada. Cuando era niño, las hacía todo el tiempo; es muy fácil de hacer. Las protuberancias más grandes y las manchas solares más grandes jamás vistas están ocurriendo en el sol ahora, así que mantén tu sombrero puesto cuando salgas. No me gustaría estar en el transbordador ahora mismo. Están ocurriendo cosas extrañas ahora. En cuatrocientos años nunca sucedió así antes. Siempre viene y va, y lo que es más, están apareciendo más manchas solares al mismo tiempo que nunca antes. Está empezando a parecer serio. Tal vez el sol se apagará. Bueno, tendremos un comité del Congreso y consultaremos sobre qué hacer con el sol entonces, ¿verdad? Eso resolverá eso [risas].

Pero noten, aquí está esta afinación fina. No puede ser demasiado seco, no puede ser demasiado húmedo. Partes de la tierra se están volviendo desierto ahora, y es una catástrofe total. Otras partes se están volviendo demasiado húmedas. Sabemos que es una catástrofe total. Como dice aquí (versículo 20): “No puede caminar por senderos torcidos; ni varía de lo que ha dicho; ni tiene sombra de cambio de lo correcto a lo incorrecto; por lo tanto, su curso es un círculo eterno.” Es un círculo, y es eterno. ¿Cómo puede ser recto y circular al mismo tiempo? Bueno, recto significa estricto, mantenerse en el curso. “El tiempo vendrá, sí, y será en el último día, que el que esté sucio permanecerá en su suciedad.” Debemos romper con eso mientras podamos, dice, porque esta oferta no es permanente. Esto cambiará. Alcanzas un punto de no retorno. Entonces tienes que conformarte con algo más bajo, y tendrás otro tipo de vida después de eso. [Las personas] alcanzan esos puntos de crisis. O van a la derecha o a la izquierda, van demasiado lejos a un lado o al otro. Se quedarán allí y se quedarán allí.

Ahora lo principal: “He dicho estas cosas para despertaros a un sentido de vuestro deber para con Dios, para que caminéis sin culpa ante él, para que sigáis el orden sagrado de Dios, según el cual habéis sido recibidos.” Nuevamente, habla sobre los pecados específicos y los nombra: acabamos de tenerlos. Pero, ¿qué pasa con estas virtudes? ¿En qué consiste hacer lo correcto? Ahora hace una lista específica de ellas. Esto es útil aquí en el versículo 23: “Y ahora quiero que seáis humildes, y sumisos y gentiles.” Noten que estos no son actos; son estados mentales. Lo que hace que un pecado sea pecado no es lo que haces; lo que puede ser una virtud un día puede ser un vicio al siguiente. Siempre me ha divertido en Alemania antes de la guerra, todos irían a los baños de la ciudad para bañarse. Había esta gran casa de baños. El jueves era el día de la familia, y todos irían. Bueno, no tenían trajes de baño ni nada; solo entraban. En el día de la familia, todos entraban juntos, y eso estaba bien. Pero cualquier otro día, si alguien del sexo opuesto entraba, lo arrestarían y lo llevarían a la cárcel. Eso era terrible, era obsceno. Pero siempre y cuando fuera sábado, estaba bien. Era lo mismo. El sábado es el antiguo laugardagr escandinavo. Ese es el día de lavar, el día de bañarse. Así que todas las familias se bañaban juntas el jueves. Pero si te adentrabas en la piscina equivocada un viernes o un lunes, habría un grito y un alboroto, y te sacarían de allí. ¡Una cosa asombrosa! Es solo costumbre lo que hace esto aquí. Pero ven, es el estado mental lo que hace la diferencia, y lo es aquí también. Bueno, por supuesto, “para los puros todas las cosas son puras,” como dice Pablo. Pero ser humilde es una condición, un estado mental. Ser “sumiso y gentil; fácil de ser tratado; lleno de paciencia y longanimidad; ser templado en todas las cosas; ser diligente en guardar los mandamientos de Dios en todo momento.” Aquí hay algo que debes hacer: se te manda pedir. Dudamos en pedir porque somos demasiado orgullosos para pedir, como si fueras un mendigo. Se necesita más orgullo para dar que para pedir. Se necesita más humildad para pedir. Un hombre orgulloso puede dar, pero un hombre orgulloso no pedirá. Hace la diferencia, “pidiendo cualquier cosa que necesitéis, tanto espiritual como temporal.”

