Capitulo 15
El Milenio
La Vida Extendida y la Resurrección
Las escrituras revelan una detallada representación de las condiciones que existirán durante el período de mil años conocido por los Santos de los Últimos Días como el Milenio. Prominente entre las enseñanzas basadas en las escrituras es la doctrina que el poder de la muerte será vencido en cierto grado, y durante esta época “no habrá más allí niño que muera de pocos días, ni viejo que sus días no cumpla; porque el niño morirá de cien años, y el pecador de cien años será maldito.”1
Aunque todos los mortales que viven durante el milenio tendrán que morir, sin embargo se explica en una revelación dada a José Smith que se cambiarán en un abrir y cerrar de ojos a un estado resucitado sin ser sepultados:
Y el que viva cuando el Señor venga, y haya guardado la fe, bendito es; sin embargo, le es señalado morir a la edad del hombre. Por tanto, los niños crecerán hasta envejecer; los ancianos morirán; mas no dormirán en el polvo, antes serán cambiados en un abrir y cerrar de ojos.
Así que, por esta causa los apóstoles predicaron al mundo la resurrección de los muertos.2
El Profeta también enseñó que aquellos que “mueran en el Señor .. . se levantarán de los muertos y no morirán después, y recibirán una herencia ante el Señor en la ciudad santa.”3 Tratando lo que parece ser una combinación de mortales e inmortales Orson Pratt comentó:
“¿Pensáis,” diría uno, “que habrán seres mortales viviendo sobre la tierra cuando vienen estas huestes celestiales?” Sí, y morarán juntos. ¿Qué? ¡Personas no sujetas a enfermedades, ni a tristeza, ni castigo, personas cuyos cuerpos son celestiales e inmortales, que durarán en sus cuerpos por toda la eternidad! ¿Asociarán con seres mortales? Sí. . .
No tengo duda que habrá cierto grado de la gloria de seres inmortales que no será concedido a los seres mortales durante todo el tiempo del milenio.
Reyes y sacerdotes vendrán acá para reinar, y asociarán libremente con sus hijos, los de quienes son sus antepasados. Y los mortales pueden recibir instrucciones de los inmortales, que les prepararán para el tiempo cuando la tierra sufrirá un cambio más grande aún. Los hijos de la mortalidad necesitarán esta preparación para poder vivir cuando la tierra está quemándose, que será su destino final.4
Un Período de Paz y Rectitud
Según Isaías, el Milenio será un período de paz, cuando las enemistades entre los animales que ahora se acepta como cosa natural cesará y el conflicto y perturbaciones no se permitirán existir:
Morará el lobo con el cordero, y el leopardo con el cabrito se acostará; el becerro y el león y la bestia doméstica andarán juntos, y un niño los pastoreará.
La vaca y la osa pacerán, sus crías se echarán juntas; y el león como el buey comerá paja. Y el niño de pecho jugará sobre la cueva del áspid, y el recién destetado extenderá su mano sobre la caverna de la víbora.
No harán mal ni dañarán en todo mi santo monte; porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar.5
Juan dijo que al comienzo del Milenio Satanás será atado, y no será permitido tentar a los hombres:
Vi a un ángel que descendía del cielo, con la llave del abismo, y una gran cadena en la mano. Y prendió al dragón, la serpiente antigua, que es el diablo y Satanás, y lo ató por mil años;
y lo arrojó al abismo, y lo encerró, y puso su sello sobre él, para que no engañase más a las naciones, hasta que fuesen cumplidos mil años; y después de esto debe ser desatado por un poco de tiempo.6
La Doctrina y Convenios añade que “en ese día Satanás no tendrá poder para tentar a ningún hombre.”7 Nefi dio la razón por la falta de poder de Satanás durante este período, diciendo que “a causa de la rectitud del pueblo del Señor, Satanás no tiene poder; por consiguiente, no se le puede desatar por el espacio de muchos años; pues no tiene poder sobre el corazón del pueblo, porque el pueblo mora en rectitud, y el Santo de Israel reina.”8
Erastus Snow comentó sobre la idea de atar a Satanás, y dijo que su retiro resultaría en verídicos cambios en la tierra y su atmósfera:
Esta promesa que tenemos que cuando llegue el tiempo del cual se escribe en las Escrituras, ese Satanás será atado, y cesará de ejecutar poder y dominio sobre los corazones de los hijos de Dios por el plazo de mil años, los niños que crecen en el Señor no sufrirán la muerte; es decir, no dormirán en la tierra, sino que se cambiarán en un momento, en el cerrar y abrir de ojos, y serán arrebatados, y su descanso será glorioso.
Así distingo entre ellos y nosotros, porque en ese tiempo crecerán con un entendimiento más completo y perfecto de las leyes de la vida y la salud, y las obedecerán. Y las tentaciones y maldades que nos rodean sobre cada mano les serán quitadas. Los elementos que ahora están bajo el control del príncipe y poder del aire, y que están cargados con la muerte, con los cuales estamos constantemente en contacto, en ese entonces serán quitados; los elementos serán santificados, la maldición quitada de la tierra y la atmósfera en su alrededor, y los poderes de la obscuridad que reinan en la atmósfera serán restringidos a su propia región, y los tabernáculos de los hijos de los hombres crecerán sin pecado hasta la salvación.
Así que sus tabernáculos no serán sujetos a dolor y enfermedad como son los nuestros. No habrá dolor ni enfermedad, porque no habrá ninguna infracción de las leyes de vida y salud. No habrá intemperancia de ninguna clase, porque no habrá ningún espíritu inmundo a nuestro lado continuamente listo a seducir y atraer al pecado. Sino que el Espíritu del Señor estará con cada persona para guiarle constantemente, y la ley del Señor será escrita en su corazón, tal que no será necesario decir el uno al otro, “Este es el camino, andad por él.” No habrá ningún Diablo para tentar sobre la mano derecha y sobre la izquierda, diciendo, “Éste es el camino, andad por él.” Por eso, teniendo esta buena influencia continuamente en su alrededor para guardarles en el camino estrecho, crecerán sin enfermedades ni dolores ni la muerte.9
Sin embargo parece que aun estará la iniquidad sobre la tierra. Dijo José Fielding Smith,
El Profeta José Smith dijo: “Habrá hombres inicuos sobre la tierra durante los mil años.
