Saber quiénes son… y quiénes han sido siempre

Sheri Linn Dew (n. 1953) nació en Ulysses, Kansas, donde la avenida principal tenía un total de cuatro semáforos. Era la mayor de cinco hermanos, y cuando acabó quinto grado ya conducía un enorme tractor John Deere y trabajaba de sol a sol en la granja de cereales de su familia. Los domingos, su abuela Maudie Dew la recogía temprano para llevarla a las reuniones de la Iglesia, que se llevaban a cabo en el salón de la organización fraternal Odd Fellows. Ellas barrían colillas de cigarrillo, latas de cerveza y botellas de vino para preparar el salón para la reunión sacramental. La hermana Dew era “exquisitamente tímida”, pero participar en una pequeña rama de la Iglesia supuso hablar y enseñar mucho desde muy temprana edad1. Fue llamada como pianista de la rama cuando estaba en séptimo grado (sustituyendo a su abuela, que murió poco antes de que la hermana Dew cumpliera los doce años), y prestó servicio en la presidencia de la Primaria de su rama cuando tenía dieciséis años de edad2.

En 1978, después de obtener su título en Historia por la Universidad Brigham Young (BYU), comenzó a trabajar en Bookcraft, una empresa editorial en la que llegó a ser correctora. Tras cuatro años en Bookcraft, trabajó como correctora y editora asociada en la revista This Peoplehasta que entró en Deseret Book en 1988. En el año 2000 llegó a ser vicepresidenta ejecutiva en Deseret Book3.

Tanto Maudie Dew como la madre de Sheri, JoAnn Petersen Dew, le decían repetidamente que pertenecía a una generación escogida, y que había en ella algo especial. Ella cree que sus palabras la ayudaron a superar su dolorosa timidez y a aceptar ​responsabilidades cada vez más elevadas4. Tenía treinta y cinco años cuando se integró a la Mesa Directiva General de la Sociedad de Socorro durante la presidencia de Barbara W. Winder, y posteriormente sirvió como presidenta de la Sociedad de Socorro de la Estaca Sandy Este entre 1991 y 1996. Cuando fue llamada como segunda consejera de Mary Ellen W. Smoot en la Presidencia General de la Sociedad de Socorro, en 1997, solo tenía cuarenta y tres años5.

Cuando escribía y hablaba, la hermana Dew enseñaba con frecuencia a sus audiencias que debían aprender a confiar en el Espíritu Santo, y que el Espíritu les enseñaría de una manera individual. “La realidad es que, cuando se me permite hacer algo que bendice a otra persona, eso es el Espíritu. Esa es la obra del Espíritu”, dijo. “Cumples con una asignación del Señor para hacer una serie de cosas y, si el Espíritu está presente, funciona. Y si el Espíritu no está presente, no funciona”6. En su propia vida, ella recuerda que, cuando su padre la estaba confirmando miembro de la Iglesia sintió el Espíritu Santo tan fuerte que comenzó a llorar con mucho sentimiento7. No podía parar y continuó llorando aun después de regresar a su asiento. Ella dijo que esta experiencia le enseñó temprano que “el Espíritu Santo era real, y que en verdad podía marcar la diferencia en mi vida”8. Años más tarde, cuando se sentía incapaz de entender la guía espiritual en un asunto concreto, una amiga le sugirió que preguntase en oración cuál era la manera en que se sentía ella cuando el Espíritu le hablaba. Ha continuado orando para recibir ayuda a fin de entender “el lenguaje de la revelación”, y ha adquirido una firme confianza en su capacidad para hacerlo, lo cual siente que es esencial9.

Durante su tiempo en la Presidencia General de la Sociedad de Socorro, la hermana Dew expresó su convicción de que las hermanas de la Sociedad de Socorro debían mejorar en tender una mano de ayuda e incluir a quienes se sentían en segundo plano, incluso a las mujeres que, a los dieciocho años de edad, pasaban del programa de las Mujeres Jóvenes a la Sociedad de Socorro. Ella creía que una manera importante de hacer que las personas se sintieran incluidas era confiarles cosas para hacer: “Creo que a la mayoría de nuestras jovencitas a quienes les cuesta hacer el cambio no les resultaría difícil esa transición si las ponemos a trabajar y hacemos que se sientan involucradas y valoradas”10. Por otro lado, tenía poca simpatía por los miembros que esperaban pasivamente que la Iglesia hiciera que sus vidas fueran mejores. Decía que no era labor de la presidenta de la Sociedad de Socorro hacerla feliz a ella. La labor de la presidenta de la Sociedad de Socorro es “permitirme participar de lleno y tener una experiencia plena en la Iglesia”11. Durante su discurso en la Conferencia de la Mujer de BYU, la hermana Dew exhortó a las hermanas de la audiencia a entender su valor y a involucrarse de lleno.