Tienes perfecto derecho a pedirle al Señor lo que necesitas. No dudes. Por supuesto, al hacerlo, te examinas a ti mismo y te preguntas si lo mereces o no. Te hará sentir culpable. Te llevará a estas otras cosas, “siempre dando gracias a Dios por cualquier cosa que recibáis. Y asegúrate de tener fe, esperanza y caridad.” Ahora, estos son los tres grandes. Dices, “Bueno, aquí está el Libro de Mormón siendo sacado del Nuevo Testamento.” No, no lo es. Richard Reitzenstein demostró hace muchos años que la fórmula-fe, esperanza y caridad-es una fórmula muy antigua. Se encuentra en los escritos hebreos, y es una fórmula que se encuentra en los escritos herméticos bastante comúnmente. No está limitada al Nuevo Testamento en absoluto. Es muy antigua. Estos tres van juntos.

Pero noten lo que noto aquí. No veo en esta lista de virtudes trabajo duro, ahorro, impulso, ambición, prudencia, inteligencia. No veo nada de eso en absoluto. Encuentras lo mismo en Isaías. Los pecados que Isaías enumera son las cosas que consideramos virtudes. Las virtudes que Isaías enumera son las cosas que consideramos debilidades y cobardía. Solo un cobarde tendría todas estas cosas: ser diligente y pedir lo que quieras. Noten que siempre eres sumiso. Haces la petición de lo que necesitas, siempre dando gracias, templado. Suena como Uriah Heap, excepto que él era un hipócrita. Diligente en guardar los mandamientos, paciente, gentil, etc. y así sucesivamente. Esto es lo que Dios nos exige, y lo que no damos. Este es un tema muy importante en el Libro de Mormón, siempre teniendo fe y caridad. Versículo 27: “Y ahora, que la paz de Dios repose sobre vosotros, y sobre vuestras casas y tierras [todas las cosas son bendecidas donde se asientan los Santos, como dice Brigham Young] y sobre vuestros rebaños y manadas, y sobre todo lo que poseéis, vuestras mujeres y vuestros hijos.”

Así que los dejó y se fue a otra ciudad. Luego se fue a la ciudad de Melek. Esta fue una misión muy interesante que tuvo en la ciudad de Melek. Lo que estaba haciendo era ir estableciendo el orden de la iglesia en todos estos lugares. Dice aquí [Alma 8:1]: “habiendo establecido el orden de la iglesia, según lo había hecho antes en la tierra de Zarahemla.” Zarahemla es el modelo; es como la estaca central de Sión. Están todos organizados según el patrón de Zarahemla aquí. “Sí, regresó a su propia casa en Zarahemla para descansar de los trabajos que había realizado.”

Luego decidió ir a la tierra de Melek y examinarla, al oeste del río Sidón. Se nos dice que Sidón limitaba con Zarahemla al este, así que fue al oeste a Melek, en el lado del Pacífico, que también era el lado del desierto. Siempre ha sido el lado del desierto, y todavía lo es. Las partes más salvajes de América Central están en el lado occidental. El lado oriental es donde están todas las poblaciones, las ciudades, y esto es así en el Libro de Mormón. Versículo 4: “Y comenzó a enseñar a la gente en la tierra de Melek según el orden sagrado de Dios, por el cual había sido llamado.” [Vean, al oeste del Sidón estaba por el lado del desierto.] “Y fueron bautizados por toda la tierra; así que cuando terminó su trabajo en Melek partió de allí, y viajó tres días al norte de la tierra de Melek.” Se estaba acercando ahora, y llegó a Ammoníah, que era la ciudad más perversa, quizás, en el Libro de Mormón. Eran realmente perversos. Eran peores que los zoramitas, y las personas en Ammoníah fueron las que fueron completamente destruidas cuando llegó la destrucción. Eran nefitas, noten. Versículo 7: “Ahora era costumbre de la gente de Nefi llamar a sus tierras, y sus ciudades, y sus aldeas, sí, incluso a todas sus pequeñas aldeas, según el nombre de quien las poseyó primero,” tal como tenemos Brigham City, y tenemos Provo aquí. Etienne Provost, un trampero francés, fue el primer hombre en establecerse y acampar aquí. El hombre que lo establece usualmente le da su nombre.

La gente de Ammoníah era dura. Versículo 9: “Ahora Satanás había tomado gran control sobre los corazones de la gente de la ciudad de Ammoníah; por lo tanto, no prestarían atención a las palabras de Alma. Sin embargo, Alma trabajó mucho en el espíritu, luchando con Dios en poderosa oración.” ¿Luchando con Dios? ¿Dios resiste? ¿Tienes que resistirlo? No, tienes que ponerte en posición, en el estado de ánimo correcto. Recuerden, en nuestros paseos diarios por la vida mientras hacemos cosas, estamos muy alejados. Si estás jugando a los bolos, o si estás en negocios, o si estás corriendo o algo así, haciendo las cosas que normalmente haces, y luego tienes que pasar de eso a la oración, es una gran transición. Es como un choque cultural si realmente lo tomas en serio. Tienes que prepararte, como un luchador que tiene que buscar una posición o agarrarse, como Jacob hizo cuando luchó con el Señor. Tienes que evaluarte, tomar tu postura, rodear el ring y tratar de averiguar cómo vas a lidiar con este problema en particular. No estás luchando con el Señor; estás luchando contigo mismo. Recuerden, Enós es el que realmente luchó. Y nos dijo lo que quería decir cuando estaba luchando; estaba luchando consigo mismo, sus propias insuficiencias. Cómo puedo enfrentar al Señor en mi condición, es lo que dice. Así que esto es lo que estamos haciendo.