Las naciones paganas que no vendrán para adorar serán visitadas con los juicios de Dios, y finalmente tendrán que ser destruidas de la tierra.” [Historia Documentaría de la Iglesia, V, pp. 212]
El dicho que habrán hombres inicuos sobre la tierra durante el Milenio ha sido mal-entendido por muchos, porque el Señor declaró que los malvados no permanecerán, sino que serán consumidos. En usar este término “malvados [inicuos]” debe interpretarse en el idioma del Señor como está registrado en la Doctrina y Convenios sección 84 versículos 49-53. Aquí el Señor habla de aquellos que no han recibido el evangelio como inicuos porque todavía están bajo la esclavitud del pecado, no habiendo sido bautizados. Los habitantes del orden terrestre permanecerán sobre la tierra durante el Milenio, y éstos estarán sin las ordenanzas del evangelio.10
Orson Pratt explicó este problema con aun más claridad en decir que los hombres todavía tendrán su libre albedrío y así serán capaces de cometer pecado:
La pregunta puede levantarse aquí—”¿será posible que los hombres cometan pecado durante el Milenio?” Sí. ¿Porqué? Porque no han perdido su albedrío. El albedrío continua doquier que haya seres inteligentes, así sea en el cielo, como sobre la tierra, o entre cualquiera de las creaciones que Dios ha hecho; doquier que encontráis seres inteligentes, allá encontraréis una agencia, quizás no al mismo nivel, bajo todas las circunstancias, pero siempre donde haya inteligencia habrá la actuación del albedrío. Por ejemplo, cuando Satanás será atado y un sello puesto sobre él en su bajísimo pozo, su albedrío está parcialmente destruido en algunas cosas. No tendrá poder de salir del pozo; ahora tiene ese poder; en ese tiempo no tendrá poder de tentar a los hijos de los hombres, ahora tiene ese poder; consecuentemente su albedrío en aquel entonces será en gran manera destruido o prohibido que lo use, pero no completamente. El Señor no destruirá el albedrío de las personas durante el Milenio, por lo tanto habrá la posibilidad que pecasen durante ese tiempo. Pero si los que viven en ese período pequen, no será por razón del poder del diablo para tentarles, porque no tendrá ningún poder sobre ellos, y pecarán sencillamente porque eligen de hacerlo por medio de su propio libre albedrío.11
La Vida Hogareña y la Sociabilidad Mientras el Señor Mora Entre los Hombres
Según Isaías, la vida hogareña continuará durante el Milenio en forma similar a lo que gozamos en la actualidad:
Edificarán casas, y morarán en ellas; plantarán viñas, y comerán el fruto de ellas.
No edificarán para que otro habite, ni plantarán para que otro coma; porque según los días de los árboles serán los días de mi pueblo, y mis escogidos disfrutarán la obra de sus manos.
No trabajarán en vano, ni darán a luz para maldición; porque son linaje de los benditos de Jehová, y sus descendientes con ellos.12
Brigham Young expresó la misma idea al definir el Milenio:
El Milenio consiste en esto—cada corazón en la Iglesia y el Reino de Dios siendo unido en uno; el Reino amplificándose hasta sobrevencer cada cosa oponiendo la economía del cielo, y Satanás siendo atado, y teniendo puesto sobre él un sello. Todas las cosas demás serán como ya son, comeremos, beberemos, nos vestiremos con ropa. Deje que sean santificadas las personas, y la tierra bajo sus pies será santificada.13
La Escrituras afirman que los hombres continuarán a gozar la misma sociabilidad que ya es de ellos:
Cuando se manifieste el Salvador, lo veremos como es. Veremos que es un varón como nosotros. Y la misma sociabilidad que existe entre nosotros aquí existirá entre nosotros allá, pero la acompañará una gloria eterna que ahora no conocemos.14
Una revelación moderna registra la promesa del Señor que “con poder y gran gloria me revelaré desde los cielos, con todas sus huestes, y moraré en rectitud con los hombres sobre la tierra mil años, y los malvados no permanecerán.”15 Aparentemente el Reino de Dios será dado al mando del Señor, y Él “estará en medio de ellos y su gloria estará sobre ellos, y él será su rey y su legislador.”16 Una revelación a José Smith dice:
Mas de cierto os digo, que vendrá tiempo cuando no tendréis rey ni gobernante, porque yo seré vuestro rey y velaré por vosotros.
Por tanto, escuchad mi voz y seguidme, y seréis un pueblo libre; y no tendréis más leyes que las mías cuando yo venga, porque soy vuestro legislador, y ¿qué cosa hay que detenga mi mano?17
El Gobierno de los Santos
Los Santos de los Últimos Días creen que habrán dos capitales durante el Milenio. Isaías dice que “de Sión saldrá la ley, y de Jerusalén la palabra de Jehová.”18 Orson Pratt dio esta explicación en cuanto a la ley:
Pero Sión también será edificada. Otra ciudad, no la antigua Jerusalén, sino una nueva Jerusalén, que se llamará Sión, sobre el gran hemisferio Oeste, preparatoria a la venida del Señor. “De Sión saldrá la ley,” dice el profeta. ¿Qué ley? Una ley para gobernar las naciones, una ley enseñándoles como salvarse, una ley informando a los reyes y los emperadores y los nobles de la tierra como se pueden salvar, y como pueden salvar a sus muertos.19
Muchos, durante este período, heredarán tierras en que morar. Estas serán asignadas por “uno poderoso y fuerte,” según la Doctrina y Convenios:
Y sucederá que yo, Dios el Señor, enviaré a uno poderoso y fuerte, con el cetro de poder en su mano, revestido de luz como un manto, cuya boca hablará palabras, palabras eternas, mientras que sus entrañas serán una fuente de verdad, para poner en orden la casa de Dios y para disponer por sorteo las heredades de los santos cuyos nombres, junto con los de sus padres e hijos, estén inscritos en el libro de la ley de Dios; mientras que aquel hombre, que fue llamado por Dios y nombrado, que extienda su mano para sostener el arca de Dios, caerá por el dardo de la muerte, como el árbol herido por el fulgente golpe del rayo.