Notas

  1. Sheri L. Dew, entrevista con Brittany A. Chapman y Kiersten Olson, 8 de octubre de 2010, págs. 2, 3–4, 11, 13, 20, 32, James Moyle Oral History Program, Biblioteca de Historia de la Iglesia (CHL, por sus siglas en inglés).
  2. Sheri L. Dew, entrevista con Christine R. Marin, 26 de febrero de 2002, pág. 2, James Moyle Oral History Program, CHL.
  3. Dew, entrevista con Marin, pág. 2; “Deseret Book Appoints New President”, Church News, 2 de marzo de 2002; “News of the Church”, Ensign, tomo XXVII, nro. 5 (mayo de 1997), pág. 109.
  4. Sheri L. Dew, entrevista con Kate Holbrook, 25 de abril de 2016, págs. 8–9, CHL.
  5. Dew prestó servicio en la Mesa Directiva General de la Sociedad de Socorro entre 1989 y 1990. (Sheri L. Dew, correo electrónico para Kate Holbrook, 11 de mayo de 2016; Dew, entrevista con Marin, pág. 2).
  6. Dew, entrevista con Chapman y Olson, pág. 34.
  7. Como muchos hijos de padres mormones, la hermana Dew se bautizó a los ocho años de edad. Con la ordenanza de la confirmación, se le invitó a recibir “el don del Espíritu Santo”, lo cual significa que el Espíritu Santo estaría con ella para ofrecerle guía y consuelo en tanto en cuanto ella viviera dignamente.
  8. Dew, entrevista con Holbrook, págs. 5–6.
  9. Dew, entrevista con Holbrook, págs. 6–7.
  10. Dew, entrevista con Marin, págs. 15, 21.
  11. Dew, entrevista con Marin, pág. 15.
  12. “Soy un hijo de Dios”Himnos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días (Salt Lake City: The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, 1985), nro. 196.
  13. “La Familia: Una Proclamación para el Mundo” se presentó por primera vez en la reunión general de la Sociedad de Socorro en 1995, por Gordon B. Hinckley, poco después de su llamamiento como el decimoquinto Presidente de la Iglesia. Esta proclamación fue emitida por la Primera Presidencia y el Cuórum de los Doce Apóstoles como una “declaración y confirmación de las normas, doctrinas y prácticas relativas a la familia”. (Julie A. Dockstader, “‘Best Season,’ but Also a Time of Turmoil”, Church News, 30 de septiembre de 1995; Gordon B. Hinckley, “Permanezcan firmes frente a las asechanzas del mundo”Liahona, enero de 1996, págs. 113–117).
  14. Los valores de las Mujeres Jóvenes se definieron en 1985, cuando Ardeth G. Kapp era Presidenta General de la organización de las Mujeres Jóvenes. En 2001, los valores incluían fe, naturaleza divina, valor individual, conocimiento, elección y responsabilidad, buenas obras e integridad. El manual de las Mujeres Jóvenes que se usaba en la época en que se dio este discurso decía del valor de la naturaleza divina: “He heredado cualidades divinas que me esforzaré por desarrollar”. (Véase Progreso Personal [Salt Lake City: The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, 2001], pág. 19; “News of the Church: Young Women Counseled to Stand for Truth and Righteousness”, Ensign, tomo XVI, nro. 1 [enero de1986], págs. 75–76).
  15. La presidencia de la Sociedad de Socorro emitió la Declaración de la Sociedad de Socorro el 25 de septiembre de 1999, durante la reunión general de la Sociedad de Socorro. Mary Ellen Smoot, Presidenta General de la Sociedad de Socorro, presentó esta declaración. (Julie A. Dockstader, “Declaration Reaffirms Roles, Values of Women in Church”, y “Truly a Day to Lift up Our Hearts”, Church News, 2 de octubre de 1999; Mary Ellen Smoot, “Alégrense, hijas de Sion”Liahona, enero de 2000, págs. 111–114).