En el mundo operamos en un nivel diferente. Se necesita un gran esfuerzo mental para confrontar al Señor con toda seriedad. Lo hacemos en varios niveles superficiales, por rutina. Tenemos una oración aquí porque sentimos que debemos hacerlo. Si vamos a tomarlo realmente en serio, tenemos que trabajar más en ello. No podríamos hacerlo en frío. En otras palabras, no puedes simplemente entrar en frío. Es como un artista, un chelista o un pianista. Tengo muchos parientes que son músicos. No puedes simplemente entrar en frío y comenzar un concierto. O incluso un tenor tiene que calentarse y preparar su voz. Pero tienes que calentar tus dedos. Mi esposa toca el chelo, y tiene que calentar sus dedos y su instrumento. Le toma al menos 15 minutos calentarse. Entonces estás en el estado de ánimo. Entonces tienes que tomarte un tiempo para pensarlo, y luego estás listo para comenzar. Ahora, si se trata de enfrentar al Señor, tienes que ser muy serio sobre ese tipo de cosas. Es un ejercicio preliminar bastante grande, que se llama luchar con el Señor, luchar contigo mismo. Él está a una distancia. Eso es lo que tuvo que pasar aquí, y muy pocas personas están dispuestas a hacerlo, pero realmente vale la pena porque sabes exactamente lo que quieres y dónde te encuentras.

Pero no querían tener nada que ver con él. Estos no eran disidentes. Vean, estos eran personas que habían estado viviendo solos por sí mismos. Se separaron en un momento temprano, y habían tenido su propia religión durante mucho tiempo. Y lo que es más, hay evidencia más adelante en el Libro de Mormón de que habían estado adoptando algunas de las religiones anteriores que también habían estado allí. Sabemos quién eres, está bien, dijeron, sin importar cuánto trabajó. Versículo 11: “Sin embargo, endurecieron sus corazones diciéndole: He aquí, sabemos que tú eres Alma; y sabemos que tú eres sumo sacerdote sobre la iglesia que has establecido en muchas partes de la tierra, según tu tradición; y no somos de tu iglesia, y no creemos en tales tradiciones necias.” No gracias. Fueron muy francos al respecto, muy groseros, de hecho. [Hay un dicho que] nada es peor que un gran hombre que ha perdido su influencia, y aquí la había perdido. “No tienes poder sobre nosotros.” Se inclinaron hacia atrás para insultarlo porque sabían que no tenía poder, por la constitución que él mismo acordó. No podía usar ninguna coerción religiosa sobre nadie. “Y has entregado el asiento de juez a Nefíhah [y ya no eres el jefe del ejército]; por lo tanto, no eres el juez principal sobre nosotros.” Había perdido su influencia, ¿y qué hicieron? Lo vilipendiaron. Lo escupieron “y hicieron que lo echaran de su ciudad.” Lo echaron. Lo mismo le pasó a Sansón, al rey Alfredo, a Ammón y al rey Lear después de que perdieron su cargo. No es que simplemente se retiraran a nada, fueron maltratados después de eso. [Es como si] la gente hubiera estado esperando el momento en que te jubilarías, y pudieran decirte lo que piensan de ti. Y esto es lo que sucedió aquí. Tuvo un tiempo difícil.

Estaba muy molesto. Su misión había fracasado. Tenía una “terrible angustia de alma,” como dijo en el versículo 14. Estaba abatido, y su corazón estaba roto. Iba a irse y volver a casa. Fue encontrado por un ángel, y el ángel le dijo que se regocijara. Soy el que te entregó tu primer mensaje, dijo. Versículo 15: “He aquí, soy el que te lo entregó.” Eso es algo interesante. Recuerden en Lucas cuando se estaba estableciendo el evangelio por primera vez, un ángel fue alrededor y visitó a varias personas, a saber, María, los pastores en el campo, y Zacarías en el templo. Era el mismo ángel; era Gabriel. Dijo, soy Gabriel. Esa era su misión particular, introducir esa dispensación de tiempo. Obviamente, este ángel fue asignado a Alma. Dijo, soy el mismo que te visitó antes, y ahora aquí estoy de nuevo. Estaba cuidando de Alma. Solíamos decir mucho más sobre los ángeles guardianes en la Iglesia. Solíamos enseñar mucho más esa doctrina, siempre se la enseñábamos a nuestros hijos. Ya no lo hacemos. No sé por qué no, porque es algo muy real, la presencia de otro mundo.