Y todos aquellos cuyos nombres no estén asentados en el libro de memorias, no hallarán herencia en aquel día, antes serán desarraigados y se les señalará su porción entre los incrédulos en donde es el lloro y el crujir de dientes.20
Orson Pratt también enseñó que los Santos en Sión habrán recibido solamente una mayordomía hasta después que los Santos resucitados se habrán presentado y recibido sus herencias, y que después de la resurrección los santos vivos recibirán su porción eterna:
Quizás preguntaréis ¿cuándo vendrá este tiempo? en que los Santos reciban sus bona fide herencias. El tiempo vendrá en que los Santos recibirán sus mayordomías cuando habrán vuelto a las tierras de las cuales fueron expulsados; pero las herencias no les serán dadas hasta después que el Señor habrá asignado a los rectos muertos sus herencias, y después los rectos vivos recibirán las suyas. Ésto encontraréis registrado en la Doctrina y Convenios; y en el mismo Libro está predicho que habrá uno ‘poderoso y fuerte? que también será un personaje inmortal,—uno vestido de luz como si fuese ropa:—uno cuyas entrañas son una fuente de verdad. Su misión será dividir por sorteo a los Santos sus herencias, de acuerdo con su fidelidad en sus mayordomías. Esto, también, está de acuerdo con otra revelación, dada el 27 de diciembre de 1832, que dice, en gran simplicidad, que cuando los Santos son resucitados y arrebatados al cielo, y los Santos vivos también son arrebatados, y que cuando el séptimo ángel habrá sonado su trompeta, entonces los Santos recibirán sus herencias. [Doctrina y Convenios 88:95-110] El tiempo está allí nombrado, concerniente el período que el Señor tiene en su propia mente, cuando se darán las herencias. Finalmente, después que los Santos habrán sido resucitados y arrebatados al cielo, en conección con los Santos viviendo aún; y después que el séptimo ángel suene su trompeta, la tierra será dada a los Santos del Más Alto como herencia para ser dividida entre ellos.21
El juicio durante el Milenio será dado a los Santos. En las palabras de Juan el Revelador,
Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años.22
Ésto se clarificó aun más en el Libro de Mormón, en donde está bosquejado el papel que tomarán los Apóstoles en el programa de juicio:
Y me dijo: ¿Te acuerdas de los doce apóstoles del Cordero? He aquí, ellos son los que juzgarán a las doce tribus de Israel; por tanto, los doce ministros de tu posteridad serán juzgados por ellos, pues vosotros sois de la casa de Israel.
Y estos doce ministros que tú ves juzgarán a tu posteridad. Y he aquí, son justos para siempre; porque a causa de su fe en el Cordero de Dios, sus vestidos son emblanquecidos en su sangre.23
Orson Pratt enseñó que los dos grupos de apóstoles tendrán instalados en su debidas tierras doce tronos, y que el proceso de juicio continuará a funcionar en los mundos eternos:
Y Jesús y los Doce Apóstoles estarán entre nosotros. Y tenemos un registro de sus tronos. “Y Jesús les dijo: De cierto os digo que en la regeneración, cuando el Hijo del Hombre se siente en el trono de su gloria, vosotros que me habéis seguido también os sentaréis sobre doce tronos, para juzgar a las doce tribus de Israel.” Entonces las doce tribus volverán, y doce hombres sentados en doce tronos, en la tierra de Palestina, reinarán sobre ellos. Los Doce Discípulos levantados en esta tierra, hace 1800 años, tendrán sus tronos; quienes, después de ser juzgados por los Doce en Jerusalén, se sentarán sobre sus tronos y juzgarán el resto de la tribu de José. Y tendrán esa obra que cumplir en los mundos eternos.24
Declaró también, al hablar de los doce apóstoles originales, que el proceso de juzgar será un proceso continuo—un proceso de gobernar en vez de juzgar, y los jueces se sentarán en juicio como los jueces en Israel antes del tiempo de Saúl. Otros además de los apóstoles tendrán responsabilidades:
Y estos serán los hombres que estarán con Jesús cuando desciende sobre el Monte de Olivos, después que se habrán abierto los sepulcros de los justos. En la resurrección saldrán inmortales, eternos, vestidos con la plenitud de esa gloria que pertenece al reino celestial. También reinarán como reyes y sacerdotes acá sobre la tierra. A algunos de los Santos resucitados serán dadas diez ciudades para gobernar. A otros les serán dadas cinco ciudades para gobernar, según sus obras acá en esta vida. Todos no tendrán el mismo poder. Todos no tendrán el mismo dominio. Los Doce tendrán doce tronos—uno para cada uno, para juzgar a las doce tribus de Israel. Las tribus necesitarán ser juzgados, durante los mil años enteros que vivan sobre la tierra; necesitarán jueces entre sí, para manifestarles lo que es importante que sepan los hombres, mujeres y niños.
Estos doce hombres asignados a juzgar a estas doce tribus de Israel no puedan ser, como si fuera, jueces sobre toda la tierra a la vez. No pueden estar presentes en todos lugares al mismo momento, y por eso habrá otros jueces, otros hombres de Dios, que son juzgados dignos en los ojos del Más Alto.25
Brigham Young habló de la rectitud del juicio que suministrarán.
Cuando es dado el juicio a los Santos, será por razón de su rectitud, porque juzgarán tal como los ángeles y los Dioses, y no como hacen los inicuos en la actualidad, que no aman ni a Dios ni a la justicia, que no aman ni la verdad ni la misericordia, que juzgan según la iniquidad de sus corazones.26
El Espíritu Será Derramado
Habrá un gran derramamiento del Santo Espíritu durante el Milenio, según el Profeta Joel:
Y después de esto derramaré mi Espíritu sobre toda carne, y profetizarán vuestros hijos y vuestras hijas; vuestros ancianos soñarán sueños, y vuestros jóvenes verán visiones.