  16. Citado en el original: “Diario de la oficina de Lorenzo Snow, 8 de octubre de 1900, págs. 181–182, archivos de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, Salt Lake City, Utah”. Véase también Truman G. Madsen, The Highest in Us (Salt Lake City: Bookcraft, 1978), pág. 9. Lorenzo Snow fue el quinto Presidente de la Iglesia, entre 1898 y 1901. El presidente Snow expresó ideas similares en su discurso de la Conferencia General de abril de 1901: “Cuando Jesús estaba en el pesebre… Él no sabía que era el Hijo de Dios y que anteriormente había creado la tierra… Él llegó a la edad adulta, y durante Su desarrollo le fue revelado quién era Él”. (Lorenzo Snow, en Seventy-First Annual Conference of the Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, 5–7 de abril de 1901 [Salt Lake City: Deseret News, 1901], pág. 3).
  17. Citado en el original: “Lorenzo Snow, Conference Report, abril de 1901, pág. 3; cursiva agregada”.
  18. Citado en el original: “D. y C. 138:56”.
  19. Véase Abraham 3:22–28. José Smith afirmó en un discurso en 1841 que “todos estuvimos presentes, y presenciamos la elección y nombramiento del Salvador, y la formación del Plan de Salvación, y nosotros lo aprobamos”. (José Smith, discurso, [5 de enero de 1841], Nauvoo, IL, Joseph Smith Collection, CHL. Accedido: 9 de mayo de 2016, josephsmithpapers.org; véanse también Doctrina y Convenios 138:55–58; y Alma 13:3–4).
  20. Citado en el original: “Job 38:7”.
  21. Citado en el original: “George Q. Cannon, Gospel Truth: Discourses and Writings of President George Q. Cannon, sel. Jerreld L. Newquist (Salt Lake City: Deseret Book, 1987), pág. 7; cursiva agregada”. George Q. Cannon fue miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles de 1860 a 1901, y sirvió en la Primera Presidencia junto a cuatro Presidentes.
  22. Citado en el original: “Harold B. Lee, ‘Comprender quiénes somos nos induce a sentir el autorrespeto que nos debemos’, Liahona, junio de 1974, pág. 35. Bruce R. McConkie, A New Witness for the Articles of Faith (Salt Lake City: Deseret Book, 1984), pág. 512”. Harold B. Lee fue el undécimo Presidente de la Iglesia, entre 1972 y 1973. Bruce R. McConkie fue miembro del Cuórum de los Doce Apóstoles entre 1972 y 1985.
  23. Los Santos de los Últimos Días creen que la tierra está en su última dispensación antes del regreso de Jesucristo, y se llama la dispensación del cumplimiento de los tiempos por la creencia de que el conocimiento y la autoridad del Evangelio de todas las dispensaciones previas serían reunidas antes de la segunda venida de Cristo. La expresión en sí se encuentra a lo largo de todas las Escrituras, especialmente en las revelaciones a José Smith. (Véanse Efesios 1:10; y Doctrina y Convenios 27:13112:30121:31124:41128:18, 20; véase también Rand H. Packer, “Dispensation of the Fulness of Times”, en Encyclopedia of Mormonism, ed. Daniel H. Ludlow, 5 tomos [New York: Macmillan, 1992], tomo I, págs. 387–388).
  24. Citado en el original: “D. y C. 33:3–4”.
  25. Citado en el original: “Abraham 2:8”.
  26. Citado en el original: “George Q. Cannon, Journal of Discourses, 26 tomos (London: Latter-day Saints’ Book Depot, 1852–1881), tomo XI, pág. 230”.
  27. Citado en el original: “Abraham 3:22–23”.
  28. Citado en el original: “D. y C. 138:53, 55”. Joseph F. Smith fue el sexto Presidente de la Iglesia, entre 1901 y 1918, y tuvo esta visión poco antes de su muerte. (Véase Robert L. Millet, “The Vision of the Redemption of the Dead [D&C 138]”, en Sperry Symposium Classics: The Doctrine and Covenants, ed. Craig K. Manscill [Provo, UT: Religious Studies Center, Brigham Young University, 2004], págs. 314–331).