Bueno, de todos modos, el ángel dijo, soy el mismo que te visitó cuando eras un niño travieso, ¿me recuerdas? Ahora te visito en otra condición. Ahora eres tú quien está arrepentido. Es su maldad la que te aflige ahora. Traje el primer mensaje: “Soy el que te lo entregó.” Ahora simplemente regresa a la ciudad de Ammoníah, vuelve directamente, y diles que se arrepentirán o el Señor los destruirá, y ciertamente los destruyó. Entró en la ciudad, y tenía hambre, “y dijo a un hombre: ¿Darías a un humilde siervo de Dios algo de comer? Y el hombre le dijo: Yo soy nefiíta.” Noten que eran razas mixtas, sangre mixta por todas partes. Se presentó como un nefiíta. Aunque Ammoníah era una ciudad nefiíta, no todos eran nefiítas en ella.

Pregunta: Solo tengo curiosidad. Noto que tu pronunciación de la ciudad es diferente a la de la guía de pronunciación. Tenía curiosidad por saber quién hizo la guía de pronunciación y si afirma ser correcta.

Respuesta: Bueno, hay reglas muy estrictas para acentuar en hebreo y árabe; son inquebrantables. Pero este es un nombre egipcio. La parte “-iah” significa “Amón es Dios.” Por supuesto, Amón era el dios del imperio. Amón es, con mucho, el nombre más común en el Libro de Mormón. También significa “el gran dios, el dios más alto, el dios oculto,” y todo tipo de cosas. El nombre se usaba libremente en ambos lados de la línea. En clásicas, la regla inquebrantable es esta: Siempre convierte una palabra griega en latín, y luego pronuncia la palabra latina como si fuera inglés. Pero esto no necesariamente se aplica a palabras semíticas, necesariamente, a palabras bíblicas. Esto sería en realidad Am-mo-NI-hah, si lo estuviéramos diciendo en inglés. No podría ser AM-mo-ni-hah en ningún idioma semítico porque el acento regresivo no llega tan lejos, si tienes una consonante doble en el medio. Así que Am-MO-ni-hah es lo suficientemente bueno.

Pregunta: ¿Quién hizo la guía de pronunciación?

Respuesta: Oh, un comité en Salt Lake. Se sientan y hacen estas cosas. He estado en él, y fue divertido. Fueron un millón de risas la forma en que dan vueltas y vueltas sobre las cosas. Es una cuestión de gusto. Pero recuerden, hablamos inglés, y es perfectamente correcto. Ahora, por ejemplo, cuando el profesor Gregroire, quien fue una de las principales autoridades en historia bizantina, dio una clase en historia bizantina en Berkeley, siempre decía CON-stan-tine. Nunca decía CON-stan-teen. Eso se consideraría de mal gusto. Nosotros decimos CON-stan-teen, y él decía CON-stan-tine. Porque es ine, lo pronunciamos como inglés, pero los ingleses lo llaman CON-stan-tine. Pronuncian las cosas de manera bastante diferente allí. Puedes llamarlo Phelo o Philo si quieres. Nosotros lo llamamos Philo. Pero no decimos Phi-la-delphia. Hay personas que sí lo hacen, sin embargo. Así que, elige tu preferencia. Nefi sería Neb-hi. Notarás que no lo escribo con una f, porque no es una f. Son dos letras separadas b h. Significa “mi Señor es Dios” en realidad, y era un nombre egipcio en la época de Lehi. Recuerden que los nefitas a veces tenían nombres egipcios.

Ahora, por ejemplo, los alemanes pronuncian los nombres del Libro de Mormón de manera muy diferente a nosotros. A-BIN-a-di, que es perfectamente natural para nosotros, es Ah-bee-NAD-ee para ellos. No reconocerían A-BIN-a-di en un millón de años. Es Ah-bee-NAD-ee, lo cual probablemente esté más cerca del original. Significa “mi padre ha prometido.” Abi es “mi padre.”

Seguiremos adelante aquí ahora, porque va a suceder algo interesante aquí en la ciudad. Este hombre dijo (versículo 20): “Yo soy un nefiíta [lo que señala alguna diferencia racial aquí], y sé que tú eres un santo profeta de Dios,” porque ha sido visitado por el mismo ángel. Gabriel se movió en el Nuevo Testamento. Este ángel se mueve aquí. Lamento que no haya dejado su nombre. “Por lo tanto, ve conmigo a mi casa y te impartiré de mi comida.” [Alma] le contó sobre la situación, así que lo llevó a su casa. El hombre se llamaba Amulek, y noten que están muy interesados en las palabras mulek. Su significado básico es propiedad o posesión. Pero también significa “rey, gobernar, tener poder” – todo tipo de cosas. Como la palabra Alexander y la palabra Michael, significa que tienes poder y fuerza.