Y también sobre los siervos y sobre las siervas derramaré mi Espíritu en aquellos días.27
Durante el Milenio el Señor revelará muchas cosas ahora escondidas del mundo. Nótense las promesas que ha hecho:
Sí, en verdad te digo que el día en que el Señor venga, él revelará todas las cosas:
cosas que han pasado y cosas ocultas que ningún hombre conoció; cosas de la tierra, mediante las cuales fue hecha, y su propósito y estado final; cosas sumamente preciosas; cosas que están arriba y cosas que están abajo; cosas que están dentro de la tierra y sobre la tierra y en el cielo.28
José Smith comentó sobre las verdades que serán reveladas al hombre:
Ni tampoco podemos nosotros ni ellos perfeccionarnos sin los que han fallecido en el evangelio; porque al iniciarse la dispensación del cumplimiento de los tiempos, dispensación que ya está comenzando, es menester que una unión entera, completa y perfecta, así como un encadenamiento de dispensaciones, llaves, poderes y glorias se realicen y sean revelados desde los días de Adán hasta el tiempo presente. Y no sólo esto, sino que las cosas que jamás se han revelado desde la fundación del mundo, antes fueron escondidas de los sabios y entendidos, serán revelados a los niños pequeños y a los de pecho en ésta, la dispensación del cumplimiento de los tiempos.29
Entre las revelaciones que tienen que salir a la vista es el Libro de Enoc, que contendrá la profecía de Adán sobre el futuro del mundo:
Y el Señor le dio consuelo a Adán, y le dijo: Te he puesto para estar a la cabeza; multitud de naciones saldrán de ti, y tú les serás por príncipe para siempre.
Y Adán se puse de pie en medio de la congregación, y a pesar de que lo agobiaba el peso de sus años, lleno del Espíritu Santo, predijo todo cuanto habría de sobrevenir a su posteridad hasta la última generación.
Todas estas cosas se escribieron en el libro de Enoc, y se testificará de ellas a su debido tiempo.30
La verdades que tratan la creación física de la tierra y del universo también serán dadas a conocer:
Dios os dará conocimiento por medio de su Santo Espíritu, sí, por el inefable don del Espíritu Santo, conocimiento que no se ha revelado desde el principio del mundo hasta ahora; el cual nuestros antepasados con ansiosa expectativa han aguardado a que se revelara en los postreros tiempos, hacia los cuales sus mentes fueron orientadas por los ángeles, como que se hallaba reservado para la plenitud de su gloria; una ocasión futura en la que nada se retendrá, sea que haya un Dios o muchos dioses, serán manifestados.
Todos los tronos y dominios, principados y potestades, serán revelados y señalados a todos los que valientemente hayan perseverado en el evangelio de Jesucristo.
Y también, si se han fijado límites a los cielos, los mares o la tierra seca, o el sol, la luna o las estrellas, todos los tiempos de sus revoluciones, todos los días, meses y años señalados; y todos los días de sus días, meses y años, y todas sus glorias, leyes y tiempos fijos, serán revelados en los días de la dispensación del cumplimiento de los tiempos, conforme con lo decretado en medio del Concilio del Dios Eterno de todos los otros dioses, antes que este mundo fuese, que habría de reservarse para su cumplimiento y fin, cuando todo hombre ha de entrar en su eterna presencia y en su reposo inmortal.
¿Hasta cuándo pueden permanecer impuras las aguas que corren? ¿Qué poder hay que detenga los cielos? Tan inútil le sería al hombre extender su débil brazo para contener el río Misurí en su curso decretado, o volverlo hacia atrás, como evitar que el Todopoderoso derrame conocimiento desde el cielo sobre la cabeza de los Santos de los Últimos Días.31
Aparentemente las verdades serán tan maravillosas que “desde el principio del mundo no han escuchado los hombres, ni percibido con sus oídos, ni ha visto ojo alguno, además de ti, oh Dios, cuan grandes cosas has preparado para aquel que te espera.”32 Probablemente será por razón de este rico derrame del Santo Espíritu que “la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las aguas cubren el mar.”33
Durante la edad del Milenio los redimidos serán llenos del conocimiento del Señor, y cantarán una nueva canción, el lírico del cual ya se ha dado:
El Señor de nuevo ha traído a Sión;
el Señor ha redimido a su pueblo, Israel,
conforme a la elección de gracia,
la cual se llevó a cabo por la fe y el convenio de sus padres.
El Señor ha redimido a su pueblo,
y Satanás está atado, y el tiempo ha dejado de ser.
El Señor ha reunido en una todas las cosas.
El Señor ha bajado a Sión desde lo alto.
Ha hecho subir a Sión desde abajo.
La tierra ha estado de parto y ha dado a luz su fuerza;
y la verdad está establecida en sus entrañas;
y los cielos le han sonreído;
y está revestida con la gloria de su Dios,
porque él está en medio de su pueblo.
Gloria y honra, y poder y fortaleza,
sean atribuidos a nuestro Dios,
porque en él abundan la misericordia,
la justicia, gracia, verdad y paz,
para siempre jamás. Amén.34
Orson Pratt enseñó que en este tiempo aun el reino animal también será dotado con mayor inteligencia.
El conocimiento de Dios cubrirá todo el mundo, como las aguas cubren el gran abismo. Y entonces el reino animal manifestará más inteligencia y más conocimiento que ahora manifiesta en su condición caída. En verdad, tenemos una declaración por Juan el Revelador que cuando este tiempo viene sabrán aun como alabar a Dios. Él dice, “y a todo lo creado que está en el cielo, y sobre la tierra, y debajo de la tierra, y en el mar, y a todas las cosas que en ellos hay, oí decir: al que está sentado en el trono, y al Cordero, sea la alabanza, la honra, la gloria y el poder, por los siglos de los siglos.” ¿Qué? ¿El reino animal dotado con lenguaje? Sí, un lenguaje de alabanza, diciendo algo del cordero que fue matado, y de su gloria y excelencia. ¡Qué hermosa creación será cuando todas estas cosas se cumplan!35
Muchas Iglesias Durante el Milenio
Según Jorge Q. Cannon, durante el Milenio, todos los hombres conocerán al Señor, y estarán familiarizados con Su dominio y ley:
Si leéis el capítulo 20 de Apocalipsis, veréis que el Señor reveló a Juan que habrá mil años de descanso, un milenio o época milenial, cuando la tierra descansará de iniquidad, y entonces conocimiento la cubrirá como las aguas cubren el abismo, y cuando un hombre no tendrá que decir a otro, “¿Conoce al Señor?” sino cuando, según las palabras del Profeta, “toáosme conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande;” cuando las leyes de Dios serán escritas en los corazones de todos los hijos de los hombres, y comprenderán su ley.36
Aparentemente los hombres no solo tendrán conocimiento de Cristo sino que se inclinarán y darán reverencia a Su ley, porque Pablo declara,
Por lo cual Dios también le exaltó hasta lo sumo, y le dio un nombre que es sobre todo nombre,
para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de los que están en los cielos, y en la tierra, y debajo de la tierra; y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre.37
La misma idea está incluida en las revelaciones de los últimos días:
Os digo, pues, que os he mandado mi convenio sempiterno, el mismo que existió desde el principio.