  29. Citado en el original: “Doctrines of the Restoration: Sermons and Writings of Bruce R. McConkie(Salt Lake City: Bookcraft, 1989), págs. 197–198; cursiva agregada”.
  30. Citado en el original: “José Smith, History of the Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, editado por B. H. Roberts, 2.ª ed. rev., 7 tomos (Salt Lake City: The Church of Jesus Christ of Latter-day Saints, 1932–1951), tomo VI, pág. 364”. Véase también José Smith, Historia, 1838–1856, tomo F-1 [1 de mayo de 1844–8 de agosto de 1844], 12 de mayo de 1844, pág. 18, CHL. Accedido: 25 de abril de 2016, josephsmithpapers.org.
  31. Citado en el original: “Spencer W. Kimball, ‘Vuestro papel como mujeres justas’, Liahona, enero de 1980, pág. 168”. Spencer W. Kimball fue el duodécimo Presidente de la Iglesia, entre 1973 y 1985.
  32. Citado en el original: “Moisés 6:31”.
  33. Citado en el original: “Moisés 7:21”.
  34. Citado en el original: “Hechos 9:522:15”.
  35. Dentro de la Iglesia, el “noble linaje” a menudo se refiere a aquellos que son herederos de las promesas que se hicieron a Abraham (véase Génesis 13:14–1617:722:18), especialmente quienes han nacido en esta época de la historia de la tierra. La expresión se ha traducido como “juventud bendita” en un himno de los Santos de los Últimos Días escrito en 1930 por Ruth May Fox, que fue Presidenta General de la organización de las Mujeres Jóvenes entre 1929 y 1937. Esta expresión se ha utilizado en discursos de la Iglesia como el de Ardeth G. Kapp, “La juventud bendita”, Liahona, julio de 1984, págs. 126–127; el de Ezra Taft Benson, “Para la ‘juventud bendita’”, Liahona, julio de 1986, págs. 40–44; o el de L. Tom Perry, “Juventud bendita”Liahona, enero de 1999 págs. 86–89. (“A vencer”Himnos, nro. 167; J. Spencer Cornwall, Stories of Our Mormon Hymns [Salt Lake City: Deseret Book, 1963], págs. 48–52).
  36. Deborah. G. Felder, The 100 Most Influential Women of All Time: A Ranking Past and Present(Secaucus, NJ: Carol Publishing Group, 1996).
  37. Véanse Génesis 3:20; y Moisés 4:26.
  38. Citado en el original: “1 Samuel 16:7”.
  39. Citado en el original: “Moisés 1:12–13”.
  40. Citado en el original: “Moisés 1:4, 6”.
  41. Citado en el original: “Joseph F. Smith, Gospel Doctrine: Sermons and Writings of Joseph F. Smith (Salt Lake City: Deseret Book, 1986), pág. 14”.
  42. Citado en el original: “D. y C. 109:15”.
  43. Citado en el original: “Véase D. y C. 8:2”.
  44. Citado en el original: “3 Nefi 19:9”.
  45. Citado en el original: “2 Nefi 32:5”.
  46. Véase 1 Pedro 2:9.
  47. Citado en el original: “Lee, ‘Comprender quiénes somos’, pág. 34”.
  48. Citado en el original: “D. y C. 121:40”.
  49. Citado en el original: “Alma 46:15”.
  50. Dew, entrevista con Holbrook, pág. 5.
  51. Citado en el original: “Gordon B. Hinckley, ‘Apacienta mis ovejas’, Liahona, julio de 1999, pág. 124”.
  52. Margaret D. Nadauld fue Presidenta General de la organización de las Mujeres Jóvenes entre 1997 y 2002.
  53. Citado en el original: “Kimball, ‘Mujeres justas’, pág. 171”.
  54. Citado en el original: “Gordon B. Hinckley, ‘Our Responsibility to Our Young Women’, Ensign, septiembre de 1988, pág. 11”.
  55. Citado en el original: “Gordon B. Hinckley, ‘Vivid conforme a vuestra herencia’, Liahona, enero de 1984, pág. 144”.

 

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