Versículo 21: “Y sacó pan y carne y puso ante [Alma]… [Y Alma se presentó y dijo] Soy Alma, y soy el sumo sacerdote sobre la iglesia de Dios en toda la tierra. Y he aquí, he sido llamado a predicar la palabra de Dios entre este pueblo.” Y Alma permaneció muchos días en la casa de Amulek. Y la gente empeoró y no se arrepintió. [Alma y Amulek] fueron por todas partes predicando, pero no sirvió de nada. En el versículo 30 Alma y Amulek unieron fuerzas: “Y Alma salió, y también Amulek, entre la gente para declararles las palabras de Dios, y fueron llenos del Espíritu Santo. Y les fue dado poder, tanto que no podían ser confinados en mazmorras; ni era posible que algún hombre los matara; sin embargo, no ejercieron su poder hasta que fueron atados con cadenas y arrojados a la prisión.”

Se salieron con la suya en todo tipo de cosas, pero saben que esto a menudo sucede. A algunas personas les pasa una cosa tras otra, y pasan por todo tipo de cosas, como Alejandro Magno, por ejemplo. Es increíble por lo que pasó hasta que se emborrachó en una fiesta y tuvo fiebre. Fue envenenado, dicen algunos. O el príncipe Eugenio. Algunas personas han pasado por innumerables batallas sin cicatrices. A Porter Rockwell le dispararon más que a un pato en una galería de tiro, pero nunca fue herido. Hay tales personas, saben, que simplemente atraviesan. Y esto sucede a menudo. Hay algunas historias sobre eso, pero hay ángeles guardianes. Existe tal cosa; estamos siendo observados. Pero pudieron meterlos en la cárcel de todos modos. “Fueron atados con cadenas y arrojados a la prisión. Ahora, esto se hizo para que el Señor pudiera mostrar su poder en ellos.” Dejó que eso sucediera.

Ahora, Alma predicó a la gente de Ammoníah. Esto es lo que les predicó. Pero la historia de Amulek está en el capítulo después de eso; esa es la historia divertida. Pero primero Alma estaba predicando a ellos. ¿Era lo mismo de siempre aquí? Bueno, fue diferente porque se defendieron. Discutieron de vuelta. Gritaron de un lado a otro. Se convirtió en una pelea de gritos. Alma comenzó a predicar a la gente, y dijo (capítulo 9, versículo 1): “Al comenzar a predicarles, comenzaron a contender conmigo, diciendo…” Este es el propio registro de Alma aquí; antes era el registro de Moroni. Dijeron, no tienes influencia; no sabemos quién eres.

Versículo 2: “¿Quién eres tú? ¿Supones que creeremos el testimonio de un solo hombre, aunque nos predique que la tierra pasará?” No podemos tomar tu palabra solo. Ahora, aquí hay un toque agradable de ironía trágica. Esto es directamente de Edipo, ¿no es así, cuando dijeron: “¿Supones que creeremos el testimonio de un solo hombre, aunque nos predique que la tierra pasará? Ahora no entendían las palabras que hablaban; porque no sabían que la tierra pasaría.” Estaban pronunciando la condena sobre ellos mismos. Su ciudad fue enterrada completamente. Como dice Edipo, incluso si es alguien en mi propia casa, me vengaré de él, incluso si es el que mató al viejo rey. Por supuesto, era él mismo a quien estaba pronunciando la maldición. Y es lo mismo aquí sobre aceptar el testimonio de un solo hombre que la tierra pasará. Al comienzo de Edipo, el profeta entra y profetiza lo que va a suceder. Luego él [Edipo] dice: Es solo un hombre; ¿qué vale su profecía? Ven, tiene que haber toda una escuela de profetas.

Acaban de descubrir un nuevo papiro egipcio en el que estoy trabajando, una cosa fascinante en la que la escuela de los profetas de Faraón hacen exactamente lo mismo que hicieron con Moisés. Había un profeta real con grandes dones, y hicieron todo lo posible para mantenerlo oculto. Hicieron todo lo posible para evitar que tuviera acceso a Faraón porque los mostraría a todos. [Cuenta] cómo conspiraron contra él. Lo principal era mantenerlo de bajo perfil, mantenerlo en el campo (era muy joven), no dejar que nadie lo notara. Hicieron todo lo posible para amortiguar su carrera, en otras palabras. Es una historia divertida sobre cómo todos los grandes profetas en la corte, los magos, hacían ese tipo de cosas.