y lo que he prometido, lo he cumplido, y las naciones de la tierra se inclinarán a él; y si no lo hacen de sí mismas, serán derribadas, porque lo que ahora de sí mismo se ensalza será despojado de poder.38
Pero parece que la referencia citada arriba no se interpreta con el sentido que todas las personas se juntarán a la Iglesia de Cristo. Brigham Young repetidamente enseñó que aun habría una variedad de iglesias sobre la tierra durante el Milenio:
Cuando las naciones verán juntas la gloria de Dios, el espíritu de sus sentimientos puede expresarse en estas palabras, “Maldito seré si te sirvo.” En aquellos días los Metodistas y los Presbiterianos, encabezados por sus sacerdotes, no serán permitidos formar pandillas para esforzar, matar y hurtar a los Santos de los Últimos Días; ni tampoco serán permitidos a los Santos de los Últimos Días levantarse para decir, “Mataremos a vosotros, Metodistas, Presbiterianos, y etcétera,” ni tampoco será permitida ninguna de las sectas del Cristianismo perseguir la una a la otra.
¿Qué harán? Oirán de la sabiduría de Sión, y los reyes y los soberanos de las naciones subirán a Sión para informarse de las cosas del Señor, y ponerse al tanto del gran conocimiento, sabiduría y entendimiento manifestado por medio de los Santos del Más Alto. Anunciarán al pueblo de Dios que pertenecen a tal y tal Iglesia, y que no quieren cambiar su religión.
Serán atraídos a Sión por la gran sabiduría desplegada allá, y la atribuirán a la perfidia y la austicia del hombre. Se les preguntará, “¿Qué queréis hacer, vosotros extranjeros de lejos?” “Queremos vivir de acuerdo con nuestra religión.” “¿Doblaréis la rodilla con nosotros ante Dios?” “Oh sí, como os guste;” y en ese tiempo cada rodilla doblará, y cada lengua reconocerá que Dios es el formadory hacedor de todas las cosas, el gobernador y controlador del universo. Tendrán que doblar la rodilla y confesar que Él es Dios, y que Jesucristo, quién sufrió para los pecados del mundo, es en verdad su Redentor; que por el derramar de su sangre Él ha redimido a los hombres, las mujeres, los niños, las bestias, las aves, los peces, la tierra misma, y cada cosa que Juan vio y oyó alabando en el cielo.
Preguntarán “¿Si doblo la rodilla y confieso que Él es el Salvador, el Cristo, para la gloria del Padre, me permitiréis volver a casa a ser Presbiteriano?” “Sí.” “¿Y no me perseguiréis?” “Nunca.” “¿Me permitiréis volver a casa y juntarme con la Iglesia Griega?” “Sí.” “¿Me permitiréis ser de los Amigos Shakers, o de los Shakers Tembladores?” “Oh sí, podéis ser lo que queréis, pero tengáis en cuenta que no podéis perseguir a vuestros vecinos, tenéis que portaros bien, y no molestar a vuestros vecinos, y dejarles que adoren el son, la luna, un perro blanco, o cualquier cosa que les parece bien, teniendo en cuenta que cada rodilla tendrá que doblar y cada lengua confesar. Cuando habréis pagado este tributo al Más Alto, quién os creó y os preserva, podéis ir y adorar lo que queréis, o hacer lo que queréis, si no viola los derechos de vuestros vecinos.39
En otra ocasión dijo,
En el milenio los hombres tendrán el privilegio de ser Presbiterianos, Metodistas o paganos, pero no tendrán el privilegio de tratar el nombre y el carácter de la Deidad como lo han hecho anteriormente. No, sino cada rodilla doblará y cada lengua confesará a la gloria de Dios el Padre que Jesús es el Cristo.40
Comentó que muchos quedarán como miembros de sus respectivas iglesias porque no se humillarán suficientemente para aceptar el Evangelio y ser enseñados, aun que tendrán adecuado testimonio de la veracidad de la Iglesia:
Anticipo con toda confianza que vendrá el tiempo cuando cada lengua confesará, y cada rodilla doblará al Salvador, aunque las personas pueden creer lo que quieren en cuanto a la religión. El reino que Daniel vio en verdad formará leyes para proteger a cada hombre en sus derechos, como hace nuestro gobierno actualmente, no obstante si las religiones de las personas son verídicas o falsas. Creemos ésto tan sinceramente como creemos cualquier otra cosa, y creo que el rumbo de este pueblo lo ha comprobado, en cuanto concierne los actos de los hombres. Toda la creación no podría pedir por más testigos que ahora tienen, que el Nuevo Testamento es la verdad, que Jesús es el Cristo, que los Santos Profetas son verídicos, que el Libro de Mormón es la verdad, y que José Smith fue un Profeta y un Revelador. Pero el Señor ha decretado que ningún hombre recibirá los beneficios del sempiterno Sacerdocio sin humillarse ante El, y darle la gloria por haberle enseñado, para que pueda testificar a cada hombre de la verdad, y no depender en las palabras de ningún individuo sobre la tierra, sino conocer por sí mismo, vivir “por toda palabra que sale de la boca de Dios,” amar al Señor Jesucristo y las instituciones de Su Reino, y finalmente entrar en Su gloria. Cada hombre y mujer puede ser un Revelador, y tener el testimonio de Jesús, que es el espíritu de la profecía, y prever la mente y la voluntad de Dios, concerniente a ellos, rechazar lo malo, y escoger lo bueno.41
Presidente Brigham Young también mantuvo que habrá millones durante el Milenio que rehusarían aceptar a Cristo como su redentor:
Cuando todas las naciones serán tan subyugadas a Jesús que cada rodilla doblará y cada lengua confesará, aun habrá millones sobre la tierra que no creerán en él: pero serán obligados a reconocer su reinante gobierno. Podéis nombrar ese gobierno eclesiástico, o cualquier término que os guste; no obstante, no hay ningún gobierno verídico sobre la tierra sino el gobierno de Dios, o el santo Sacerdocio. ¿Os diré lo que es? En una palabra, es un sistema perfecto de gobierno—un reino de Dioses y ángeles y todos los seres que se sujetarán a ese gobierno. No habrá otro gobierno verídico en el cielo ni sobre la tierra. No me echéis a mi la culpa por creer en un gobierno puro y santo.42
Los esfuerzos de la Iglesia serán dirigidos hacia tres objetivos mayores durante el Milenio: (1) la obra misional, (2) la obra del templo, y (3) la enseñanza de los Santos y su preparación para la exaltación.