Versículo 5: “Ahora no sabían que Dios podía hacer obras tan maravillosas.” Para ellos, las cosas simplemente suceden. Si ocurren maravillas, ¿son sin causa? Cuando algo notable sucede, y todo es notable que sucede, debemos consultar las causas y lo que hay detrás de ello. Nos ayuda. ¿No deberíamos hacer preguntas? ¿No deberíamos tener curiosidad sobre las cosas? Las personas no lo hacen hoy. Esa es la cosa, no tenemos curiosidad en esta escuela. Estaba hablando con un miembro de la facultad ayer, y dijo que los estudiantes a los que está enseñando no tienen en lo más mínimo curiosidad por el tema que se supone están aprendiendo. Solían ser tan apasionados por el tema que no hacían nada más. Dejarían de comer y dormir; vivirían con una moneda al día. Estaban tan apasionadamente involucrados en el tema. Hoy en día, es una carrera, algo por lo que se pasa.

Versículo 6: “Y dijeron: ¿Quién es Dios, que no envía más autoridad que un solo hombre entre este pueblo, para declararles la verdad de cosas tan grandes y maravillosas?” El disidente solitario es el tema principal en el Libro de Mormón, ya sea Lehi, Nefi, Alma, Ammón o Enós, o quien sea. Lo que quieren es gran autoridad, como si la verdad no pudiera sostenerse por sí sola. Dice: “¿Habéis olvidado la tradición de vuestros padres? ¿No recordáis que nuestro padre, Lehi, fue sacado de Jerusalén por la mano de Dios?” Si quieres saber sobre un solo hombre, [recuerda] lo que hizo. Esto es en respuesta a esa pregunta: ¿Por qué deberíamos creer en un solo hombre? Bueno, les da el caso de Lehi. Versículo 12: “Él [Dios] os ha mandado arrepentiros, o os destruirá completamente de la faz de la tierra.” Ahora, esto iba a ser un caso de prueba y un modelo, esta ciudad aquí. Y aquí está la regla que se da nuevamente. “En la medida en que guardéis mis mandamientos, prosperaréis en la tierra… En la medida en que no guardéis mis mandamientos, seréis cortados de la presencia del Señor.” Ahora, todas las promesas se dan con la maldición en el Libro de Mormón, como en los Rollos del Mar Muerto. Está la berakah, la bendición, pero nunca sin la qelalah. La qelalah es la maldición; la berakah es la bendición. Los dos encajan juntos, y lo hacen en todo el Libro de Mormón. Es la condición. No entras en un contrato muy rentable sin una cláusula de penalización. Si incumples el contrato y rompes las reglas, ¿entonces quedas liberado porque rompiste el contrato? Oh, no, tienes que pagar una penalización por eso. Vas a la cárcel por eso o algo más [sucede].

Versículo 14: “En la medida en que los lamanitas no han guardado los mandamientos de Dios, han sido cortados de la presencia del Señor.” Luego habla de los lamanitas aquí. Dice, todavía hay una oportunidad para ustedes. Si hay una oportunidad para los lamanitas, habrá una para ustedes también. “Porque hay muchas promesas que se extienden a los lamanitas; porque es por las tradiciones de sus padres que permanecen en su estado de ignorancia; por lo tanto, el Señor será misericordioso con ellos y prolongará su existencia en la tierra [no son lo mismo]. Y en algún momento serán llevados a creer en su palabra… y muchos de ellos serán salvados.” Esta es la profecía para los lamanitas, porque sus padres tienen más culpa que nada. Pero, no con ustedes, dice en el versículo 18: “No se prolongarán vuestros días en la tierra, porque los lamanitas serán enviados sobre vosotros [va a cambiar las cosas; estos son supuestamente los nefitas buenos a los que estaba hablando]; y si no os arrepentís, vendrán en un momento en que no sabréis, y seréis visitados con destrucción total [porque han tenido el mayor privilegio]… Él preferiría que los lamanitas destruyeran a todo su pueblo que se llama el pueblo de Nefi [recuerden, esto es solo una designación], si fuera posible que cayeran en pecados y transgresiones, después de haber tenido tanta luz y tanto conocimiento.” Preferiría que los lamanitas los destruyeran completamente si no se mantienen fieles y leales. Deberíamos envidiar a los rusos [a la luz de lo que] él dice. “Sí, después de haber sido un pueblo tan favorecido del Señor; sí, después de haber sido favorecido sobre todas las demás naciones, linajes, lenguas o pueblos; después de haber tenido todas las cosas conocidas para ellos…” Si eso sucede, están mucho peor que cualquier otra persona.