La Obra Misional
Concerniente a la obra misional durante el Milenio, Presidente José Fielding Smith dijo:
El Evangelio será enseñado más intensamente y con más poder durante el milenio, hasta que todos los habitantes de la tierra lo abrazarán. Satanás será atado para que no pueda tentar a ningún hombre. Si algún hombre rehusa aceptar el evangelio bajo esas condiciones será maldito. Por medio de las revelaciones dadas a los profetas, aprendemos que durante el reinado de Jesucristo por mil años al fin todas las persona abrazarán la verdad . . . Si el conocimiento del Señor cubre la tierra como las aguas cubren el mar, entonces tendrá que ser aceptado umversalmente. Además, la promesa del Señor por Jeremías es que ya no más será necesario a ninguno enseñar a su vecino, “diciendo, Conoce a Jehová; porque todos me conocerán, desde el más pequeño de ellos hasta el más grande, dice Jehová.”43
Se anticipa que el cuarto esfuerzo misional de los últimos días, la misión final a toda la humanidad, continuará a través del Milenio. Sin embargo, el lector notará que la interpretación de Presidente José Fielding Smith que todos aceptarán el evangelio no está apoyado por las declaraciones de los hermanos citadas en la sección anterior.
La Obra del Templo
Muchos de los líderes de los Santos de los Últimos Días han comentado sobre la obra del templo que se llevará acabo durante esta época de paz. Jorge Q. Cannon, después de citar varios pasajes de escritura que corresponden a la obra del templo, declaró,
Cito estos pasajes como ocurren a la mente. Todos estáis familiarizados con ellos. Se cumplirán, y habrá mil años de descanso, durante lo cual Satanás será atado, y cuando la simiente de los rectos aumentará y cubrirá la tierra. En ese período glorioso todas las cosas sobre la faz de la tierra serán hermosas; las enfermedades y los crímenes serán desterrados; y durante ese período, como Dios ha revelado, la ocupación de este pueblo será poner los cimientos para la redención de los muertos, los millones sin número que vivían sobre la tierra y murieron sin oír y obedecer el plan de salvación.44
Juan Taylor habló de los miles de templos que en aquel entonces existirán:
Ésta es una gran obra. Bien pudiera haber dicho a José Smith, “Estás poniendo los cimientos de una gran obra—tan extensa que no hay sino pocos que pueden aun comenzar a comprenderla. Leemos a veces del mflenio. Pero ¿qué conocemos de ello? Es un tiempo cuando esta obra marchará, y Templos, miles de ellos, serán levantados para el cumplimiento de los objetos diseñados, en que se recibirán de los cielos comunicaciones en cuanto a nuestra obra, como la podemos cumplir, y para quien.45
Wilford Woodruff declaró que Templos serían edificados a través de los continentes americanos y en Europa:
Cuando viene el Salvador, mil años serán dedicados a esta obra de redención; y Templos aparecerán sobre toda esta tierra de José, el Norte y Sudamérica y también en Europa y en otros lugares; y todos los descendientes de Sem, Cam y Jafet quienes no recibieron el Evangelio en la carne, tendrán que ser representados vicariamente en los Templos de Dios, antes de que el Salvador puede presentar el Reino al Padre, diciendo, “Consumado es.”46
Fue la enseñanza de Presidente Young que seres resucitados volverán a la tierra y revelarán los datos necesarios para que puedan cumplir la obra del templo para los muertos:
Se está predicando ya el Evangelio a los espíritus presos, y cuando llegue el tiempo para que los siervos de Dios oficien a favor de ellos, los nombres de aquellos que han recibido el Evangelio en el espíritu serán revelados por los ángeles de Dios y por los espíritus de hombres justos hechos perfectos; también los lugares de su nacimiento, la época en que vivieron, y todas las cosas tocándoles que es menester registrar en la tierra, y entonces serán salvos para así recibir el derecho de entrar en la presencia de Dios, con todos sus parientes quienes han oficiado en su favor. Los inicuos serán limpiados y purificados por fuego; algunos de ellos serán salvos como si fuese por fuego.47
En relación a este tema también dijo,
Nuestros cuerpos ahora son mortales. En la resurrección habrá una reunión de los espíritus y los cuerpos, y andarán, hablarán, comerán, beberán, V gozarán. Aquellos que han sobrevencido estas pruebas son aptos socios para ángeles—para los Dioses, y son aquellos que entrarán al Templo del Señor que se edificará en los últimos días, cuando salvadores vendrán al Monte Sión, y dirán, “He aquí, hijos míos, quiero que ésto y aquello sean hechos. Acá están los nombres de tal y tal, de nuestros padres, y madres—nuestros antepasados; les presentaremos. Salid, vosotros que no habéis pasado las pruebas de la muerte y la resurrección—vosotros que viváis en la carne, y cumplid las ordenanzas para aquellos que han muerto sin la ley.” Aquellos que son resucitados así dictarán en el Templo. Cuando los Santos pasan por la muerte, no pueden oficiar en este mundo de pecado, pero dictarán a aquellos que están aquí.48
Erastus Snow declaró que José Smith dirigirá la obra del templo conducida durante el Milenio:
La mañana de la resurrección alborea. Pronto encontraremos a José y sus hermanos supervisando y dirigiendo los labores de los Eideres de Israel en los Templos de nuestro Dios, trabajando para la redención de los muertos, cual obra continuará durante el descanso de los mil años cuando el Salvador reinará sobre la tierra.49
Los Santos Se Prepararán Para la Exaltación
Un tercer propósito del Milenio será la preparación de los Santos para la exaltación. Ésto puede llevarse a cabo, en parte, por los seres resucitados que habrán retornado de las regiones celestiales. Según Orson Pratt enseñarán a los hijos de los hombres y les cederán muchas preciosas verdades:
El Señor Jesucristo estará aquí, por parte del tiempo, para instruirnos, y los antiguos patriarcas, incluyendo a Adán, bajarán de su mundo celestial, donde primero fueron hechos espiritualmente. Vendrán sobre esta creación; y tendrán sus moradas; y frecuentemente, sin duda tendrán gran gozo recogiendo a sus hijos fieles, desde el día de su propia probación hasta la centésima generación. Será algo placentero para uno de nuestros antepasados que nació hace cien generaciones decir, “Venid, hijos míos, que estáis aquí en la carne y que hasta ahora no se os han hechos inmortales, vosotros, moradores sobre la faz de la tierra, redimidos en parte—venid, tengo noticias gloriosas para comunicaros. Tengo algo que no poseéis, conocimiento que no habéis ganado, porque hemos estado arnba en aquel mundo celestial; hemos estado morando en la presencia de nuestro Padre y Dios. Fuimos restaurados allá en la dispensación en que morimos y en que fuimos trasladados, y hemos aprendido muy muchas cosas de las cuales los hijos de la mortalidad no saben nada. Venid, juntaos, para que podéis observar vuestros padres anteriores, los padres de vuestros padres y así y así, hasta que extendéis por cien generaciones. Oíd las instrucciones que os impartirán. Os hablarán del reino celestial, y su más alta gloria, y de las bendiciones que gozarán aquellos que alcanzarán la plenitud de ese reino.” ¿No dará ésto ánimo a aquellos que aun son mortales, durante el milenio? Creo que sí. Entonces el conocimiento de los padres, el conocimiento de la tierra, y de las cosas de Dios, y el conocimiento de lo que es celestial, y grande y glorioso, y bien lejos de la comprensión de seres imperfectos como somos ahora en nuestra condición decaída—entonces ese conocimiento será desplegado a las mentes de los hijos de los hombres, durante sus respectivas generaciones acá sobre la tierra, durante el gran día de descanso de la creación. ¿Para qué propósito es todo ésto? Es para preparar a sus hijos, durante el milenio que puedan hacer celestial a esta tierra, como la otra más anciana, que ellos, juntos con esta creación, puedan ser coronados con la presencia de Dios el Padre, y su Hijo Jesucristo. Ganamos este conocimiento e información por grados. Nuestros hijos son educados y enseñados, hasta que los cielos lleguen a ser familiares con ellos; hasta que el Señor llegue a ser familiar con ellos; su rostro llegue a ser familiar a todos los rectos sobre la tierra.50
El milenio también consistirá de un descanso para la tierra:
Y allá será mi morada, y será Sión, la cual saldrá de todas las creaciones que he hecho; y por el espacio de mil años la tierra descansará.51
Sumario
- El Milenio será un período de mil años durante el cual el Señor y sus Santos morarán juntos sobre la tierra. Cristo no estará siempre sobre la tierra, pero vendrá cuando le necesiten.
- El período será un tiempo de paz y rectitud. Satanás será atado, pero los hombres aun serán capaces de pecar.
- La Nueva y la Antigua Jerusalén servirán como las dos capitales mundiales. La autoridad para las dos divisiones del Reino de Dios se unirá en cierto tiempo en un concilio en la antigua Jerusalén. Cristo será el Rey. Bajo él funcionarán dos grupos originales de los Doce, quienes juzgarán los pueblos de la tierra. Los demás Santos servirán bajo ellos en varias capacidades administrativas.
- El Espíritu del Señor revelará muchas cosas durante el milenio que los hombres anteriormente no habrán conocido. En este tiempo nada les será retenido. Seres resucitados estarán sobre la tierra y enseñarán a los hombres muchas cosas importantes.
- Durante el Milenio todos los hombres reconocerán que Jesús es el Cristo pero muchos de ellos rehusarán juntarse con Su Iglesia. Habrán muchas otras iglesias sobre la tierra.
- Los esfuerzos de la Iglesia se dirigirán hacia tres objetivos durante el milenio:
A. La Obra Misional—la misión final a toda la humanidad.
B. La Obra del Templo—Seres espirituales y seres resucitados revelarán la información necesaria para conducir la obra en miles de templos que se habrán construido.
C. Enseñando a los Santos y preparándoles para la exaltación—ésto será hecho en gran parte por seres resucitados mandados de la presencia de Dios.
Notas, Capitulo Quince
- Isaías 65:20.
- Doctrina y Convenios 63:50-52.
- Doctrina y Convenios 63:49.
- Diario de Discursos, 18:320. En cuanto a este punto el Profeta José dijo que “Cristo y los Santos resucitados reinarán sobre la tierra durante los mil años. Probablemente no morarán sobre la tierra, pero la visitarán cuando quieran o cuando sea necesario para gobernarla.” La Historia de la Iglesia 5:212.
- Isaías 11:6-9. Véase Isaías 65:25.
- Apocalipsis 20:1-3.
- Doctrina y Convenios 101:28.
- 1 Nefi 22:26.
- Diario de Discursos, 7:355-56.
- José Fielding Smith, Doctrinas de Salvación [Doctrines ofSalvation], 3, pp. 63-64.
- Diario de Discursos, 16:319-20.
- Isaías 65:21-23.
- Diario de Discursos, 1:203.
- Doctrina y Convenios 130:1-2.
- Doctrina y Convenios 29:11.
- Doctrina y Convenios 45:59.
- Doctrina y Convenios 38:21-22.
- Isaías 2:3.
- Diario de Discursos, 14:350.
- Doctrina y Convenios 85:7-9. Ésta es una escritura muy contenciosa porque ha sido tomada y explotada por facciones apóstatas que se han separado de la Iglesia. Varios líderes de estos grupos han pretendido ser aquel “poderoso y fuerte.” Las siguientes declaraciones de clarificación son tomadas de un anuncio oficial de la Primera Presidencia de la Iglesia publicada en la Era de Mejoramiento en 1907. Se publicó el anuncio para explicar el significado de sección 85 de la Doctrina y Convenios que trata las funciones de Eduardo Partridge como Obispo del Condado de Jackson.
“Aquellos, empero, que hasta el momento se han proclamado a si mismos como el ‘poderoso y fuerte,’ han manifestado la mayor ignorancia de las cosas de Dios y del orden de la Iglesia. “Sí, su ignorancia insufrible y su egoísmo han estado a la base de todas sus pretensiones y la causa de toda la molestia en que han caído. No parecen tener presente el hecho que la Iglesia de Cristo y de los Santos está perfectamente organizada, y que cuando viene él que será llamado para repartir a los Santos sus herencias, será designado por la inspiración del Señor a las debidas autoridades de la Iglesia, asignado y sostenido según el orden proveído para el gobierno de la Iglesia.