Versículo 21: “Habiendo sido visitado por el Espíritu de Dios; habiendo conversado con ángeles, y habiendo sido hablado por la voz del Señor; y teniendo el espíritu de profecía, y el espíritu de revelación, y también muchos dones, el don de hablar en lenguas, y el don de predicar, y el don del Espíritu Santo, y el don de traducción.” [Alma sigue repitiendo después. Noten lo poderoso orador que es Alma.] Sí, y después de haber sido liberados por Dios de la tierra de Jerusalén [allí está de nuevo, la tierra de Jerusalén, no la ciudad de Jerusalén; recuerden, su casa de campo, la tierra de su herencia, también estaba en la tierra de Jerusalén], por la mano del Señor; habiendo sido salvados de la hambruna, y de enfermedades, y de todo tipo de enfermedades de todo tipo [todas las cosas por las que han pasado]… Y ahora, he aquí os digo, que si este pueblo, que ha recibido tantas bendiciones de la mano del Señor, transgrede contrariamente a la luz y el conocimiento que tienen, os digo que si este es el caso, que si caen en transgresión, será mucho más tolerable para los lamanitas que para ellos.” El Libro de Mormón insiste tanto en esto; debe tener algo para nosotros. Debe estar diciéndonos algo. No puedo apartarme de eso.

Versículo 24: “Porque he aquí, las promesas del Señor se extienden a los lamanitas, pero no a vosotros si transgredís [notar que se extienden a los lamanitas incondicionalmente, pero no se extienden a vosotros si transgredís]; porque ¿no ha prometido el Señor expresamente y decretado firmemente, que si os rebeláis contra él, seréis completamente destruidos de la faz de la tierra?” [No puede hacerlo lo suficientemente fuerte. Esta es la promesa sobre la tierra.] Y ahora por esta causa, para que no seáis destruidos, el Señor ha enviado a su ángel a visitar a muchos de su pueblo [vean aquí nuevamente, un ángel siempre viene en una gran crisis para cambiar las cosas; esta ciudad está en decadencia y fuera de control; lo único que puede cambiar las cosas es la aparición de un ángel, tal como cambió a Alma cuando era un joven] declarando a ellos que deben ir y clamar fuertemente a este pueblo, diciendo: Arrepentíos, porque el reino de los cielos está cerca.”

Este es un ángel poderoso volando. Esto es lo que el ángel Moroni tuvo que predicar, fue esto. Moroni es el hombre que escribió este libro. ¿Qué está haciendo? Nos está advirtiendo por todos lados. Es el que está en el Templo de Salt Lake, ya saben; tal vez lo hayan visto. Y están amenazados con esto. Bueno, ¿daríamos la bienvenida a esto?

Versículos 26: “Y no muchos días después, el Hijo de Dios vendrá en su gloria; y su gloria será la gloria del Unigénito del Padre, lleno de gracia, equidad y verdad, lleno de paciencia, misericordia y longanimidad, pronto para escuchar los clamores de su pueblo y para responder a sus oraciones. Y he aquí, él viene a redimir a aquellos que serán bautizados para arrepentimiento, mediante la fe en su nombre [y los niveles de membresía no son los factores decisivos]… El tiempo está cerca en que todos los hombres cosecharán una recompensa por sus obras… [ya sea que pertenezcan a la iglesia o no]… Si han sido justos, cosecharán la salvación de sus almas, según el poder y la liberación de Jesucristo.” Noten, hay solo dos condiciones, y nos dijo qué es la justicia. Acaba de decir, como el Señor: gracia, equidad, verdad, paciencia, misericordia, longanimidad. Estas son las características que el Señor nos ha mostrado, y si son justos, cosecharán la salvación de sus almas. Pero si han sido malvados, no. Versículo 30: “produzcan obras dignas de arrepentimiento [dice] sois un pueblo perdido y caído.” Esta es la última llamada, y tampoco nos gusta. ¿Estaban satisfechas las personas con esto? Esto los enfureció como avispones, como nos dice el siguiente versículo. Cuando les dice francamente, termina diciendo: “sois un pueblo perdido y caído. Ahora sucedió que cuando yo, Alma, había dicho estas palabras, he aquí la gente se enojó conmigo porque les dije que eran un pueblo de corazón duro y cuello rígido.”