“Por cierto, en la faz de esta clara declaración del Señor que los pecados de Eduardo Partridge le fueron perdonados, no pensamos que su triste y temprano fallecimiento fue el cumplimiento del amenazado juicio de la revelación. Pero del hecho que él fue el hombre así amenazado, no hay duda; no solo por razón de lo que aquí está expuesto, sino porque también Orson Pratt, uno que conocía a Eduardo Partridge y un participante activo en todos estos asuntos históricos, declaró públicamente desde el pulpito en la ciudad de Salt Lake, cerca del tiempo del fallecimiento de Presidente Young, que el hombre a quien ese pasaje de la revelación en cuestión se refiere, fue Obispo Eduardo Partridge. De la veracidad de esta declaración, no puede haber ninguna duda; y en este momento él fue el historiador de la Iglesia además de ser miembro del quorum de los Apóstoles.
“Ahora, en cuanto al ‘poderoso y fuerte,’ que será mandado por Dios, para ‘poner en orden la casa de Dios y para disponer por sorteo las heredades de los santos.’ ¿Quién es él? ¿Qué posición tendrá en la Iglesia? ¿En qué manera vendrá a su llamamiento? Dirigimos primero vuestra atención al hecho que esta carta entera mandada a Guillermo
W. Phelps, tanto como la parte luego aceptada como la palabra del Señor, tuvo que ver con los asuntos de la Iglesia en Sión, Independen ce, Condado de Jackson, Missouri. Y en tanto que por medio de su arrepentimiento y sus sacrificios y sufrimiento, el Obispo Eduardo Partridge sin ninguna duda obtuvo una mitigación del amenazado juicio en contra de él de caer ‘por el dardo de la muerte, como el árbol heido por el fulgente golpe del rayo,’ así también se puede considerar de haber pasado la necesidad de mandar otro para asumir su estación— ‘uno poderoso y fuerte, para poner en orden la casa de Dios y para disponer por sorteo las heredades de los santos’—y que se considera como terminada la ocurrencia entera de que trata la profecía.
“Empero, si hay aquellos que aun insistirán que el cumplimiento de la profecía que trata la venida de uno ‘poderoso y fuerte’ pertenece al futuro, los Santos de los Últimos Días deben saber que será un futuro obispo de la Iglesia que estará con los Santos en Sión, Condado de Jackson, Missouri, cuando el Señor les establecerá en esa tierra; y que también será tan bendecido con el espíritu y el poder de su llamamiento que podrá poner en orden la casa de Dios, perteneciente al departamento de la obra bajo su jurisdicción; y que con rectitud y justicia dispondrá ‘por sorteo las heredades de los santos.’ Poseerá la misma alta y exaltada estación que Eduardo Partridge poseía; porque este último fue llamado a hacer justamente este tipo de tarea—es decir, poner en orden la casa de Dios, perteneciente a la ubicación de los Santos en sus herencias. . .” “Uno Poderoso y Fuerte,” Era de Mejoramiento, Tomo X. No. 12, octubre de 1907, pp. 930, 939-41. - Diario de Discursos, 21:150-51.
- Apocalipsis 20:4.
- 1 Nefi 12:9-10.
- Diario de Discursos, 19:176.
- Diario de Discursos, 20:155.
- Diario de Discursos, 19:7.
- Joel 2:28-29. Aunque este pasaje es citado a menudo por los autores de los Santos de los Últimos Días refiriéndose a la restauración del Evangelio, B. H. Roberts comentó sobre el pasaje y lo aplicó directamente al Milenio: “Porque Pedro, haciendo referencia al Espíritu que estaba reposando en ese momento sobre los Doce Apóstoles, dijo, ‘esto es lo dicho por el profeta Joel,’ etcétera, la muy general opinión prevalece que la profecía de Joel entonces fue cumplida, y por lo tanto los últimos días habían llegado. Ésto es una interpretación completamente errónea del propósito de Pedro en refirirse a la citación tanto como del pasaje mismo. No hay ninguna duda que Pedro quiso decir solamente: Este Espíritu que ahora veis reposando sobre estos Apóstoles de Jesús de Nazaret, es ese mismo Espíritu del cual vuestro Profeta Joel dice que será derramado en los últimos días sobre toda carne. Obviamente no quiso significar que esta ocasión en que los Apóstoles recibieron el Espíritu Santo fue un completo cumplimiento de la predicción de Joel. Para insistir en tal exégesis sería culpar al jefe de los Apóstoles con palpable ignorancia del significado de la profecía de Joel. En la ocasión tratada el Espíritu Santo fue derramado sobre los Doce Apóstoles, quienes fueron dados poder de hablar en varias lenguas; la profecía de Joel, para su cumplimiento completo requiere que el Espíritu del Señor, el Espíritu Santo, se derrame sobre toda carne; y sin duda se refiere a aquel tiempo que vendrá en el bendito milenio cuando la enemistad cesará no solo entre hombre y hombre, sino aun entre las bestias de los bosques y del campo; y entre el hombre y la bestia, como descrito por Isaías . . . La Historia de la Iglesia l:xxxii.
- Doctrina y Convenios 101:32-34.
- Doctrina y Convenios 128:18.
- Doctrina y Convenios 107:55-57.
- Doctrina y Convenios 121:26-33.
- Doctrina y Convenios 133:45.
- Isaías 11:9.
- Doctrina y Convenios 84:99-102.
- Diario de Discursos, 20:18.
- Diario de Discursos, 14:321.
- Filipenses 2:9-11.
- Doctrina y Convenios 49:9-10.
- Diario de Discursos, 2:316-17. Véase Mosíah 27:31.
- Diario de Discursos, 12:274.
- Diario de Discursos, 2:189.
- Diario de Discursos, 7:142.
- José Fielding Smith, Doctrinas de Salvación [Doctrines of Salvation], 3, 64-65.
- Diario de Discursos, 14:321-22.
- Diario de Discursos, 25:185.
- Diario de Discursos, 19:230.
- Diario de Discursos, 9:317.
- Diario de Discursos, 8:225.
- Diario de Discursos, 23:188
- Diario de Discursos, 21:203-04.
- Moisés 7:64. Véase Moisés 7:48.
