Entonces Amulek se puso en pie y comenzó a predicarles. Amulek se presentó, y es un personaje muy llamativo. Estos bocetos de personajes en el Libro de Mormón están muy claramente marcados. Era el ciudadano más respetado que se podía imaginar. Era un sangre azul. Alma 10:2: “Yo soy Amulek,… descendiente de Aminadí,… y Aminadí era descendiente de Nefi, que era hijo de Lehi.” Estaba orgulloso de su genealogía. Y aquí tenemos una nota genealógica extremadamente importante. Lehi era un descendiente de Manasés, que era medio egipcio. Su madre era Asenat, que era de la sangre de Cam, una egipcia pura. Tenía que serlo; su padre era un sumo sacerdote de Heliópolis. [Lehi] era un descendiente de Manasés cuyo hermano gemelo era Efraín. Afirmamos que descendemos de él. También era hijo de Asenat, la mujer egipcia. (Debería estar escribiendo esto en el tablero; me estoy mezclando todo aquí). Versículo 3: “… y que era hijo de José que fue vendido en Egipto por las manos de sus hermanos.”

Tienen la sangre de Egipto en ellos, y tienen la sangre de todas las Doce Tribus de José y Manasés. Y tienen sobre todo lo que puedas imaginar en la sangre mixta de Egipto. Hemos visto eso antes. Y noten que dice, además de su nacimiento distinguido y su trasfondo, “También soy un hombre de no poca reputación entre todos los que me conocen [tenía una gran reputación, era bien conocido y altamente respetado];… También he adquirido muchas riquezas por la mano de mi industria.” Había sido un hombre de negocios exitoso, y se había hecho muy rico. Había tenido mucho éxito y era muy respetado. Era la crema de la crema.

Versículos 5: “Sin embargo, después de todo esto, nunca he conocido mucho de los caminos del Señor.” Dijo que había nacido en la iglesia y sabía sobre el evangelio. ¿Cómo es eso, qué está pasando aquí? Bueno, por supuesto, aquí tenemos la parábola de los sembradores. La semilla cae y las preocupaciones del mundo los ocupan tanto después de haber aceptado el evangelio, que se pierden y lo dejan. Así que dice: “Nunca he conocido mucho de los caminos del Señor, y de sus misterios y maravilloso poder… He visto mucho de sus misterios y su maravilloso poder; sí, incluso en la preservación de las vidas de este pueblo. Sin embargo, endurecí mi corazón [estaba demasiado ocupado haciéndose rico, aparentemente; no lo escuchaba], porque fui llamado muchas veces, y no quise escuchar [obviamente, algo lo distraía; dijo que había ganado muchas riquezas por su industria; bueno, su industria lo distraía]… Sabía sobre estas cosas, pero no quería saber [este es el caso de tantas personas]; por lo tanto, seguí rebelándome contra Dios en la maldad de mi corazón,” hasta que estaba viajando y este ángel vino y lo detuvo. Ven, también habría seguido hasta el final. En el Libro de Mormón, el ángel vuelve a cruzar el abismo. Es el ángel el que nos saca del punto muerto cuando estamos atrapados de esa manera, pero solo en grandes ocasiones.

Versículo 9: “Y el ángel me dijo que él es un hombre santo; por lo tanto, sé que es un hombre santo porque fue dicho por un ángel de Dios.” Así fue presentado a Alma. Versículo 12: “Y ahora, cuando Amulek hubo dicho estas palabras, la gente comenzó a asombrarse.” Bueno, podemos preguntarnos, incidentalmente, sobre este modelo a seguir. Veremos qué hacen. Todos se vuelven contra él. Por supuesto que lo hacen. Comenzaron a asombrarse, al ver que era una persona tan respetable. La gente se volvió contra él como se volvieron contra Alma y lo insultaron. Noten que van a maltratarlo aquí. Intentan atraparlo con la astucia de sus palabras, “para que los entreguen a sus jueces para que sean juzgados según la ley… arrojados a la prisión, según el crimen que pudieran hacer aparecer o testificar contra ellos.” Van a enmarcarlos y enviarlos a la cárcel. Todos se volvieron contra él. Pero dices, “Ah, un hombre rico de buena familia; seguramente sus parientes y familia no se volverán contra él.” Bueno, piénsalo de nuevo. Si miras a Alma 15:16, leerás: “Y sucedió que Alma y Amulek, Amulek habiendo abandonado todo su oro [ya no es rico, igual que Alma ya no tenía poder, así que dijeron que has perdido tu influencia y se burlaron de él], y plata, y sus cosas preciosas, que estaban en la tierra de Ammoníah, por la palabra de Dios [tan pronto como perdió su dinero, ¿qué pasó entonces? Es la historia de Timón de Atenas], siendo rechazado por aquellos que una vez fueron sus amigos y también por su padre y sus parientes.”

No solo sus amigos lo rechazaron, sino que perdió su dinero y su propia familia. Su padre, y sus parientes no quieren tener nada que ver con él, porque perdió su dinero, no porque estaba predicando el evangelio. Hay algunas ideas psicológicas maravillosas en el Libro de Mormón, pero veo que el tiempo se ha acabado ahora, y continuaremos con este escándalo. “Ve de aquí y hablemos más de estas cosas tristes.”